FICHA TÉCNICA
Dirección: Mike McCoy, Scott Waugh
Guion: Kurt Johnstad
Producción: Mike McCoy, Scott Waugh
Música: Nathan Furst
Dirección de fotografía: Shane Hurlbut
Montaje: Scott Waugh, Michael Tronick
Diseño de producción: John Zachary
Vestuario: Erica Clum
FICHA ARTÍSTICA
Lisa Morales: Roselyn Sanchez
Abu Shabal: Jason Cottle
Christo: Alex Veadov
Walter Ross: Nestor Serrano
Sanchez: Emilio Rivera
Argumento:
Cuando una misión para rescatar a un agente de la CIA desvela inesperadamente un complot que podría tener consecuencias inimaginables, un equipo de guerreros de élite, altamente entrenados para el mundo contemporáneo, sale en una misión secreta. Estos SEALs tendrán que avanzar a contrarreloj en una misión que parece no tener fin, pasando por lugares conflictivos repartidos por todo el mundo y tendrán que luchar para mantener el equilibrio entre su compromiso con la nación, con sus compañeros y con sus familias.

Acto de valor se enorgullece de estar protagonizada por auténticos SEALs que están en activo actualmente, lo que nos permite ver de primera mano cómo trabajan estos militares tan entrenados, que de actuación por supuesto no saben nada, o se supone, porque salen bastante bien parados.
El caso es que aparte de encontrarnos una sucesión de armas, tiroteos y distintas fases de una misma misión, acabar con Mikhail “Christo” Troykavitch y Abu Shabal, terroristas altamente peligrosos, no va más allá. Se agradece que no intenten meternos el patriotismo por las orejas, aunque esté siempre presente, pero sin duda la mejor parte de la película es la primera parte de la misión, una de rescate, en la que vemos un auténtico despligue de habilidades. Luego vamos perdiendo el ritmo de la historia.

Con toques de videojuegos, sobre todo en esos momentos en los que si no fuera porque no tenemos un mando, podríamos controlar nosotros mismos a los soldados, la cinta no deja der ser una especie de homenaje al trabajo que realizan los militares, dado que nunca se saben tantos detalles del método del trabajo.
A la guerra se va a matar, pero también se puede morir, y eso se deja claro desde el primer momento, así que hay que tener cuidado con alistarse, no sea que uno se arrepiente en plena misión y no pueda volver atrás. Y no sólo son los soldados los que sufren, también las familias, a las que se tiene en cuenta en todo momento.
En definitiva, promete mucho, va flojeando por el camino, pero no deja de ser curiosa para descubrir cachivaches y poco más, porque sentimiento, le falta bastante.
