En profundidad: Don Gato y su pandilla

FICHA TÉCNICA:

Dirección: Alberto Mar

Guión: Kevin Seccia, Timothy McKeon

Producción: José Carlos García de Letona, Fernando de Fuentes, José Luis Massa

Dirección de arte: Mario Pons

Directores de animación: Jorge Medina, Alejandro García, Eric Cabello, Ariel Orea, Sean McCarron, Fabian Erlinghauser

Argumento:

Don Gato y su Pandilla se enfrentarán a un nuevo jefe de policía, quien no está nada contento con el oficial Matute y sus continuos fracasos tratando de evitar las estafas de Don Gato.
Lucas Buenrostro, el nuevo jefe de policía, posee un sinfín de recursos tecnológicos y su verdadera intención es apoderarse de la ciudad, imponiendo sus leyes absurdas. Don Gato y toda la pandilla harán lo imposible para evitarlo, contando con la ayuda del propio oficial Matute, en una película llena de humor, aventuras, romance, intriga, acción… ¡y mucha diversión!

Una vez más durante este 2012, el cine de animación infantil decepciona. Esta recuperación del clásico de Hanna-Barbera se queda en nada en comparación con el producto original. Y es que, aunque la idea original del guión pueda tener su encanto, las faltas técnicas y artísticas de la cinta la hacen hundirse estrepitosamente.

Para empezar, no sé por qué los estudios siguen empeñados en hacer películas de 90 minutos cuando tienen un target de público que no sobrepasa los 6 o 7 años de edad. Estirar una historia tan básica hasta esos límites no es sino condenar un proyecto al fracaso. El guión sufre, y mucho, la falta de carga argumental, y lo que es peor, la falta de chistes y situaciones cómicas que, al fin y al cabo, es de lo que vivía Hanna-Barbera, de hacer sit-coms animadas para niños.

Si a todo esto le sumamos el hecho de que la calidad de la animación deje bastante que desear, y que el doblaje en castellano sea tan plano y forzado que le roba cualquier tipo de carisma a todos los personajes, pues ya os podeis imaginar con qué nos quedamos. En fin, la falta de una oferta más amplia hará que probablemente haga una taquilla razonable, pero no será por merecérselo.