En profundidad: El bosque

FICHA TÉCNICA

Dirección: Óscar Aibar

Guión: Albert Sánchez Piñol

Producción: Ramón Vidal

Dirección de fotografía: Mario Montero

Montaje: Bernat Vilaplana

Música: Albert García Demestres

FICHA ARTÍSTICA

Ramón: Àlex Brendemühl

Dora: Maria Molins

Coixo: Pere Ponce

Pickett: Tom Sizemore

Fusteret: Josep Maria Domènech

Brigadista: Benjamin Nathan-Serio

Argumento:

Una familia del Matarranya (Bajo Aragón) esconde un secreto ancestral: cerca de la masía donde viven aparecen unas misteriosas luces, un fulgor sobrenatural que se hace visible dos noches al año, entre la maleza de un extraño bosque. Según la tradición familiar las luces son una puerta a otro mundo, de donde nadie vuelve al cruzarla, y esconden su existencia a los habitantes del pueblo mas cercano a la masía.

En 1936 estalla la guerra civil y las milicias anarquistas toman el poder en el Bajo Aragón. Ramón, el cabeza de familia de la masía, es perseguido más por antagonismos personales que por motivos ideológicos: “Lo Coixo”, uno de los anarquistas del pueblo, está enamorado de Dora, la mujer de Ramón, y quiere aprovecharse de la ocasión. Ramón se ve obligado a entrar en las luces y desaparece.

A partir de este momento Dora tendrá que resistir el acoso de “Lo Coixo” y la soledad que implica el escondite de Ramón. Para sobrevivir a la guerra y sus penalidades, Dora solo tendrá ayudas puntuales. Como la de Pickett, un oficial de las brigadas internacionales, o “Lo Fusteret”, un viejo anarquista del pueblo que se opone a la actuación de “Lo Coixo”.

Ramón también reaparece del bosque cuando el conflicto aún no ha terminado y su vuelta estará llena de elementos fantásticos. Ramón se reincorpora a la masía al final de la guerra, después de luchar con “Lo Coixo”.

El Bosque es una de las películas más extrañas que he podido ver en mucho tiempo. Eso de que en una masía haya un bosquecito que no se corta porque aparecen unas luces verdes los días de San Blas y San Lorenzo, y que encima el que entra ya no sale, es raro. Si encima le sumamos luego la explicación de lo que hay al otro lado de las luces, es ya para alucinar en colores.

No pasaría nada si fuera una película de ciencia ficción, pero es que ni va por ese lado, ni va por el de la guerra civil ni nada. No se sabe en qué género incluirla porque picotea de todos lados y de manera insuficiente, así que todo cojea un poco.

Lamentablemente, uno no siente empatía con ninguno de los personajes. De hecho, por mucho que estemos en los años 30, y en una zona bastante cerrada, algunos de los diálogos son de los que te suenen regular o mal, al menos con el doblaje en español sonaba todo demasiado forzado.

Tampoco la historia consigue enganchar en la parte del misterio de las luces, vamos viendo imágenes pero realmente te acaba importando bien poco lo que le ocurra al protagonista, al Coixo y a quien pase por allí. Desconozco si es porque el libro es complicado de adaptar o porque realmente  uno comprendería más lo que ocurre al leerlo, pero llega un punto en el que te da todo igual, si vuelve, sino lo hace, si Dora se queda sin gallinas…

Hora y media de film que se hace eterna, por mucho bosque, bosc o bosquet misterioso que haya.