FICHA TÉCNICA:
Dirección: Malik Bendjelloul
Guión: Malik Bendjelloul
Producción: Simon Chinn, Malik Bendjelloul
Fotografía: Camilla Skagerström
Montaje: Malik Bendjelloul
Argumento:
Dos sudafricanos se disponen a descubrir qué pasó con su improbable héroe musical, el misterioso rockero de los setenta Sixto Rodríguez.
No son muchas las ocasiones en las que merece la pena ir al cine a ver un documental. Esta es una de ellas. Y es que, pocas veces se encuentra una historias como esta, que superan la ficción por millas, y que emocionan más que un drama de Tolstoi sin dejar de resultar frescas.
Yo no sabía nada del músico americano de origen mexicano Sixto Rodríguez antes de ver la película, y sinceramente, contaros mucho de él en esta crítica me parecería espoilearos la película, cuyo mayor logro es llevarnos a través del viaje que uno de sus fans y un periodista llevaron a cabo para descubrir quién era este músico y por qué desapareció sin dejar rastro.
Con una fotografía preciosa, el documental se estructura “in crescendo” como si de una cinta de ficción se tratara, con una introducción, un nudo y un desenlace que se van desarrollando a través de la narración de los dos investigadores y las entrevistas con los numerosos personajes que tuvieron algo que ver en la vida y carrera fallida de este talento tapado de principios de los 70, todo ello bañado por la música increíble de Rodríguez que suena a clásico instantáneo desde la primera escucha.
Imprescindible tanto para los amantes de la música y los documentales, como para los amantes de las buenas historias.