En profundidad: Sin compromiso

FICHA TÉCNICA

Director: Ivan Reitman

Productores: Ivan Reitman, Joe Medjuck

Co-productores: Ali Bell, Annette Savitch

Guión: Elizabeth Meriwether

Argumento: Elizabeth Meriwether, Mike Samonek

Productores ejecutivos: Jeffrey Clifford, Roger Birnbaum, Gary Barber, Jonathan Glickman, Natalie Portman, Tom Pollock

Co-productora ejecutiva: Lisa Bruce

Director de fotografía: Rogier Stoffers

Directora artística: Ida Random

Montaje: Dana E. Glauberman

Diseño de vestuario: Julie Weiss

Música: John Debney

FICHA ARTÍSTICA

Emma: Natalie Portman

Adam: Ashton Kutcher

Dr. Metzner: Cary Elwes

Alvin: Kevin Kline

Patrice: Greta Gerwig

Lucy: Lake Bell

Katie: Olivia Thirlby

Wallace: Chris Bridges (Ludacris)

Eli: Jake Johnson

Shira: Mindy Kaling

Vanessa: Ophelia Lovibond

Argumento:

Cuando la chica de 14 años Emma Kurtzman rechazó los tímidos requiebros adolescentes de Adam Franklin en la puerta del Gran Pabellón de Camp Weehawken, ninguno de los dos sabía nada del sexo real y adulto. Pero sí que lo saben cuando, años después, Emma y Adam vuelven a a encontrarse (como parecen haber hecho al azar toda su vida) y terminan en la cama practicando el sexo. Y practicándolo muy bien.

Y puesto que Emma tiene, como ella dice, una “alergia morrocotuda a las relaciones”, y Adam igualmente las rechaza – mayormente porque su padre, una antigua estrella de la televisión, está saliendo con una reciente ex novia de Adam – , ambos deciden prescindir del follón emocional que conlleva una relación y ser simplemente amigos con derecho a roce. Rollo sin cuelgues, sexo sin sustos, coitos sin coste. Sin ataduras, ni mentiras, ni celos, ni achuchones, ni emoticonos, ni desayunos compartidos, sin “te echo de menos”, sin apodos para ciertas partes del cuerpo, sin liarse… en definitiva, “Sin compromiso”.

Lo que comienza siendo una solución perfecta para sus necesidades físicas se convierte en algo más peliagudo cuando Adam, sin darse cuenta, lleva sus sentimientos a la cama (y al armario del hospital, al asiento de atrás del coche y a prácticamente cualquier sitio que ofrezca un soporte horizontal). Al final, ambos terminan intentando desatar los lazos que intentaban evitar y esforzándose por responder a una pregunta clave: ¿pueden dos amigos practicar el sexo sin que el amor se interponga?

Sin compromiso es lo que nos venden, una comedia romántica con chico pillado y chica independiente, por una vez ella es más reacia que él a formalizar y a creerse unos sentimientos que van surgiendo a base de tener sexo.

¿Qué nos vamos a encontrar? A Ashton Kutcher luciendo cuerpo, chistes con mayor o menor gracia, un Kevin Kline interpretando a todo lo contrario que debería ser un padre y una serie de personajes que uno no sabe dónde ubicar pero que le dan más comicidad a algunas situaciones. Básicamente, podría tratarse de otra comedia romántica, pero posiblemente esta sea menos tonta que otras que hayamos podido ver.

Sencillamente esto es así porque no hay tantos tópicos a los que estamos acostumbrados y porque surge todo con tanta naturalidad que aunque nos lo esperemos, nos puede llegar a gustar el cómo llegar al final de la historia romántica.

El resto de la película está acompañado por los flashforwards para entender la relación de los protagonistas, aderezada por los éxitos de cada época, fácilmente reconocibles y por unos secundarios tan atípicos que no sabes por dónde te van a salir y que como decía, provocan o le dan un toque más cómico a la película.

Quizá lo más pintoresco sea ver el final de cada uno de los personajes, no solamente de los protagonistas, y así ver lo que ha ocurrido con cada uno, a los que vemos en situaciones cómicas o incluso alguna sorprendente. Por una vez no nos dejan colgados con el resto de historias secundarias, que aunque no sean relevantes, no quedan descolgadas de la temática del film.

Entretenida, para pasar un rato agradable y desconectar, y sobre todo, para ver en su esplendor a Ashton Kutcher.