FICHA TÉCNICA
Dirección: Kenneth Branagh
Guión: Ashley Edward Miller, Zack Stentz, Don Payne
Argumento: J. Michael Straczynski, Mark Protosevich
Producción: Kevin Feige
Co-producción: Craig Kyle
Producción ejecutiva: Alan Fine, Stan Lee, David Masiel, Patricia Whitcher, Louis D’Esposito
Fotografía: Haris Zambarloukos
Dirección Artística: Bo Welch
Montaje: Paul Rubell
Diseño de vestuario: Alexandra Byrne
Música: Patrick Doyle
Supervisor musical: Dave Jordan
FICHA ARTÍSTICA
Thor: Chris Hemsworth
Jane Foster: Natalie Portman
Loki: Tom Hiddleston
Profesor Andrews: Stellan Skarsgard
Laufey: Colm Feore
Volstagg: Ray Stevenson
Heimdall: Idris Elba
Darcy: Kat Dennings
Frigga: Rene Russo
Odin: Anthony Hopkins
Agente Coulson: Clark Gregg
Sif: Jaimie Alexander
Hogun: Tadanobu Asano
Fandrall: Josh Dallas
Argumento:
En el centro de la historia está el Poderoso Thor, un poderoso pero arrogante guerrero cuyos imprudentes actos reavivan una antigua guerra. Como consecuencia, Thor es castigado a ser enviado a la Tierra, donde se ve obligado a vivir entre humanos. Cuando el villano más peligroso de su mundo envía a las fuerzas más oscuras de Asgard, Thor aprende lo que hace falta para ser un verdadero héroe.
Estamos ante una de las superproducciones del año, de eso no hay duda, pero no es para menos. No se ha escatimado en efectos especiales, que hay que decir que son impresionantes, y no sé si se notan más en 3D o no, pero merece la pena verla en tres dimensiones por el conjunto estético de la película.
Lo dicho, unos efectos especiales de caerse, una fotografía impresionante y muy bien trabajada, mucha acción y actorazos. Tom Hiddlestonen su papel de Loki está muy creíble y aunque no es un personaje simpático, nos produce varias sensaciones a la vez, consigue que el espectador le tenga cariño y pena a la vez, cosa que no suele resultar fácil.
El resto del reparto principal, Anthony Hopkins en su línea, es un gran actor y lo vuelve a demostrar. Rene Russo lamentablemente la tenemos poco en pantalla pero realmente parece una reina con esa elegancia que desprende. La pareja formada por Natalie Portman y Chris Hemsworth no deja de ser curiosa por el tamaño de cada uno, más que nada, pero queda ahí insinuada y bonita, al menos la parte de la deidad es más caballerosa, la parte mortal es más pasional. La mezcla funciona.
En cuanto al séquito de Thor, o al malo malísimo Gigante de hielo Laufey o los acompañantes de Portman, como conjunto están estupendos y sinceramente, no imagino otras elecciones de actores.
Lo que está claro es que es una película con mucha acción y con altas espectativas debido a la gran cantidad de fans del cómic, pero Kenneth Branagh demuestra que puede dirigir cualquier cosa que se proponga. No tenemos tiempo a respiros ni bajones argumentales que nos puedan aburrir, y el hecho de introducir la caída de Thor y luego la explicación de por qué es enviado a la Tierra, aunque no es seguramente lo más común, es una buena forma de explicar lo que sucede.
Tanto si eres fan como sino, no te la puedes perder. Porque lo mejor de todo es que aunque no conozcas nada de Thor, con la película uno se entera y no se queda perdido.
Ah, y no os perdáis el cameo de Stan Lee.