LOS ODIOSOS OCHO
Rodeada de mucha expectación, la última película de Quentin Tarantino se ha estrenado este viernes en España.
Una película sobre la que se han hecho comentarios de todo tipo: un nuevo western que inicialmente iba a ser una secuela de Django Desencadenado; la última película de la carrera del director.. En fin, Tarantino es así, levanta expectación y polémica allí por donde va, y eso ¡Nos encanta!
Galardonada en los Globos de Oro por la Banda sonora de Ennio Morricone (Cinema Paradiso, Los intocables de Elliot Ness, La Misión), The Hateful Eight ha sido nominada en los Oscars por su fotografía, banda sonora y por el papel de Jennifer Jason Leigh como actriz de reparto.
A continuación nuestra opinión sobre un nuevo western de Tarantino..
Años 20, una diligencia en busca de refugio avanza a toda velocidad atravesando la fría nieve de Wyoming. En ella. el cazarrecompensas John Ruth (Kurt Russell) y su fugitiva Daisy Domergue (Jennifer Jason Leigh), pretenden llegar al pueblo de Red Rock para que Daisy sea juzgada. De camino se encuentran con el mayor Marquis Warren (Samuel L. Jackson), otro cazarrecompensas, y Chris Mannix (Walton Goggins), que afirma ser el nuevo sheriff de Red Rock. Debido al temporal deciden refugiarse en la Mercería de Minnie, pero la cabaña ya estará ocupada por cuatro desconocidos: Bob (Demian Bichir), trabajador de la mercería, Oswaldo Mobray (Tim Roth), verdugo de Red Rock, el vaquero Joe Gage (Michael Madsen) y el general Sanford Smithers (Bruce Dern).
Estos son los odiosos personajes que intervendrán en la historia de Tarantino. Como es habitual en sus películas, cada uno tiene su importancia en la trama. Al director se le da muy bien construir personajes, unos personajes muy solventes, originales y con mucha carisma. Quizás esta vez hayan quedado algo desdibujados dos de sus personajes: el vaquero Joe y el general Sanford.
Empezando por el principio (valga la redundancia), debemos avisar al espectador sobre la primera hora del largometraje. Es probable que a muchos os canse la habitual y particular verborrea del director. Nos encantan los diálogos que suele prepararnos, pero esta vez creemos que se ha pasado un poquito. Le sobran al menos 30 minutos. Si Tarantino no fuese el guionista de sus propias películas estamos de acuerdo en que no serían lo mismo, pero esta vez se le ha ido de las manos.
Una vez más el director consigue una fotografía excelente, aunque quizás menos llamativa que otras veces, en la que los colores vivos suelen predominar, pero se nota su marca de la casa. Esta vez opta por unos tonos marrones que le van perfectamente a la estación en la que se encuentran los personajes, y le da ese toque de color amarillo y rojo con el traje de Samuel L.Jackson. Desde Kill Bill ya no se puede separar de Robert Richardson, nominado de nuevo este año a los Oscars.
Quitando la primera hora, en la que vemos a los personajes de la diligencia atravesando nieve y más nieve para llegar a la mercería, el resto podemos decir que eleva sustancialmente la calidad y el entretenimiento de la cinta. Existe un punto de no retorno en la película que nos encanta, y a partir del cual Tarantino logra mostrarnos su especial forma de hacer cine. En esta película es más Tarantino que nunca, más escatológico que nunca, más bestia que nunca, ¡y como le gusta la sangre!
Es muy probable que tengáis una breve sensación de estar viendo la continuación de Django Desencadenado. Creemos que esta nueva trama, aun siendo divertida y entretenida, no es tan original como otras de la filmografía del director. Estamos ante un western que cuenta con dos cazarrecompensas y tiene un personaje que realmente recuerda a King Schultz, interpretado por Chistoph Waltz, sobre todo en la versión doblada en español. No sabemos si es un guiño a su anterior cinta, pero el vestuario, la forma de gesticular y la voz en español del personaje de Tim Roth es igual al de Christop Waltz. ¿Qué opináis?
Siguiendo con los personajes, el mejor sin duda alguna es el de Daisy, la fugitiva que espera ser juzgada en el pueblo Red Rock, y que es interpretado por Jennifer Jason Leigh, una actriz que lleva muchos años en este mundo, pero que gracias a Tarantino ha logrado ser nominada a los Oscars. Esperemos que se lleve el galardón, pues es la sorpresa de este año.
Por otro lado, Tarantino vuelve a contar con parte de su habitual reparto: Samuel L. Jackson, Tim Roth y Michael Madsen. Y repite con Walton Goggins y Bruce Dern tras su colaboración en Django Desencadenado. La sorpresa al saber que iba a contar con Channing Tatum fue máxima, pero, por suerte, su papel es muy pequeño.
Quedaros con esta cara porque creemos que triunfará en la gala de los Oscars. Está sublime en su papel de mujer sin escrúpulos, asquerosa, y mala malísima. Realmente genial.
En definitiva, Tarantino vuelve a sus orígenes con este estupendo aunque imperfecto western, repleto de grandes estrellas que interpretan a unos personajes construidos como solo el director sabe hacer. Espectacular banda sonora, fotografía y final de una trama que nos entretendrá, aunque no todo lo que hubiésemos deseado. Sangre y más sangre es lo que te espera, ¡nos encanta!