En serio, ¿Piensas tirar la toalla?

Hola amig@s, ¿cómo estáis? Yo no puedo estar más encantada de estar un día más aquí con todos vosotros.

Llegados a este punto, en el que el sol brilla, las temperaturas suben y los planes veraniegos afloran… Vengo con un artículo que, nos va hacer pensar de forma clara y bajo nuestras propias respuestas qué queremos.

Son muchas las ocasiones en las que soñamos, las que mencionamos qué queremos y cuán nos gustaría lograr ciertas cosas.

Pero te sorprenderá saber que el mayor número lo ganan las derrotas que llevan a cabo decisiones que toman como formato esencial “tirar la toalla”. Sí, así es.

Sé que tú como persona, habrás mencionado una y mil veces eso de “No voy / No tires la toalla”.

Pero la realidad bajo esa frase es escondida en una ficción.

La transformación real es que, sí, en la mayoría de los casos tomamos como mayor u mejor opción el rendirse.

Rendirse no debería de ser una opción, ni tan siquiera, planteársela.

¿Tienes claro qué quieres en la vida? 

¿Estás segura/o?

Si respondes afirmativamente ambas preguntas debes responsabilizarte de ello.

¿Has decidido rendirte? ¿Has tirado la toalla? ¿Tienes dudas? 

¿Por qué?

Debes considerar que lo que decides para ti, es por lo que has de luchar. Día sí y día también. Sin cavidad a excepciones.

Todos tenemos sueños, metas, objetivos… No importa que tamaño éstos tengan sino, la verdadera intención que tengas hacia ellos y la acción que representas y defiendes de forma recurrente.

Ahora bien, para que dejes de pensar en negativo hacia tus sueños, para que, continúes tu lucha de forma constante y resultante. Aquí te voy a dejar una serie de preguntas que te has de hacer.

Te recomiendo encarecidamente como siempre, que, o bien las anotes y las respondas en papel o bien, que las anotes, cojas grabadora y te grabes junto a tus respuestas.

Eso sí, fuera wifi, datos, cualquier distracción y 100% sinceridad.

¿Preparado/a?

Coge agua fresca, toma asiento y… Adelante. Relájate.

1. ¿Qué es exactamente a lo que estoy renunciando? ¿Por qué?:

Sabes perfectamente que la vida no es fácil. Sabes que labrar tu futuro es algo que únicamente puedes hacer tú.

Bien, ¿por qué crees que renunciando a tu sueño estarás mejor? ¿qué te hace pensar que aplazarlo es la mejor de entre todas las opciones?

Párate a pensar en tu dedicación, lo logrado hasta hoy, lo que te aporta, qué te hace sentir a ti y a quien te rodea. Elabora una lista de beneficios, de pros y contras y analiza.

2. ¿Estrategia o emoción?:

Ya sabes que todos nos movemos a través de emociones. Y el cúmulo de éstas puede llegar a ser inmenso.

Ten claro qué es lo que te ha hecho tomar la decisión de abandonar.

¿Falta de motivación? ¿ganas? ¿fallo en las estrategias? ¿carencia u baja tasa de resultados/beneficios?

Si algo no funciona, prueba a cambiarlo, no temas a seguir formándote. Tampoco descartes la opción de pedir ayuda algún experto de tu sector.

Busca aspectos que te motiven, analiza nuevas ideas.

3. ¿Lo estás dando todo?:

Para entregarte al máximo en un proyecto o un vehículo hacia tu sueño tiene que ser con todas las ideas claras.

Tienes que entregar todo de ti.

Sudar la gota gorda, equivocarte, aprender, crecer, rectificar, ser constante.

No importa cuántas veces tengas que volver a empezar. Son peores las veces que te rindes. No las sumes!

4. Actitud:

Tener la actitud correcta no se basa en imitar a todos aquellos actores de cine que ves que te identifiquen.

Sino que, has de seguir aquellos que bajo tu sector, han construido un vehículo sólido.

Todos aquellos quienes cumplen cada semana/mes/año sus sueños. Sin importar el qué dirán en absoluto.

Sé tu mismo. Todos tenemos defectos. Abraza tus obstáculos, errores, y contratiempos pues, así, podrás aprender cada día más y hacerte más fuerte.

Agarra bien las riendas de tu vida.

Fórmate, lee mucho. No imaginas la cantidad de dinero que hay en una librería/biblioteca.

La actitud se labra. Día a día.

Los miedos nos ayudan en esa tarea y nos fortalecen aun más si cabe según pasan los días.

Y sobre todas las cosas, no consideres NUNCA la opción de rendirte.

Eres capaz de cualquier cosa si así te lo propones.

Eres perfectamente capaz de cumplir todos y cada uno de tus sueños. Siendo enteramente sincero/a contigo mismo/a.

Un abrazo,

Omayra Montes