En "Transformers - Lección de Autonomía" vemos lo difícil que resulta a veces mantener la paz...

John Barber
Andrew Griffith
¡La guerra entre Autobots y Decepticons ha terminado! 
Bumblebee y sus compañeros intentan mantener el control en un mundo sin Optimus Prime, mientras su co-líderRodimus parte en busca de los Caballeros de Cybertron. En su planeta natal, la situación dista de ser perfecta, con el gobierno provisional de Bumblebee en constante tensión. 

Por su lado, Prowl se defiende de los Decepticons que quedan a cualquier coste que sea necesario, al mismo tiempo que Ironhide aparece acompañado por los Dinobots y Starscream ejecuta su plan maestro. La situación de paz es más conflictiva de lo que nunca fue en tiempos de guerra. Traiciones, conspiraciones, asesinatos, política, sorpresas y pactos de pasillo se suceden en una de las etapas más aclamadas de la historia de los Transformers.

Porque entre los Transformerstodo parece más fácil estandoen guerra…
Con la moda Transformer puesta en marcha por culpa de las “excelsas” películas del bueno de Michael Bay y sus ansias destructivas y de poner todo lo más grande, lo más explosivo y lo más colorido posible no es de extrañar que estos simpáticos robots convertibles en todo tipo de cosas variopintas se volviesen a pasear por el mundo de las viñetas… que nadie me entienda mal, era un apasionado de los Transformers allá por los 80 y me lo pasaba pipa viendo la serie animada protagonizada por Optimus Pime y soñando que ahorraba lo suficiente como para comprarme uno de esos muñecos que apenas se parecían a lo que veíamos en los dibujos pero con los que lo pasábamos muy bien hasta romperles una pieza… por eso lo tenía todo claro: los Decepticons son los malos y los Autobots los buenos… y por eso, quizá por eso, este cómic con mucha política, problemas sociales y raciales, odios internos, revueltas más o menos planeadas y un misterio por resolver no ha terminado de convencerme del todo… bueno y porque ¡¡no sale Optimus!!

A ver, que nadie juzgue el tebeo por anticipado, si os gustan estos tipos metálicos reconvertibles vais a disfrutar enormemente con este cómic entre las manos, vais a tener a mano decenas y decenas de personajes (todos con sus nombres imposibles de reproducir y de recordar) perfectamente dibujados  por Andrew Griffith, que ha debido disfrutar enormemente detallando cada carrocería y cada parte del planeta Cybertron y vais a tener una intriga política que pretende acabar con una paz entre los dos bandos enfrentados que no solo es frágil sino que parece abocada al desastre desde los primeros bocadillos.
Todo es mucho más fácil en la guerra, o eso piensa en todo momento Bumblebee, convertido en líder de Cybertron y sometido a las tensiones políticas por las que debe atravesar para intentar reconducir el mundo destruido y hostil en el que se ha convertido el ancestral planeta de los Transformers… mientras él intenta estabilizar y equilibrar la balanza del modo más justo posible hay fuerzas de todo tipo procurando hacer todo lo contrario… y Optimus ha muerto, o eso piensa todo el mundo.
La verdad es que el cómic es divertido y está muy bien planeado, eso no lo dudo, además la trama es mucho más seria de lo que podríamos sospechar tratándose de los Transformers… pero también creo que es ahí donde a mí no me llega a convencer del todo. Está claro que me han gustado mucho esos Transformers no alineados ni con los Decepticons ni con los Autobots, también me ha gustado mucho la presencia de mis ppreferidos, los Dinobots e incluso esos personajes que trascienden o atraviesan las líneas y son más negros que grises… pero no sé, sin estos robots dándose de leches en todo momento, las historias de los Transformers no son las mismas, no sé si me entendéis.
De todos modos este primer número de “Robots in Disguise” promete futuras aventuras mucho más ricas que las que estamos acostumbrados a disfrutar… veremos qué nos deparan en futuras ediciones de esta eterna lucha entre los unos y los otros, seguro que nos lo hace pasar muy bien.
Si queréis saber más...