¿Es posible que haya habido enaltecimiento del terrorismo en una obra de titiriteros dirigida al público infantil? ¿Ha sido una provocación estudiada, o la detención de los titiriteros ha sido desproporcionada? Creo que son muchos los aspectos que habría que analizar en este caso para saber (o al menos intuir) si se trata de una represión más a la libertad de expresión o, de alguna manera, estos titiriteros (y quienes los han contratado) querían lanzar una provocación (otra más) después de todo lo que está ocurriendo con lo de la memoria histórica en Madrid.
¿Exageración, enaltecimiento del terrorismo o simple provocación política?
¿Ha habido enaltecimiento del terrorismo en la obra o se ha exagerado con las medidas policiales?
Estos mismos titiriteros, según un breve video que acabo de ver, en otra obra anterior, también dirigida a un público infantil, acababan ahorcando a un guardia civil. ¿Es eso apropiado? ¿Cómo distinguir lo apropiado o no en una obra «artística» sin caer en la tentación de abrir las horribles fauces de la censura? Es un tema muy complicado y delicado, pero desde mi punto de vista, una posible solución a estas cosas sería distinguir entre el público infantil y el público adulto. Aunque estoy completamente en contra de la censura per se, entiendo que el público infantil requiere un grado mayor de control y/o protección y, por lo tanto, es posible que las obras que tengan que ser expuestas a los niños, tengan que pasar por un filtro previo con algunos criterios claros en cuanto a posible límites.
Si lo analizamos, los cuentos infantiles siempre han sido crueles y han incluido grandes dosis de violencia y no pasa nada. Caperucita roja, Blancanieves, Hansel y Gretel… Todos son violentos y supongo que no por ello deberíamos prohibir su exhibición. ¿Dónde ponemos el límite entonces? Difícil, pero si no queremos confundir a nuestros hijos más pequeños, quizás no sea apropiado que en las actividades infantiles se incluyan representaciones en las que un guardia civil (obra anterior de estos mismos titiriteros) o unos jueces (obra de la polémica actual) acaben ahorcados. Si a eso le añadimos unas pancartas a favor de ETA… ¿Qué hacemos?
En ese caso han sido los propios padres, presentes en la representación, los que han acabado llamando a la Policía al entender que lo que se les estaba ofreciendo a sus hijos no era un espectáculo apropiado. La Policía ha actuado con contundencia y los ha detenido por enaltecimiento del terrorismo. Enseguida, los defensores de ciertas tendencias políticas, han salido en su defensa sin más valoraciones, pero lo bien cierto es que desde el mismo Ayuntamiento de Madrid se ha dicho que se van a tomar medidas y se ha admitido que no habían visualizado la obra antes de aprobarla. ¿Desde dónde llega toda la manipulación?
Me encuentro en un punto en el que me cuesta, por una parte, posicionarme a favor de las detenciones, porque soy un defensor acérrimo de la libertad de expresión, pero al mismo tiempo me pregunto si no habrá sido un abuso por parte de los «guionistas y ejecutores» de la obra, quienes, aprovechando precisamente esa libertad de expresión han actuado de mala fe dirigiéndose a un público demasiado sensible. No sé qué decir. Puede que necesitara ver la obra completa y su contexto para poder decantarme por una u otra cuestión.
Ramón Cerdá
Enaltecimiento del terrorismo en una obra infantil was last modified: febrero 7th, 2016 by Ramón Cerdá