Conócete y elige una vocación
“Los chinos usan dos pinceladas para escribir la palabra crisis. Una significa peligro y la otra significa oportunidad. Por lo tanto, en medio de una crisis, mantente atento al peligro sin perder de vista la oportunidad.” (John F. Kennedy)
Encontrar un empleo no solo depende de ti, de lo que hagas o del esfuerzo que le pongas. Hay otras variables que también influyen. Muchas frustraciones en las búsqueda de empleo provienen de la creencia de que es por culpa de uno el no encontrar empleo, ya sea porque le falta un título, o más formación, o porque es una chica o un chico, o porque o porque….
Al contrario de lo que nos dicen otros muchos, no por solo buscar y buscar un empleo lo acabaremos encontrando. Puede que eso no suceda, porque aunque a veces se diga otra cosa, no solo depende de uno, y lo que no depende únicamente de uno sino también de otros, nos evidencia que su resultado está fuera de nuestro control. Lo que sí está en nuestro poder es encontrarnos una ocupación. Esa ocupación puede ser buscar un empleo, crear un proyecto empresarial, emprender un nuevo proyecto profesional, formarse, etc.
He oído opiniones muy diversas en relación a lo que debemos hacer para encontrar trabajo, lo cual es normal considerando que el caso de cada persona es diferente. No todos tenemos las mismas facilidades para encontrar un empleo (de los pocos que se ofertan para la gran cantidad de demandantes), ni los mismos contactos. Tampoco todos tenemos la misma facilidad para reinventarnos o empezar un negocio, ya sea por capacidades, por no conocer nuestra vocación, por carecer de medios económicos, etc.
Sea como fuere, uno lo que sí puede es aprovechar para encontrarse con él mismo, o ella misma, y así encontrar sus propias respuestas, ya sea solo o acompañado, más no quedarse parado. Lo peor que se puede hacer es perder la ilusión y no buscarse una ocupación.
Y ya sé que autoconocimiento, autoestima, vocación, inteligencia emocional, liderazgo personal, desarrollo personal… no se encuentra a veces en las prioridades de algunas personas cuando solo quieren encontrar un empleo o un trabajo, pero es porque todavía no han descubierto el valor que esa formación para la vida y para el trabajo tiene realmente. Descubrirnos y conocer lo que sabemos hacer bien, mejorar nuestra autoconfianza, buscar un propósito de vida… son cosas vitales que no pueden ser suplidas por más títulos, cursos, etc. que lleguemos a acumular.
No se trata de que este tipo de enseñanza caracterizada por su homogeneidad en los conocimientos, títulos, cursos, etc. no sirva para nada, sino que cuando ya todos los tienen, no marcamos la diferencia, no aportamos una ventaja respecto al resto que nos destaque para encontrar un empleo. En cambio, las habilidades que podemos desarrollar a través de un proceso de crecimiento personal son tanto útiles para poder utilizarlas en un empleo por cuenta ajena como para iniciar un proyecto profesional por cuenta propia.
Toda transformación personal no se realiza de un día para otro, ni es sencilla. En primer lugar, hay que encarar el miedo, que es lo que nos hace libres, porque evitamos que el miedo nos bloquee, y hacemos lo que tenemos que hacer. En segundo lugar, hay que pasar a la acción y, si deseas crear algo, debes hacerlo. Haz algo que te llene y que dé sentido a tu vida. Encuentra la forma de conseguir ese objetivo. Es un desafío muy grande, pero es lo que te motivará a levantarte por la mañana. Busca ayuda si la necesitas.
Imagen|Freedigitalphotos.net
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