Científicos
de las Universidades de Bradford y Glasgow (Reino Unido) han
identificado una nueva vía bioquímica que puede ser controlada
usando metformina y salicilato para tratar enfermedades causadas por
proteínas Janus quinasas activadas que están involucradas en el
control de la inflamación en ciertos tejidos. Ellas actúan como
controladores de acceso en la superficie de las células, en
respuesta a las señales liberadas por el sistema inmunológico y la
transmisión de estos mensajes dentro de la célula. Estas proteínas
Janus Quinasa, sin embargo, también pueden llevar mutaciones que las
hacen defectuosas por lo que se activan de forma permanente y pueden
convertirse en hiperactiva. Un fallo de las Janus quinasa 1 (JAK1) se
ha asociado a varias enfermedades. El estudio encontro otra proteina,
conocida como proteína quinasa activada por AMP (AMPK), capaz de
convertir JAK1 en defectuosa. De acuerdo con los resultados,
publicados en la revista Science
Signaling,
lo hace mediante la alteración química de dos aminoácidos de la
proteína clave JAK1 en un proceso llamado fosforilación. Esta vía
AMPK es capaz de inhibir la señalización JAK profundamente y parece
que reaccionan de una manera que otros fármacos que se dirigen a las
proteínas JAK no lo hacen. Los investigadores creen que este enfoque
también se podría utilizar para apagar otras proteínas Janus
quinasas, que se sabe son hiperactivas en otras enfermedades. Los
hallazgos sugieren que podemos diseñar futuras terapias para estos
trastornos utilizando esta vía ya que la AMPK puede ser estimulada
por una serie de fármacos antidiabéticos existentes, y éstos deben
ser investigados como posibles fármacos para el tratamiento de esos
trastornos.