Revista Cultura y Ocio
Encuentro con maría oruña, autora de un lugar a donde ir
Publicado el 12 marzo 2017 por De Lector A Lector @deLectorALectorHace unos días, unos cuantos blogueros fuimos convocados por Ediciones Destino en el Hotel de las Letras para un encuentro con María Oruña, con motivo de la publicación de su nueva novela Un lugar a donde ir.
Siempre es un placer acudir a estos encuentros y, por supuesto, no queríamos perdernos esta nueva oportunidad que se nos presentaba, ya que además de conocer a María, siempre estas reuniones resultan una buena ocasión para intercambiar pareceres con los autores sobre su obra, y nosotros teníamos prácticamente acabada la novela.
Para que veáis lo ameno e interesante de la charla con María, aunque en un principio acordamos que íbamos a reservar un cuarto de hora al final del encuentro para hablar del desenlace de la novela sólo los que habíamos acabado (o casi como era mi caso, pero que ya no me quedaba nada por descubrir), y así no destripar nada al resto, el tiempo se pasó tan rápido que lo agotamos totalmente y no tuvimos ocasión de hacerlo.
Empezó María tomando la palabra para, sin desvelar nada, hablarnos de su novela. Lo primero que nos dijo es que no se trata de una novela hiperrealista pero que nadie puede decir que lo que ocurre en Un lugar a donde ir no pueda suceder, ya que todos los hechos, los procedimientos, la metodología forense, los hallazgos históricos, etc. están contrastados.
Lo que ha querido María plantear al lector en esta novela es un juego de inteligencia, de entretenimiento y además un juego reflexivo que va implícito en el título de la novela, ya que todos los personajes buscan una dirección, un lugar a donde ir o quizás ni siquiera den cuenta de que lo buscan, pero lo cierto es que todos necesitamos algo por lo que levantarnos todas las mañanas y hacerlo con una sonrisa, queriendo también reflejar qué sucede cuando no tienes ese lugar a donde ir o por dónde o por qué senderos puedes terminar, salpimentando toda la historia de curiosidades históricas y forenses ya que cree que están un poco olvidadas en los medios, en la cultura en general y hay una modesta denuncia de fondo por la falta de financiación que tienen los historiadores, los investigadores, los geólogos y los arqueólogos, entre otros, y dedica la historia a todos los Juan Salvador Gaviota del mundo, a esa gente que merece ese homenaje y que sacrifica zonas de confort o roles por buscar otras cosas por el beneficio común o por egoísmo pero siempre intentan, sin hacer daño, ir contra la corriente
Quería contar una historia que rescatase lazos históricos que tienen que ver con nosotros, con suspense, misterio, velocidad pero no quedarse sólo en una historia de investigación sino que hubiese algo más ya que le sabría a poco quedarse con una trama en la que hay un nudo y un desenlace, quería que estuviese aderezado por otras cosas que pudiesen interesar.
Cuando escribe lo hace en el ordenador y no imprime lo escrito, por eso cuando le llegó la novela y empezó a ojearla vio que la enganchaba al leerla y entonces se dijo que había hecho un buen trabajo.
A diferencia de Puerto escondido en el que quizás descubriremos antes del final quién es el asesino, aunque no nos importará ya que lo que querremos es saber el porqué y para qué lo había hecho, en este la intención era que no se supiese quién era el asesino hasta el final, y que no fuera ni un psicópata ni un asesino en serie, sino alguien más inquietante: una persona normal a quien sucede algo que le lleva a matar, lo que hace que podamos estar todos dentro del saco. Hacer ver hasta dónde es capaz de llegar la gente cuando llega al límite, y además sin que se resuelva como si se sacara un conejo de la chistera.
Después de esto intentamos ir preguntándole algunas cuestiones que nos habían surgido durante su lectura y así nos enteramos que cuando ya tiene claro de lo que va a escribir y aunque no sepa cual va a ser la historia, pasa a documentarse, una labor que para ella es muy divertida y estimulante, y durante esa fase encuentra cosas que piensa que, como a ella, pueden llamar la atención de los lectores y las rescata para después ir introduciéndolas en la novela cuando ya va tomando forma la historia que quiere contar, lo mismo que peculiaridades que le llaman la atención de alguna persona o frases que después utiliza para construir los personajes.
También nos contó que la documentación le había llevado entre 4 y 5 meses que ha invertido en comprar y leer libros, visitar bibliotecas, contactar arqueólogos, ganarte su confianza y quedar con ellos allí donde estuviesen y que le contasen sus historias: "es ahí realmente cuando encuentras historias muy interesantes", nos dijo. En cambio, cuando llama para consultar algo sabe qué es lo que quiere y lo que busca saber es si es posible lo que se le ha ocurrido contar, quiere que lo que escribe sea creíble y realista.
Además, durante el proceso de escritura sigue con el proceso de documentación, aunque sabe perfectamente lo que va a contar y cómo lo va a contar, hasta que se pone a escribir no se da cuenta de que le puede faltar documentación de una u otra cosa y la quiere obtener para ser rigurosa en lo que cuenta.
También nos contó que es muy organizada y siempre tiene que tener un plan B por si algo falla. Por ejemplo elige la forma de matar antes de saber a quién a va a matar.
Aclaró que tiene todo pensado desde el principio pero sí que van surgiendo cosas en medio de la escritura. Una vez terminado vuelve a repasar todo y va añadiendo, quitando, poniendo...
También respecto a la manera de escribir quisimos saber si había ido escribiendo en el orden en el que leemos la novela o si había escrito las dos voces por separado. Nos contó que sí, que las había escrito por separado ya que son dos voces muy diferentes y habría sido muy complicado hacerlo de otra manera. Esto además sólo es posible teniendo un esquema previo y teniendo muy claro qué es lo que va a hacer con cada uno de los narradores aunque después vaya introduciendo cosas cuando une ambas.
Otra cosa que quisimos saber es de dónde había salido ese amor por la historia siendo ella abogada. Nos contó que ella nunca había estudiado derecho por vocación, de hecho quería ser corresponsal de guerra. A ella siempre le ha llamado la atención la historia, los misterios y para ella lo que es importante con esta historia es acompañar al lector durante el tiempo que dura la lectura de su novela y que cuando la acaben no se hayan sentido defraudados, que les haya dejado huella, que se hayan sentido identificados con algo, que les haya suscitado curiosidad algo de lo que cuenta. La mayor satisfacción es que le escriba la gente diciendo que ha tenido que parar la lectura para buscar en google algo de lo que habla porque le ha llamado sumamente la atención.
María nos habló de la importancia de que un libro tenga duende, ya que un libro puede tener una buena técnica, estar muy bien ejecutado, pero si no tiene alma y el autor no se desnuda cuando está escribiendo y muestra lo que a él le importa eso se nota.
Esta es otra de las razones por las que introduce el humor en la novela, aspecto sobre el que también la preguntamos. María nos dijo que no lo hace como algo intencionado, lo hace porque ella es así, es verdad que es un recurso literario para aligerar la lectura pero ella en su vida privada y profesional es así, es su manera de sobrevivir a la cantidad de catástrofes que nos rodean cada día.
También hablamos de los lugares en los que sucede la novela, lo bien retratados que están. María nos aclaró que en algunos de ellos como las cuevas o Italia sí que ha estado pero en otros como Méjico no, por eso agradece tanto que la gente le diga que se nota que lo conoce porque ha logrado hacer que la gente tenga la sensación de que ha estado ahí sin haberlo hecho, a base de documentación.
En cuanto a la unión de las dos novelas, la anterior y ésta, nos contó que aunque las novelas sí son autoconclusivas, la continuidad de algunos personajes viene dada porque cuando comenzó Puerto escondido sabía que iba a escribir sobre tres temáticas diferentes que quería tocar, la primera rescatar las historias que le contaba su abuela, la segunda las cuevas y la tercera que no nos desveló y que será la de su tercera novela.
A pesar de esto, y volviendo sobre lo anterior, hasta que no empezó a documentarse no sabía cuales iban a ser las historias y al ir documentándose han ido saliendo. Tenía la idea pero luego las historias la han ido encontrando a ella. Lo único que tienen en común la anterior novela y ésta son algunos personajes, la música y las citas ya que las tramas no tienen nada que ver, la forma en que están escritas es totalmente diferente. María quería cambiar de registro, e intentar dar otro paso más para no defraudar y para que el lector no se encontrara más de lo mismo. Por todo esto las tres novelas, las dos publicadas y la siguiente son totalmente autoconclusivas y se pueden leer de manera independiente (nosotras precisamente damos fe de ello ya que no hemos leído aún Puerto escondido).
Respecto a esto la felicitamos porque es verdad que en Un lugar a donde ir ha protegido mucho la historia de Puerto escondido explicando lo suficiente los personajes pero sin develar nada importante de lo que pasa con ellos en la anterior novela para no destripar al lector que no haya leído previamente la primera. María nos explicó que esto le costó sobre todo con el personaje de la forense ya que se tenía que entender que habían pasado ciertas cosas pero sin desvelar nada relevante. De hecho para poder hacer Un lugar a donde ir como novela independiente tuvo que volver a meter unas páginas de presentación de personajes que eran necesarias para algunos lectores.
Por último quisimos curiosear sobre si había escrito algo antes de estas dos historias. María nos confesó que sólo "La mano del arquero" y que tiene que agradecer a la editorial Destino que confiara en ella y que no la pusiera ninguna restricción ni la impusiera nada.
También nos quiso aclarar que el guiño a Dolores Redondo en las novelas es un guiño personal y no editorial. Cuando lo escribió no sabía que su libro se iba a publicar. La explicación de que esté ahí es que una noche vio a Dolores en Página 2, le interesó y al día siguiente se compró su libro. A partir de ahí la empezó a escribir en Twitter y empezaron un intercambio de comentarios y Dolores la empezó a animar para que siguiera escribiendo y siguiera luchando porque sus historias salieran a la luz, que ella también había salido de la nada.
Después de todo esto pasamos a la sesión de firmas y fotos.
Como siempre dar las gracias a Destino por invitarnos a estos encuentros tan maravillosos y a los autores, en este caso a María, por venir a Madrid y prestarse a ellos y a enfrentarse a las preguntas de los blogueros.