Encuentro de jóvenes afroespañoles. Día 2

Con este segundo post termino mi crónica del XX Encuentro de Jóvenes Afroespañoles que se llevó a cabo los pasados días 16 y 17 de noviembre (sábado y domingo) en Madrid. Si no leíste la primera parte del resumen, pincha en el enlace y leerás sobre los debates que tuvieron lugar el sábado; y ahora vamos a avanzar y te voy a contar los debates a los que asistí el domingo. La lástima fue que los debates de la tarde me los perdí, porque mi tren salía temprano por la tarde, y después de comer me tuve que marchar, así que desafortunadamente me perdí temas que sé que fueron interesantes. Una pena. Aún así, vamos allá con las ponencias a las que pude asistir el domingo.

Este post, como el post con el resumen del sábado, va vinculado a dos vídeos, por aquello de no hacer un único vídeo extra largo. Aún así, el segundo vídeo ya pasa un poco de los diez minutos. Espero que tengáis la paciencia suficiente para verlo (además, ¡que es en el que salgo yo!), porque vale la pena, de veras.

Querido Baltasar

Lo primero que veréis, en el primer vídeo, es la presentación de Chris Baz y la exposición de los motivos que le llevaron a grabar esta película. No voy a extenderme en explicaros sobre qué versa la película, porque en los próximos días quiero dedicarle un post por completo, ya que es una temática que me parece interesante. Si tenéis un poquitín de paciencia, llegará pronto.

Después de la presentación empezó la ponencia en la que participé, y es lo siguiente que vais a poder ver en el vídeo.

Liderazgo de las mujeres en la construcción del movimiento de liberación negro

Bajo este título se llevó a cabo un debate para hablar de la importancia de las mujeres. Para ello la mesa estuvo formada por José Javier Monroy, que presentó su libro Reinas Negras, un libro que habla sobre la importancia y el peso que algunas mujeres negras han tenido a lo largo de la historia, demostrando así que la mujer negra no siempre ha estado oprimida e infravalorada, sino que durante toda la historia ha habido mujeres detentando puestos de poder. Desde Hatsheput, que fue la primera faraona egipcia, hasta Winnie Mandela, el libro explica la biografía de algunas de estas mujeres importantes.

José Javier Monroy habló de que las mujeres necesitan modelos, y este libro lo que hace es precisamente eso, hablar de reinas negras, de modelos de mujeres que les pueden valer a muchas mujeres, tanto africanas como afrodescendientes. Lo que a mí me gusta de este libro es que se tendrá que reescribir, porque seguro que muchísimas mujeres negras seguirán haciendo historia.

Otra de las ponentes en la mesa fue Sikitu Massimango, que comentó que las mujeres con formación deben representar a su colectivo y no olvidarse de él; y que, fruto de su experiencia viviendo en diversos países, ha constatado que los estereotipos sobre el colectivo negro se asimila en todas partes.

También dentro de esta ponencia, intervino Consuelo Cruz Arboleda, una colombiana que reside en Madrid y que milita en el PSOE como coordinadora del Grupo Federal Afrosocialista. Consuelo, además pertenece a la Asociación Diásporas, es organizadora del Encuentro Internacional de Mujeres Afro, que en 2o14 celebrará su tercera edición.

Consuelo explicó su experiencia en la organización del II Encuentro Internacional de mujeres afro, que se celebró en Cali, Colombia, en el año 2011, y cómo consiguió algo que jamás se había visto en Colombia: celebrar la cumbre en el Hotel InterContinental Cali, un hotel de lujo.

También habló de la necesidad de que todos los partidos políticos abran espacios de representación para el colectivo africano y afrodescendiente, que nos represente y tome parte en la toma de decisiones de los partidos, que ahora no nos tienen en cuenta; así se conseguiría normalizar lo que está en la calle.

Después de la intervención de Consuelo llegó mi turno (¡qué nervios!). Fui invitada para hablar de la importancia de la belleza natural, y eso es lo que hice. Quería haber subido otro vídeo con la presentación que acompañaba a mi exposición, porque en este vídeo no la veréis, pero necesitaba hacer una grabación de voz en off, y como estos días estoy afónica, no he podido grabarla. Espero recuperar mi voz (esto se cosa de pocos días), y entonces podré grabar y enseñaros lo que vieron las personas que asistieron.

Una de las reivindicaciones que hice, centradas en la presencia 2.0 de la mujer negra, fue la necesidad de encontrar esos espacios y hacernos oír. Igual que las grandes firmas de maquillaje y cosmética cuentan con blogueras a las que les regalan los productos para que publiquen las reseñas (y les pagan por hacerlo) y así sus seguidoras tengan referencias de esos productos, las mujeres negras, como consumidoras que también somos de esos productos, tenemos derecho también a poder contar con esas referentes que nos hablen de esos productos que queremos utilizar.

Otro de los temas que traté fue la necesidad de empoderarnos, de encontrar aceptar nuestra belleza, y de aprender a explotar nuestros recursos. Vamos, lo que ya habéis oído en los vídeos un montón de veces; así que, para no hacerme pesada repitiendo lo de siempre, os recomiendo que veáis el vídeo.

Después de mi intervención se abrió un turno de debate del que me gustaría resaltar algunas cosas; como por ejemplo lo que comentó Consuelo Cruz sobre la necesidad de que las mujeres del colectivo tenemos que conocernos y encontrarnos para que tengamos nuestra propia rueda de negocios.

También intervino Luis Alberto Alarcón, hablando sobre el ejercicio del liderazgo negro de los hombres, de manera que se reconozca y se permita que las mujeres continúen ejerciendo el matriarcado y el verdadero liderazgo.

Sikitu Massimango también volvió a hacer hincapié en el hecho de que tenemos que ocupar espacios. Pero que, por encima de todo, y lo que es una tarea de todos, es velar y promover los derechos humanos, sin importar la procedencia ni el color.

Esto es lo que vais a ver en los dos vídeos que acompañan este post. Como he dicho al principio, me perdí los debates de la tarde, que fueron muy interesantes, pero el tren no espera. Pese a todo, tengo que decir que, para mí ha sido una experiencia de lo más satisfactoria, que me ha puesto en contacto con personas que luchan por que se cumplan los derechos de las personas, en este caso del colectivo afro en España, y que, sin yo saberlo, estoy aportando, con algunos de mis vídeos, pero sobre todo con mi punto de vista, mi granito de arena en esta lucha que todos deberíamos sentir un poco nuestra.