Ender. Reseña: La Voz de los Muertos, de Orson Scott Card

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¿Leíste y disfrutaste como un adolescente con El Juego de Ender? Es posible entonces que su continuación, La Voz de los Muertos, no sea aquello que esperas. Olvídate de la acción, la adrenalina, el odio a los extraterrestres y los juegos de guerra. La Voz de los Muertos es ciencia ficción, sí, y también es parte de la historia de Ender, pero no es lo que podrías esperarte de un segundo volumen de una saga.  Estamos ante una ciencia ficción mucho más pura y filosófica, más basada en el entendimiento con otros mundos que en el odio y la guerra. ¿Damos el paso a la madurez de la saga Ender? No sigas leyendo si no leíste El Juego de Ender, contiene spoilers.

La Voz de los Muertos nos sitúa en un momento en la vida de Ender pocos años después de los sucesos sucedidos en El Juego de Ender, pero que debido a la relatividad del tiempo en los viajes espaciales, han supuesto varios miles de años y una colonización espacial para la humanidad. Cien mundos han sido ocupados tras la masacre de los insectores, y ahora la humanidad se culpa de no haber sabido entender a esa raza alienígena que nos aterrorizaba en El Juego de Ender. Una nueva religión ha surgido de mano de los portavoces de los muertos, cuyo primer miembro habló en nombre de los insectores muertos para hacer entender a la humanidad el error que habían cometido. Ahora, sus sucesores recorren el universo acudiendo a las llamadas de los que desean que hablen en nombre de sus fallecidos.

Uno de estos portavoces acude a una llamada procedente de Lusitania, el único planeta de los 100 mundos en el que conviven humanos y la primera especia alienígena descubierta desde la aniquilación de los insectores. La humanidad se siente culpable tras lo sucedido en El Juego de Ender, y todavía no sabe muy bien si tratar a los Cerdis (nombre común que le han atribuido a los extraterrestres) desde el respeto a su ecosistema o desde el miedo a que se conviertan en una nueva amenaza. La llegada del portavoz al planeta supondrá un nuevo punto de vista, tanto entre los humanos, como en las relaciones con los Cerdis.

Orson Scott Card rompe completamente con el estilo de El Juego de Ender en una continuación que nada tiene que ver con la escuela de batalla, los juegos de guerra, la instrucción militar ni la inteligencia de Ender para resolver problemas tácticos. En su lugar, Scott Card se centra en la diplomacia, en ese punto intermedio entre no querer influir negativamente en la evolución de una especia desconocida y el miedo a que esa evolución se dispare y termine suponiendo una amenaza, en un universo que se autocastiga por la aniquilación de los insectores pero que se niega a reconocer el terror que le producen las especies desconocidas del universo.

En definitiva, estamos ante un libro completamente diferente a lo que vimos en El Juego de Ender. Los amantes de la acción no encontrarán aquí lo que esperan, pero sí que les ayudará a entender mejor lo que supuso para Ender y para la humanidad el trágico y sorprendente final de la primera novela de la saga de Ender. Gracias a esta separación de estilos y de temática, La Voz de los Muertos puede ser leída por aquellos lectores de ciencia ficción que no disfrutaron con la guerra contra los insectores y que prefieren una ciencia ficción más elaborada, al igual que por aquellos que ni siquiera se leyeron El Juego de Ender. Un libro imprescindible de la ciencia ficción actual, que mantiene la claridad de narrativa de Orson Scott Card, pero aplicado a una ciencia ficción más adulta, filosófica e intelectual.

Reseña de: Jesús García (periodista)