En la actualidad se puede afirmar que las acciones vitales del ser humano están influidas por las
radiaciones solares y otros factores de la tierra. A esto se le denomina ritmo cósmico o energía cósmica. Las funciones vitales tienen su menor nivel de rendimiento es entre las 2 y las 4 de la madrugada y su mayor actividad se produce, entre las 16 y las 18 horas. La influencia de esta energía proviene del ambiente externo influyendo sobre la energía celular de nuestro interior siendo inapreciable, y más inapreciable se se vuelve si el estado de salud es óptimo. Cuando el estado de salud es regular o malo hay una alteración entre la energía cósmica y la nuestra, produciendo desarmonía en todas nuestras células. No hay que olvidar que el organismo, está preparado para adaptarse a todo cambio de clima sin sufrir alteraciónes, lo que pasa que cuando existe la enfermedad, la energía externa afecta a la debilidad que hay en el cuerpo, modificando el ciclo de renovación de las células.
La energía psíquica sin embargo es la que tenemos nosotros mismos, el ser humano dispone de energía suficiente para mantenerla durante toda su vida, a pleno rendimiento. Todas las personas en algún momento de nuestra vida hemos llegado al límite de nuestras fuerzas, viviendo situaciones extremas, por ejemplo, cansancio esfuerzo físico sed frío calor etc... pero estas situaciones no son las que agotan nuestra energía, lo que causa nuestro agotamiento son las causas afectivas, siendo el principal motivo de que ésta "se acabe".
Durante nuestra vida sólo utilizamos una mínima cantidad de energía por lo que nos sobra muchísima más, aunque para conocer la que tienes has de conocer hasta donde llega tu mente, y las ventajas e inconvenientes que te proporciona, cómo la utilizas y para que, es decir, si es negativa o positiva afectarías o estás afectando a tu equilibrio natural. Las emociones los pensamientos y los estímulos son los que nos dan energía, se puede incluso cambiar la energía de las células alargando la vida de ellas, de esa forma nos ponemos en sintonía con la energía cosmica, las dos se cogen de las manos, para tener una mayor y mejor salud.
La mente influye sobre el cuerpo y un buen tratamiento para tener resultados totalmente positivos frente a una enfermedad, debe incurrir tanto a nivel psíquico como físico. Hay que sacar las emociones negativas a la luz ya que perjudican y nos reprimen de mala energía dando paso a la enfermedad.