Las campañas publicitarias de las bebidas energéticas están orientadas de forma cuidadosa hacia un público cada vez más juvenil. Atraídos por sus diseños, los adolescentes adquieren estas bebidas en la tienda de la esquina y las consumen solas o mezcladas con alcohol, a modo de droga temprana.
Energy Boy es una publicación de Guillem Sarriá y Borja Llobregat. Dos jóvenes valencianos que han recopilado 100 fotografías de latas de bebida energética, cedidas por uno de estos jóvenes consumidores. Puede comprarse en la Librería Dadá, en el MuVIM de Valencia.
Además, en breve tienen intención de enviar también alguna copia a Madrid. Podría ser mayor (“de hecho, su colección es mucho más amplia”) pero probablemente el proyecto, dicen, se quede ahí. Un pequeño sorbo de realidad. Un trago cultural de la nueva Valencia energética.
+info: CARNE PRESS
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