Aunque muchas veces nos gustaría, es imposible mantenerse siempre fluctuando entre emociones positivas.Vivimos de la alegría al enfado, de la tranquilidad al estrés, de la sorpresa a la tristeza…y lo único que podemos hacer para sobrellevar este zig zag de la mejor manera, es trabajar con nuestras emociones , tanto las positivas como las negativas. Es normal, preferimos incidir en las positivas y esperar que las negativas pasen lo más rápido posible. Pero ni esto siempre es posible, ni podemos dejar fluir como si tal cosa las emociones negativas , sin que nos encontremos con alguna consecuencia desagradable.
En el caso de l@s niñ@s , estas consecuencias son claramente más conocidas, en parte porque todavía están aprendiendo a gestionar sus emociones y su impulsividad y en parte porque muchas veces nuestra atención está fija en ellas y nuestra mente temiendo su llegada…
Y qué podemos hacer para ayudar a los niñ2s a gestionar sus emocines y en el caso que hoy nos ocupa el enfado…
En primer lugar debemos despertar su CONCIENCIA EMOCIONAL. Nosotros somos el reflejo fundamental en el que se miran , de manera que es importante que verbalicemos nuestras emociones y sus características. Preguntarnos cómo nos sentimos , por qué , si nos sentimos bien con esa emoción, qué podemos hacer para mantenerla o para cambiarla , si no nos sentimos cómodos con ella…Podemos hacerlo como un juego, recrear como frunce el ceño mamá cuando se enfada , o como se cruza de brazos papá cuando ve algo que no le gusta…Sin burlarnos pero con sentido del humor!
En este punto resultan de mucha utilidad los cuentos o los dibujos o películas que reflejan estas situaciones, y que generalmente tienen un desenlace positivo y que ofrecce a l@s niñ@s ejemplos de actuación. Aprovechemos para discutir sobre ello.
Vale…pero y cuando el enfado ya está aquí!! Evidentemente la información no es suficiente, para fijar los aprendizajes es necesario practicar, recrear y enfrentarse a la situación en repetidas ocasiones… Ante un enfado, o cualquier emoción negativa, es importante destacar y repetir QUE TODAS LAS EMOCIONES SON ACEPTABLES Y ESTÁN PERMITIDAS PERO QUE LOS COMPORTAMIENTOS NO…puedo estar enfadadísimo porque otro niñ@ no juega conmigo, pero no puedo insultarle, o tirarle el balón por ello. Estamos en pleno enfado…y para salir airosos de él , necesitamos autorregularnos. Debemos ayudar a buscar a l@s niñ@s aquellas actividades que les ayudan a calmarse en el punto álgido del enfado y esto es un trabajo previo que después podrán poner en práctica.
Escuchar música, moverse , aprender a distraerse o a mantenerse distanciado , o desarrollar un diálogo interno, pueden ayudar, pero como decimos primero deberemos dedicar un tiempo y un espacio a encontrar el modo más a propiado para cada uno cuando estemos en calma…
Una alternativa para el hogar que a mi me gusta especialmente es el rincón de la paz. Todo el mundo habla de la silla de pensar( de la que mejor no hablaremos…) pero porque no establecemos un rincón para recuperar y mantenerse en calma, donde poder distanciarnos del enfado antes de que se nos vaya de las manos. En él , puede estar esa música que nos ayuda a calmarnos o nos anima o algunos juegos y juguetes que nos ayuden a distraernos. Cuando la tempestad haya pasado , podremos hablar más y mejor sobre el enfado y sus causas para que no se repita la misma situación.
Algunos libros recomendados
“Vaya rabieta” De Mirelle d ´Allence (Biblioteca del Ratoncito Pérez)
“Soy un dragón” EDELVIVES