Según el estudio Epidemiología de las enfermedades cardiovasculares en España*, la enfermedad isquémica del corazón y la enfermedad cerebrovascular son los tipos de enfermedades cardiovasculares que producen un mayor número de muertes cardiovasculares, con un 60% de la mortalidad cardiovascular total: el 31% por enfermedad coronaria y el 29% por ictus.
La obesidad es un factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades cardiovasculares ¿por qué?, pues porque la inactividad física y una dieta no sana (los dos factores determinantes de la obesidad) son los responsables de un 80% aprox de los casos de enfermedad cerebrovascular y cardiopatía coronaria.
Diferentes estudios han demostrado una correlación entre enfermedades coronarias y el Índice de Masa Corporal, además existen argumentos suficientes como para concluir que la obesidad abdominal (la que se concentra en la zona abdominal, la típica "barriga ") supone un riesgo incluso mayor que la obesidad o sobrepeso en general.
El riesgo de padecer una enfermedas cardiovascular se puede reducir mediante la prevención o el tratamiento de la hipertensión y la diabetes, dos enfermedades que mejoran notablemente con la pérdida de peso.
así que la alternativa es....Perder PESO!!
Nuestra propia experiencia nos demuestra que la mayoría de pacientes que hemos tratado de sobrepeso y que han venido buscando el acabar con la obesidad, han conseguido además y en muchos casos, sin tenerlo previsto, mejorar su diabetes tipo 2 hasta niveles de dejar de ser insulinodependientes y han mejorado otras enfermedades asociadas como la hipertensión lo que les ha supuesto - además de un mejor estado de salud- el dejar de tomar medicamentos.
Esta misma conclusión fue a la que se llegó con el estudio Look AHEAD Study.
El estudio Look AHEAD Study , es una investigación llevada a cabo en Estados Unidos con 5.145 personas de 16 centros de estudio.
Todos los participantes en el estudio tenían diabetes tipo 2.
Como consecuencia de la pérdida de peso y del cambio en su estilo de vida no solo mejoraron el control de la diabetes tipo 2 sino también su tensión arterial y el resto de factores que los hacían más vulnerables a la hora de sufrir enfermedades cardiovasculares, esto es, mejoraron los niveles de colesterol y triglicéridos y otras complicaciones derivadas de la diabetes.
Resumiendo de un modo gráfico, cada kilo de menos es un kilo de más salud, por lo que sin duda, vale la pena plantearse el reto de adelgazar en serio con cualquiera de las opciones existentes hoy en día para combatir la obesidad.
Fuentes:
Look AHEAD Study