Revista Opinión
Ensayo sobre la lucidez y funar democráticamente las elecciones
Publicado el 10 septiembre 2012 por Jorge Gómez A.Funar las elecciones municipales interrumpiendo el proceso de cualquier forma es algo antidemocrático y autoritario. Ir a las urnas y votar nulo es lejos lo más democrático y revolucionario. Los jóvenes eligen.La vocera de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES), Eloísa González, llamó a “funar" las elecciones municipales del 28 de octubre, debido a la "nula respuesta de la clase política" a las demandas estudiantiles.La ambigüedad del emplazamiento –sin definir cómo sería la funa- ha dejado a los estudiantes en edad de votar entre una posición tremendamente antidemocrática que no obstante igual fortalece al poder, o una muy democrática e incluso revolucionaria. Hablando de Democracia en la Fundación Balmaceda con jóvenes estudiantes secundarios, surgió el tema del llamado a funar las elecciones hecho por la ACES. En mi opinión, la “funa” será de índole totalmente antidemocrática si se efectúa mediante coacción o interrupciones del proceso que ejercen otros ciudadanos; o puede ser de índole tremendamente democrática si los estudiantes deciden ir a las urnas y anular sus votos. La funa mediante acciones coactivas, tomas, interrupciones, da pie para que la clase política una vez más reitere que a los jóvenes no les interesa la política, que no valoran ni entienden la democracia, y que no respetan los derechos de otros ciudadanos. Por tanto, sus demandas y acciones responden a cuestiones viscerales. El poder en este caso, se ve fortalecido en todo sentido.La funa votando nulo o como les parezca, demuestra que los jóvenes sí valoran la democracia, la quieren mejorar, pero que las opciones electorales y partidarias en competencia no los satisfacen porque no los representan. El poder, igual que en Ensayo sobre la lucidez de Saramago, quedaría en jaque.Siempre es más contundente un gran número de votos nulos, que un gran número de abstenciones, porque el voto nulo implica interés en el proceso democrático, implica valores democráticos, pero falta de representatividad de los actores en el juego electoral. La abstención en cambio puede interpretarse de diversas formas, las más comunes como desinterés, flojera, ignorancia, etc. Sí a la abstención le sumas interrupciones del proceso, es claro que se interpreta de la peor forma.Esta semana, la vocera de la zona norte de la ACES, Eliana Saavedra dijo que no harían tomas de locales de votación en las elecciones, y agregó que “se van a usar otras estrategias, otras acciones que serán igual de importantes, acciones mediáticas". Queda la duda con respecto a cuáles serán esas acciones. Aunque ¿Qué más mediático y revolucionario que un gran número de votos nulos en la próxima elección?