Enseñanza en el franquismo. De dónde venimos.
Hablar de la enseñanza en el franquismo precisa recordar la IIª República, sin que esta mención pretenda más que una breve referencia de salida, para contextualizar, ya que el sistema franquista se construye en gran parte como contraposición a las ideas laicas y democráticas, que pretendieron igualdad y libertad extendidas ampliamente para el conjunto de los españoles. En esta época que vivimos tan confusa y revuelta en diagnósticos y alternativas, en la que tantos olvidos se producen y todo se cuestiona por muchos ‘adanistas’, que pretenden inventar el fuego, puede tener valor político echar un vistazo al lugar de dónde venimos y en el que estamos, los objetivos y sueños que se lograron en democracia.
Los índices educativos relacionados con la enseñanza, son fuertes indicadores del desarrollo social, económico y político de un país, sus cifras muestran múltiples sensaciones e indicadores en torno a una época concreta, los datos engloban concentrados aspectos de los sueños y tendencias de una sociedad; políticas inclusivas, igualitarias o discriminatorias, se manifiestan crudamente a partir de la política de construcciones escolares, de los porcentajes de escolarización de niños y niñas, en primaria, secundaria y universidades, de la discriminación sexista o económica en los distintos ciclos, cifras sobre el analfabetismo dirán mucho respecto a élites y gobernantes, como la esperanza de vida en la duración de los estudios, etc.
El franquismo: dos períodos (1939-1955), (1955-1975)
Tras la Guerra Civil comenzó una nueva época, enormes cambios fueron producidos en todos los ámbitos de la política, la convivencia, la cultura, las relaciones productivas, formas de vida… afectando de forma destacadísima al sistema educativo que fue rehecho por completo, -el sector de profesionales que colectivamente sufrió mayor depuración fue el cuerpo de magisterio-. Las huellas que dejaron las duras décadas de postguerra, años cuarenta, cincuenta y sesenta, serán notorias en aspectos como la exclusión de grandes sectores de población y la discriminación por razones de sexo y clase.
En los dos cuadros siguientes se muestra de forma sintética el corte radical que supuso el Régimen franquista. en ellos aparece el nivel de estudios de las generaciones nacidas en los años de referencia, En el primero ‘Nivel de estudios de las generaciones nacidas entre 1832 y 1984’, destaca el abrupto corte de las curvas que reflejan generaciones sin estudios o con estudios primarios, se produce un giro y vuelta atrás de la tendencia comenzada en el siglo que afectará a los nacidos en los años veinte, que desarrollarían estudios en los veinte años posteriores. Son los nacidos en los años cuarenta, cuya edad escolar se proyectará en el entorno de los veinte años posteriores, quienes volverán a la tendencia de largo plazo que representa la curva, mostrando ya fuerte reducción de la población sin estudios, entre los nacidos en los años sesenta. Al mismo tiempo se aprecia el ascenso a los estudios superiores y medios, de las generaciones nacidas a partir de los años cuarenta.
En el segundo cuadro, ‘Población masculina y femenina no escolarizada’ apreciamos que la igualdad de oportunidades de escolarización entre hombres y mujeres comienza a desarrollarse entre las cohortes nacidas a partir de los años sesenta. ‘’De ahí que el 0% de la población sin estudios no se consiga hasta que el 100% de los niños de entre 5 y 14 años tengan una media de 10 años de escolarización, lo que en el caso de España se da entre las generaciones nacidas a partir de 1980, como se observa en el gráfico 3.2.’’ -Clara Eugenia Núñez. Universidad Nacional de Educación a Distancia, responsable capit. 3 educación, ‘Estadísticas históricas de España, Fundación BBVA, de donde proceden los cuadros. –