El compartir es una de las cosas más difíciles para los niños menores de 6 años. Los niños necesitan tener muchos objetos que les den seguridad en sí mismos y en su entorno, pero es función de los padres enseñarles a compartirlos.
Para enseñar a nuestros hijos a compartir no es necesario obligarle a que entregue sus cosas al primer niño que se las pida, llamándole egoísta si no quiere hacerlo. A veces, cometemos el error de decirle a nuestros hijos que todos los juguetes son de todos. Lo más importante es que los niños aprendan que los juguetes tienen un dueño, y que cuando se quiere jugar con algo, hay que pedir permiso a su propietario. Además, deben entender que el propietario puede no querer prestárselo, porque hay cosas que algunos niños no están dispuestos a prestarnos. Todos los niños deben sentir el agradecimiento del otro niño por querer prestarle su juguete, y la experiencia contraria, sentir el rechazo del otro por no ser generoso. Sólo de esta manera, nuestro hijo aprenderá el verdadero placer de compartir sus juguetes.
Es muy importante llevar a cabo las siguientes pautas para enseñarles a nuestros hijos que compartir no es regalar sus cosas, y que pasado un tiempo volverá a recuperarlas: