"De pronto, la joven giró el volante con brusquedad y pisó el freno. El coche redujo drásticamente la velocidad, impulsándolos hacia delante, luego derrapó y al final se detuvo. Fen y la joven taxista vislumbraron, a la luz de los faros una forma humana. [...]
- No, claro que no...Yo también lo he visto.
- Me parece un poco raro - aventuró Fen, en un alarde de inusitada precaución."
Como ya sabéis me he aficionado a las novelas policíacas de los años 30 y 40, así que no pude resistirme a querer leer , pseudónimo del satírico escritor inglés Bruce Montgomery, y que ahora publica la editorial Este escritor, y su novela, han sido todo un descubrimiento para mí. Se trata de una saga que, incluso hoy, sigue ganando adeptos, como indica que otra de sus novelas, Enterrado por placer de Impedimenta. La juguetería errante, ya vaya por su novena edición en nuestro país.
En Enterrado por placer, su protagonista Gervase Fen, un profesor de Literatura de Oxford, que ha adquirido cierta fama tras resolver en el pasado varios crímenes, ha decido meterse en política y presentarse al Parlamento. Se desplaza para hacer campaña a las "tranquilas" tierras de la campiña inglesa pero, desde el primer día de su llegada, extraños y violentos sucesos no paran de producirse, viéndose arrastrado a la investigación de, no uno, sino de al menos dos asesinatos.
El autor se sirve del humor para desarrollar una historia de misterio disparatada y muy distinta al resto de obras de este género. Las situaciones y conversaciones más absurdas que se puedan dar, se darán. La primera situación, cuanto menos inusual, es el encontronazo de Fen con un lunático que corretea desnudo por el lugar, únicamente ataviado con unos quevedos, asaltando a las viejas y realizando pequeños hurtos, pero ¿podría tener algo que ver con el asesinato de una tal señora Lambert o el de cierto caballero, del que no diré nada más? También está el incondicional amor de un cerdo tarado hacia su ama, el extraño psiquiátrico de la zona, una joven de aspecto preocupado que sufre un terrible "accidente", un excéntrico escritor o las raras ideas de un cura sobre domar poltergeist.
Enterrado por placer es una obra de intrigas pausadas pero brillante, que comienza un poco lenta, ya que es imprescindible que el autor nos ilustre con como son las gentes del pequeño pueblo y sus alrededores, y así comprender mejor los extraordinarios sucesos que convulsionan tan apacible y aburrido lugar.
En más de una ocasión me he reído con algunas de las conversaciones o situaciones que se relatan. El autor plasma a la perfección los teje manejes políticos y la falta de escrúpulos del proceso, así como la vida rural y sus gentes, y el comportamiento apático o de piñón fijo de los votantes. Puede que la novela se desarrolle en 1948, pero es terrible ver lo poco que han cambiado ciertas cosas.
Fen es un avispado profesor de Oxford que, aunque no siempre lo quiera demostrar, está deseoso de toparse con un buen misterio. Ni siquiera él tiene muy claro por qué se presenta al Parlamento, yo creo que se aburre mucho y desea escapar un poco de la vida académica. Gracias a su inteligencia, y a saber seguirle la corriente a más de uno, logra desvelar tan horribles crímenes.
de Enterrado por placerEdmund Crispin es una novela policíaca muy distinta, inteligente, entretenida y disparatada que, por momentos, me ha recordado al camarote de los hermanos Marx, pero con asesino incluido. La narrativa de Crispin es excelente, aunque tiende a veces a ser demasiado descriptivo, cosa que compensa con constantes toques humorísticos y grandes dosis de misterio. Quizás, a pesar de la sátira, describe más fielmente el comportamiento humano, con sus virtudes y mezquindades, que otros autores.
Os animo a descubrir, además de este libro, el resto de la saga, publicada íntegramente por Impedimenta, y que consta de los siguientes títulos: La juguetería errante,, Trabajos de amor ensangrentados, El misterio de la mosca dorada, Asesinato en la catedral y, por supuesto, Enterrado por placer.
La ventaja de este tipo de novelas es que no hace falta leerlas seguidas, se pueden leer en le orden que uno prefiera sin que unas destripen la trama de otras.
Otro aspecto que quiero destacar, antes de que se me olvide, es la exquisita encuadernación y maquetación llevada a cabo por la editorial Impedimenta. Los libros están encuadernados en tapa blanda, con sobrecubierta, e incluyen una lámina que es un reproducción en miniatura de la propia portada. ¡Una preciosidad! Pero la cosa mejora, porque al quitarle la sobrecubierta, desvelamos que la cubierta del libro es una ampliación de la imagen de la portada, desprovista de cualquier título o nombre del autor que la estropee.
Desde aquí, ¡mil gracias a la editorial por el ejemplar y permitirme disfrutar de las aventuras del profesor Fen! ¡Un estilo único y diferente de resolver crímenes!
Argumento: Un nuevo misterio para el quisquilloso profesor Gervase Fen, uno de los detectives más inmortales de la edad de oro de la novela negra inglesa, que participa del ingenio de la mejor Agatha Christie y la gracia del P. G. Wodehouse más inspirado.
Hastiado de la aburrida vida universitaria, el excéntrico profesor y detective amateur Gervase Fen ( La juguetería errante y Asesinato en la catedral) decide tomarse un descanso y trasladarse al remoto pueblo de Sanford Angelorum, en plena campiña inglesa, para presentarse como candidato al Parlamento. A primera vista, la aldea parece un lugar tranquilo, pero, fiel a su instinto, Fen no tarda en descubrir que, una vez más, las apariencias engañan, y se sumerge en una oscura trama de chantaje que derivará en un misterioso asesinato. A medida que su incipiente carrera política deja de proporcionarle satisfacciones, Fen concentra todas sus energías en resolver el misterio, aunque, sin apenas darse cuenta, acaba atrapado en una desconcertante red en la que se topa con psiquiatras excéntricos, un cura que intenta domesticar un poltergeist, lunáticos que corren desnudos por el campo, mujeres hermosas y un cerdo algo tarado.