Wau!! ¡Vaya como empieza el 2021!
Lleva pocos días y así y todo, hemos entrado en la 3ª ola del Covid-19, hemos asistido al asalto del capitolio y a un Trump que se aferra al asiento de la Casa Blanca, unos congresistas que tiene que inhabilitarlo para que deje paso al presidente (supuestamente, Donald dixit), electo. Hemos padecido y disfrutado, aunque sin duda, no a partes iguales; del mayor temporal de nieve de los últimos treinta años (igual hasta me quedo corto). Al arranque de un despropósito educativo, como es la ley Celaá (éstos siempre gobernando de manera sectaria, a pesar de la que está cayendo, o quizás por ese mismo motivo). El posible comienzo de la 4ª ola del covid. Un nuevo estado de alarma y un nuevo cierre perimetral, de diferentes localidades, entre ellas Zaragoza, of course. El que tiene un apartamento en la montaña lo ve en fotos, poco más y el que tiene un amigo, que lo cuide, que ya quedarán a comer cuando todo esto acabe. Asistimos a la agonía y en ocasiones, irresponsabilidad interesada, de los negocios de hostelería. A la desaparición de las celebraciones familiares multitudinarias. A unos reyes descafeinados que tienen que aparecer en la tele con mascarillas y todas las medidas protocolarias anti-covid. A temperaturas de veinte grados bajo cero en muchas poblaciones. Hemos visto nevar en Madrid y el posterior colapso de la ciudad, después frío y hielo (algunos pueblos de la España vacía/vaciada/vacilada lo miran entre sonrisas, para que sepan lo que es vivir aislados algunos días de invierno, a algunos de ellos, les pasa todos los años y no una vez). Y lo dicho, no llevamos nada.
Se admiten apuestas sobre el resultado final de este 2021, mejor, peor, igual que el anterior. Ni chicha, ni limoná. Viajar, salir, quizás soñar... que toda la vida es sueño y los sueños, sueños son.
El domingo acabé el libro: "Nunca hemos sido los guapos del barrio", sobre la trayectoria y existencia del mítico grupo Hombres G, fueron el primer concierto al que asistí, un julio de 1986 en Teruel y los volví a ver el 10 de octubre de 2.015 en Zaragoza. Incombustibles. Disfruté, vi una España que ya no existe. Decía David Summers que había recibido la recomendación de que cambiara su "Devuélveme a mi chica", por homófoba, machista y faltona, que expresiones como "voy a vengarme de ese marica...", no tiene cabida en nuestra sociedad actual. Como decía David, nunca he estado en contra de ninguna ideología, pero sí en contra de la imbecilidad y los imbéciles. He enganchado directamente con el libro "Feria", de Ana Iris Simón, fue una recomendación de Sergio del Molino y la verdad es que lo estoy gozando, me hace reír y es completamente fresca y políticamente cuestionable, así que la estoy disfrutando, esta noche igual le doy matarile, pero en estos tres días, me he visto trasladado a La Mancha y a Campo de Criptana con los Simones y los Bisuteros, una delicia.
Ha empezado esto tan "shaking" que los retos han quedado postergados mientras veo la tercera temporada de Cobra Kai, otro "revival" de los 80. Bailo Camilito y su "vida de rico" con el peque y espero la nueva borrasca que anuncian ya para el miércoles.
Este año promete, coger palomitas, acomodaros en el asiento y dejemos que la vida nos sorprenda y estremezca. ¡Aquí hemos venido a jugar!