No es difícil realizar el seguimiento a los emprendedores, tal es el caso de Carlos García (nuestro emprendedor con nombre supuesto). Carlos, como empleado de la educación cuenta con su salario apenas alcanza a los U$ 300 al mes.Carlos, acaba de recibir una pequeña herencia de U$ 10.000 dólares americanos y desea convertirlos en un pequeño negocio que le permita sobrevivir, ha recibido su primera clase de empresas, donde le han indicado como crear una empresa, esto es una charla jurídica para enfrentar a la burocracia formal que asiste a la apertura de nuevas empresas.También a participado de las charlas denominadas “incubadoras de negocios” donde él a elegido la venta minorista de ferretería en general, han realizado cálculos muy interesantes con él y la rentabilidad es interesante: 35% promedio; es decir Carlos está muy entusiasmado con este paso y cuenta con el autofinanciamiento propio del negocio y con un “plan comercial”, luego de 30 días de visitas a abogados, registros públicos y fedatarios y casi U$ 1.000 dólares menos de su capital, Carlos ya cuenta con una razón social y un pequeño local alquilado en una zona comercial clase C (me refiero al nivel socioeconómico), incluso Carlos recibe ya visitas de agentes vendedores de servicios financieros e incluso le han cotizado un automóvil como para “su negocio”. Dos meses después Carlos busca asesoría empresarial y las “incubadoras de negocios” le ofrecen otros giros “más rentables” pero ninguna solución al problema de descapitalización de Carlos y su nueva empresa, más aún ; Carlos renunció a su empleo y ya no cuenta con el ingreso permanente que tenía. Conversamos con Carlos y la primera pregunta que le hicimos fue:¿Conoce Ud., el negocio de la ferretería en su localidad? Carlos, indicaba que lo conocía vagamente. ¿Conoce Ud., la cadena de aprovisionamiento para el sector ferretero en su localidad? Carlos dijo que no, finalmente le preguntamos: ¿Conoce Ud., el mercado objetivo del rubro ferretero y la competencia en su localidad?, definitivamente Carlos no lo conocía. Lamentablemente Carlos tenía la intención, el emprendimiento; pero carecía de la información necesaria para afrontar al mercado, desconocía las relaciones entre los aprovisionadores mayoristas y los clientes finales con el intermediario, en este caso él. Para lo que venía ocurriendo en su pequeño negocio, poco servían los mensajes de la Visión, de la Misión y el gran espíritu emprendedor, pues el mercado es muy dinámico y si no estás al mismo ritmo, puedes perderte y salir del mismo. En el Perú, mas de 9 millones de personas están involucrados con las pequeñas empresas, muchas de ellas, al igual que Carlos, dependen económicamente de las mismas; el estudio de Global Entrepreneurship Monitor (2005) demostró que más del 75% de estas solo supervive entre 0 y 42 meses y un 25% logra sobrepasar esta, de casi 4 millones de empresarios emprendedores, solo un 10% a 12% alcanza algún crédito de la banca, esta situación se debe fundamentalmente a la falta de apoyo real del Estado al emprendedor, los problemas relativos con la mortalidad son fundamentalmente administrativos (Gestión del negocio), financieros (gestión del capital), operativos (Gestión de la logísticas y de las ventas), estratégicos (como enfrentan la demanda y los cambios en el mercado), externos (como enfrentan cambios de la tecnología y de la estructura legal) y esto no se les enseña a los emprendedores, se les incentiva a participar en un mercado competitivo que tiene una arista peligrosa del otro lado: La informalidad, puesto que muchas de las pequeñas empresas entran al círculo de la informalidad, falseando información tributaria relevante y aprovechando de los financiamientos de un sector financiero oculto e informal (prestamistas informales, cambistas de divisas, usureros; etc). Se estima que el comercio informal en Lima mueve mas de S/. 6.000 millones al año. Realizamos un pequeño experimento junto a Carlos: nos apersonamos a un campo ferial en Lima, donde ofrecimos un producto de procedencia asiática de una marca reconocida, en mas de 10 tiendas ferreteras obtuvimos el rechazo por el “costo alto” del productos original, ellos tenían otro de similar, también asiático y al 30% del costo, pero lo venden casi igual que el precio del original, con ello su margen de ganancia supera fácilmente el 100% ¡, luego tampoco utilizan facturas oficiales u otros documentos contables para efectos de tributación. Solo en el año 2013 Sunat indicaba que entre los tributadores formales existen mas de U$ 300 millones anuales de pérdidas de recaudación fiscal, pero vea este ejemplo: En Lambayeque (Chiclayo) existen 42.000 empresas formales y mas de ! 700.000 empresas informales ¡ esto significa que la informalidad alcanza a 94% del total de pequeñas empresas.http://www.larepublica.pe/24-06-2013/sni-advierte-incremento-del-indice-de-mortalidad-de-las-microempresas Aquí el gran responsable de no saber dirigir a este gigantesco ejército de emprendedores cuya disyuntiva al final es acabar en la informalidad o perder el total de su capital , es el Estado y los responsables directos son los Gobiernos y sus Ministros, quienes se muestran hasta ahora incapaces de resolver este problema de la pequeña empresa.http://gestion.pe/economia/reduccion-informalidad-casi-nula-poblacion-ocupada-este-sector-habria-cerrado-676-2013-dice-comexperu-2093768
Revista América Latina
Entre la Informalidad y la Muerte: La vía crucis de las pequeñas Empresas y la Responsabilidad del Estado
Publicado el 10 mayo 2014 por Jorge Jorge ParejaSus últimos artículos
-
Crisis Económica Peruana - ¿Que puede hacer una empresa en una coyuntura estanflacionaria?
-
Las remesas: ¿Medio estabilizador económico?
-
La Corrupción Política y la inestabilidad social en el Perú 2023
-
Los riesgos financieros en las operaciones comerciales de corto plazo