CA: Primero que todo me gustaría que nos contaras un poquito de “Olga de Papel”. EG: La protagonista del libro es una chiquilla de 11 años, se llama Olga, es menuda y de carácter apacible y silencioso, y posee un don especial: sabe contar historias. En toda la comarca de Balicó es conocida por esto: por sus historias, por cómo las cuenta y porque dice que las ha vivido en primera persona.
La sabia peluquera del pueblo sostiene que Olga crea sus historias con los fantasmas de la infancia, que atrapa en mundos cerrados para que no den miedo. O den un poco menos. Por eso tienen tanto éxito estas historias: porque derrotan a «monstruos» que en realidad asustan a todos, a grandes y pequeños.
Un día, para consolar a un amigo de ánimo frágil, apodado Oruga a causa de su aspecto blando y ridículo, con el que la tienen tomada los gamberros del pueblo, Olga le cuenta la historia de la niña de papel. La niña de papel no quería ser de papel, así que un día se marchó de su pueblo para ir a pedirle a la maga Auselia que la convirtiera en una niña normal, de carne y hueso, igual que los demás. El viaje fue largo y aventurero: la niña de papel conoció a variados personajes, cada uno de ellos extraordinario a su manera, y todos la ayudaron en alguna etapa de su empresa, unos llevándola, otros acompañándola, otros planteándole preguntas difíciles, otros engañándola incluso. Y solo cuando Olga de papel vio a la maga comprendió cuántas cosas había conseguido hacer pese a ser de papel. Y ya no le pidió a la maga que hiciera el hechizo.CA:¿Cómo fue tu transición de periodista a escritora de cuentos para niños? EG: Acababa de terminar un trabajo con Roberto Benigni, estaba haciendo la película de Pinocho, cuando un editor italiano me pidió que escribiera un libro, así que escribí Fairy Oak y me convertí en escritora.CA: ¿Cómo fue escribir Olga de Papel? EG: Fue muy diferente de lo que había hecho antes, más desafiante porque había dos historias paralelas, pero tenía que encontrarlas al final, y porque la protagonista necesitaba un estilo diferente de escritura, más seco y más ligero, una escritura fina, como un papel.Realmente disfruté escribir Olga de papel.
CA: ¿Fue difícil para ti transmitir todos los mensajes acerca del valor y el aprender de los errores? Sabía que no quería sonar como un maestro que da lecciones de vida. Teniendo esto en cuenta, traté de hacer que los lectores sintieran que no estaban solos. He escrito este libro porque deseaba que los niños supieran que es instintivo y natural querer ser igual que los demás, sentirse parte del grupo, y que la sensación de ajenidad, de diferencia, de inadecuación, que a veces o a menudo nos asalta, ¡es bien conocida y extensísima! No los alcanza solamente a ellos, a los niños, sino a todos en todo el mundo. Porque aprender a conocerse, y después a aceptarse por lo que se es, es un largo viaje extraordinario.
CA: ¿Cuál Olga (Tindal o Papel) fue la más sencilla de escribir? EG: Creo que con Olga de papel. Todo era nuevo y divertido.
CA: En Olga de papel vemos un poco de intimidación hacía ciertos personajes, pero también vemos la respuesta de otros hacia ese acoso, ¿Qué les dirías a los niños que sufren de bullying? Durante el relato de Olga a Oruga —y no solo a él—, el chiquillo descubre que tiene mucho en común con la niña de la historia, y va convenciéndose poco a poco de que la fragilidad es propia de las cosas valiosas y de que todos tienen derecho a ser como son.
CA: ¿Por qué escribir para niños? EG: Empecé a escribir para niños en Disney cuando tenía 23 años, creo que podemos hablar sobre la impresión.
- Preguntas Random – ¿Quién es tú autor o autora favorito? Hay muchos, realmente, ya que no soy un lector fiel. Aquellos a quienes he sido más fiel son Natalia Ginzburg, Andrea Camilleri, David Grossmam, Maria Bellonci y Gabriel García Márquez ... Les cuento una historia: estuve en la Ciudad de México para el lanzamiento de Fairy Oak, hace unos 10 años, cuando alguien me mostró la lista de los libros más vendidos de la semana: hubo G.G. Márquez en primer lugar y Fairy Oak en segundo. Cuando vi mi nombre al lado del gran maestro, ¡me desmayé un poco!
Música favorita. Soy omnívora, del soul al rock y al hip hop mordisqueo aquí y allá. Suelo escribir con bandas sonoras de películas suaves. Y soy una diversión de Bruce Springsteen.
Actor o actriz favorito: Judy Dench, Helen Mirren, Penelope Cruz, Saorise Ronan, Gary Aldman, Ewan McGregor…
Película favorita Big fish, Breakfast at Tiffany, C’era una volta il west (Sergio Leone)
Si pudieras tener un súper poder, ¿cuál sería? Ser invisible
Descríbete en una sola palabra. Imposible.
Tu primer pensamiento esta mañana fue… Si me quedo quieta, Berry (nuestro perro más joven) no sabrá que estoy despierta y me dejará quedarme en la cama un poco más.
¿Cómo es un día normal en tu vida? Vivimos en el campo, así que suelo alternar la escritura con la jardinería y los paseos con perros. Puede parecer fácil, pero en realidad el campo es muy agotador. Pero así nos gusta. Suena idílico, lo sé, y lo es si te gusta la soledad, la fatiga, el barro, el polvo y las arañas.
Si pudieras cambiar de lugar con cualquier persona en el mundo, ¿con quién lo harías y por qué? Donald Trump, para reparar todo el daño que ha hecho y sigue haciendo al mundo (y especialmente a los mexicanos).
Por último, ¿algún mensaje para los lectores de Chaos Angeles? Espero encontrarme con ellos pronto en México y deseo que todos tengan un buen libro al que regresar al final del día.
Muchas gracias por tu tiempo. ¡Gracias a ti!...
Elisabetta Gnone nació en Génova y vive en las colinas de Monferrato, en el Piemonte italiano. Tras haber participado en la creación y direcci ón de algunas de las revistas más populares de Disney (Bambi, Winnie the Pooh, Minnie o Chip y Chop) y haber ideado la serie de comics W.I.T.C.H., se ha dedicado a la escritura de forma exclusiva. Así surgió la saga Fairy Oak, que ha conquistado a cientos de miles de lectores en todo el mundo. Durante estos últimos años, Elisabetta ha trabajado en Olga de papel, una historia sobre la importancia de contar historias.