Entrevista a Gill Hornby, autora de ‘Las abejas reina’

“Es importante encontrar el lado divertido de las cosas, es un mecanismo para sobrevivir”.

“Las mujeres nos necesitamos las unas a las otras, necesitamos estar juntas, desayunar juntas, ir a comprar juntas, organizar mercadillos juntas…”.

Por Carmen Fernández Etreros (texto y fotografías).Esta mañana calurosa de septiembre entrevistamos en Madrid a la escritora Gill Hornby, que ha debutado como novelista con la divertidísima Las abejas reina. Una novela que utiliza como metáfora el mundo de las abejas para mostrar las relaciones de amistad y rivalidad entre las mujeres.En una pequeña localidad situada en la campiña inglesa en el St. Ambrose, un colegio público de primaria, comienza el curso y las madres a propuesta del nuevo director Tom Orchard tienen que organizar actividades para obtener fondos para el colegio. Bea y su grupo de mujeres comenzarán el curso con mucho entusiasmo pero también surgirán entre ellas roces y rivalidades.Hermana y esposa de escritores de éxito (Nick Hornby y Robert Harris), su novela llega a las librerías españolas editada por Planeta y pisando fuerte: Las abejas reina va a ser publicada en 12 países y sus derechos para el cine ya han sido adquiridos por una de las grandes productoras de Hollywood.P. Las abejas reina comienza en un colegio en el que un grupo de madres deciden crear un grupo para recaudar fondos en una época de crisis, ¿de dónde surge la idea de la novela? ¿De alguna experiencia personal?R. La idea surgió cuando mi primer hijo comenzó el colegio y debido a esta época de crisis tuvimos las madres que inventar una serie de actividades para recaudar fondos. En las escuelas siempre hay crisis y se suelen organizar por las madres todas las actividades que se hacen en este libro: meriendas, mercadillos…  Todas las he hecho con las madres en el colegio y me he involucrado mucho en ellas.P. ¿Cómo comenzó tu vocación por la escritura? ¿Por qué decidiste comenzar a escribir una novela?R. Desde que tenía 5 años siempre he leído. Después de la Universidad trabajé en Televisión y descubrí una parte de periodismo que me apetecía hacer. Me di cuenta de que podía hacer bien dos cosas: cocinar y escribir. Cuando nació mi primer hijo dejé de trabajar pero seguí escribiendo una columna para un periódico entre 2007 y 2010 y allí encontré la voz para comunicarme con mis lectores. Escribir es algo que siempre había querido hacer y ese momento sin trabajar me permitió encontrar el momento para empezar.P. En la novela las protagonistas luchan entre ellas por ser la abeja reina, ¿Cómo es una abeja reina? ¿Qué es lo que quiere conseguir?R. El mundo está dividido en dos tipos de personas: las que quieren  ser parte de un grupo y las que lo quieren organizar. Y a algunas personas les encanta organizar, viven para hacerlo, les gusta ser el centro y eso les hace felices. Y eso es parte del instinto femenino. Las abejas reina. Pero otras son felices sin embargo teniendo relaciones de igual a igual, dentro del grupo.P. Se trata de una novela con numerosos personajes femeninos Bea, Bubba, Jo, Rachel, Heather… y también uno masculino el director del colegio el Sr. Orchard, ¿cómo has logrado encontrar la voz de cada uno de ellos?R. Al principio quería hablar de la amistad entre mujeres y la relación dentro de los grupos. Mi marido me aconsejó que al ser mi primera novela la enfocara desde una primera persona, pero yo la verdad hice lo contrario y busqué diversos puntos de vista porque así podría asomarme a las diferentes facetas. He disfrutado mucho con las escenas con diálogos del grupo de madres. Incluso cuando tenía que parar de escribir para ir a recoger a mi hijo estas conversaciones seguían en mi cabeza.

P. En la novela algunos de los personajes como Heather o Rachel se sienten solas, perdidas en varias ocasiones y necesitan la fuerza del grupo para sobrevivir, ¿pueden ser reflejo de lo que está ocurriendo en nuestra sociedad? ¿Necesitamos el grupo como apoyo?R. Muchas personas en esta sociedad nos sentimos solos y quizás que nos han dejado aparte en alguna ocasión. Esa inseguridad por sentirse aparte del grupo es además un sentimiento habitual en la condición femenina. Las mujeres nos necesitamos las unas a las otras, necesitamos estar juntas, desayunar juntas, ir a comprar juntas, organizar mercadillos juntas… Al principio de la novela incluyo un proverbio “Una abeja no es una abeja” porque una abeja no es nada sin su colmena. Por eso he hecho paralelismos con las madres y las abejas y esa necesidad de estar juntas como las abejas.P. La novela destila en los diálogos humor y en ocasiones sarcasmo, ¿hay que enfrentarse a la vida con ese humor constante?R. Pienso que el sarcasmo es algo muy útil… Mi familia es muy sarcástica y esto ayuda bastante en las situaciones un poco complicadas. Es importante encontrar el lado divertido de las cosas, es un mecanismo para sobrevivir. No tenía en mente hacer una novela divertida pero la vida es divertida y está llena de cosas divertidas… Incluso en un funeral pueden ocurrir cosas divertidas. Además hay novelas tan rotundas que no parecen reales. Novelas tan serias que no se parecen a la realidad. Cuando un grupo de amigos se junta siempre surge un comentario divertido.P. ¿Cuáles son tus planes de futuro? ¿Vas a seguir escribiendo?R. Estoy o debería estar escribiendo una novela… Se desarrolla en el mismo sitio que ‘Las abejas reina’ y aparecen algunos de los personajes de la novela. Pero en esta ocasión se centra en el momento en el que los hijos se van de casa y ese vacío que crece en las madres. También en todas posibilidades que surgen en este período, el nuevo mundo que se abre para todos.