Entrevista: Clara, una mujer con diabetes y mamá

Hola a todos, antes de Navidades hice una encuesta en Instagram preguntando quién queríais que fuesen los siguientes entrevistados… Entre ellos, una de las peticiones fue una mujer con diabetes que estuviese gestando en este momento para responder una entrevista sobre cómo se afronta un embarazo con diabetes en la actualidad. Por ello, no se me ocurrió mejor opción que Clara, mujer con diabetes desde que tenía 18 años y actualmente con 31 mamá de tres niños y esperando un cuarto. Qué mejor ejemplo! Espero que os guste! 🙂

Clara García es valenciana, tiene 31 años y fue diagnosticada de diabetes con 18 años, justo en el 2007. Cuando habla de su diabetes se siente cómoda con la relación que ha mantenido con ella, ya que nunca le impidió hacer nada a pesar de las etapas de rebeldía que todos hemos pasado y que como ella comenta, lo fundamental siempre ha sido cuidarse. Por ello y por su experiencia con la diabetes, hoy traigo su voz al blog para que todos podamos aprender más de ella y conocer cómo han sido sus embarazos teniendo diabetes.

-Cuéntame un poco más de ti.
Creo que ser diagnosticada después de la adolescencia me benefició. Y es verdad que conforme me hago mayor y me voy conociendo, soy más consciente de todo lo que supone esta enfermedad, pero la vivo con normalidad, como una parte más de mí.Hace mucho que tenía Instagram, pero lo utilizaba para el cotilleo (hablando mal y pronto). Me gustaba ver qué publicaba la gente, las galerías de imágenes, me entretenía mucho, pero no tenía muy claro qué podía ofrecer yo. Era más como de consumo, pero yo quería también compartir algo.
Empecé poco a poco a seguir a gente con diabetes tipo 1 y cada vez éramos más. La verdad es que muchas cuentas de Instagram me ayudan y aprendo mucho por esta red, pero como digo, no terminaba de ver qué podía aportar. Empecé a compartir fotos de mis glucemias, comidas, etc… cosas del día a día.Fue clave un evento que fui de una chica que había conocido también en Instagram, Olatz, creadora de @blessings. Ella tiene una tienda online de artículos cristianos y me ayudaba mucho con sus publicaciones, y en este evento que comento, ella hablaba de que los cristianos también tenemos que estar en las redes sociales. Y me animé a redirigir mi cuenta a cómo vivía yo la enfermedad desde la Fe. Por dar otro punto de vista que no había visto por aquí.
Al poco tiempo me quedé embarazada por cuarta vez y esto llamó mucho la atención. Algunas mujeres me empezaron a preguntar, porque muchas veces, sin querer, nos meten miedo con esto de la diabetes y los embarazos. Y en ese punto estoy ahora. – Mamá con diabetes… ¿cuándo fue tu primer embarazo? ¿Cuál fue tu principal miedo por aquel entonces?

Mi primer embarazo fue en 2011. Si te soy sincera, yo no tenía ni idea de que por tener diabetes tenía que tener “cuidado” en este sentido. Era bastante joven (23 años) y a mí nadie me había dicho nada: ni el endocrino, ni la enfermera educadora, ni nadie.

El primer shock fue cuando fui a la matrona y me pegó una bronca de campeonato. Me dijo que las mujeres diabéticas teníamos que planear nuestros embarazos, que eran embarazos de alto riesgo y poco menos que me llamó de irresponsable para arriba, sin saber nada de mí ni de cómo llevaba yo la enfermedad. Recuerdo aguantar el chaparrón y llegar a casa y llorar como una magdalena.

No me acuerdo muy bien de cómo siguió todo, pero bueno, cuando fui a mi endocrino me tranquilizó, porque mi glicosilada siempre ha estado por debajo de 7, que es lo que recomiendan para quedarte embarazada. Y empezaron los controles y seguimiento normales de un embarazo con diabetes, que es bastante exhaustivo.
El mayor miedo que tenía era acabar en cesárea, porque la matrona me lo nombraba en cada cita. Acabé asimilando que sería así. Pasó de ser mi principal miedo a una resignación.

– El embarazo y la diabetes están muy estigmatizado. ¿Te han puesto alguna pega desde el Hospital?
No, la verdad es que siempre me han tratado muy bien (salvo esta primera matrona, que no es que me tratara mal, sino que se ponía siempre en lo peor y eso a veces no ayuda). He estado en dos hospitales públicos distintos, y en los dos el protocolo ha sido bastante similar. Después de mi primer parto y “superar” la cesárea a la que me abocaban, no me he encontrado con ningún impedimento ni pega.

Tengo que remarcar que no tengo nada en contra de las cesáreas. Las cesáreas salvan vidas y muchas veces es la mejor o única opción. Pero lo que me da rabia es que por tener diabetes ya nos fijen ese horizonte y hasta nos convenzan de que es lo mejor. Durante el embarazo no puedes saber si al final vas a tener que pasar por una cesárea. La mujer ha parido siempre. Nuestro cuerpo está preparado, y si tu bebé pesa 4kg o más, pues seguramente sea más costoso, pero con paciencia y confianza, se puede.
Además, luego tenemos unos bebés rollizos preciosos. Nacen y ya están “criaos” 😉

– ¿Cuáles son las pruebas a las que se somete una mujer que quiere ser mamá con diabetes? ¿En qué pusieron más hincapié?
Sobre todo pusieron hincapié en la hemoglobina glicosilada. Antes de quedarte embarazada recomiendan que sea como mucho de 7%.
Durante el embarazo es importante ajustar el rango objetivo. Esto siempre lo marca el endocrino y cada caso es personal, pero vamos, suele subir un poco el límite por debajo a 80 para evitar hipoglucemias, y bajar por arriba, a 120/130-150 como mucho.También le dan bastante importancia a la glucosa postprandial. Ahora con el freestylelibre es una gozada, pero recuerdo en los otros embarazos masacrarme los dedos a glucemias capilares. Lo normal eran unos 10 controles por día.

Y aparte de eso, que supone una visita al endocrino cada 3 semanas al principio del embarazo, las citas con el ginecólogo también son más frecuentes. En mi hospital actual he ido una vez al mes, y a partir de la semana 36, cada semana a los dos especialistas.

– Desde tu experiencia ¿cómo afectó a tu glucosa? ¿Cómo ha intervenido la tecnología en ello? ¿Qué usas en tu día a día?
Pues los embarazos afectan mucho a la glucosa. Es inevitable. Llevas una vida dentro que se alimenta de ti, que también necesita glucosa e insulina. Una insulina que tu páncreas no genera y que tienes que administrarle tú.

Conforme pasan las semanas y el bebé va creciendo, las necesidades de insulina van aumentando progresivamente. Yo he llegado a necesitar más del doble de insulina embarazada que sin estarlo (también influye el peso, claro). Además, no sé si esto me pasa sólo a mi, pero la resistencia a la insulina que tengo por las mañanas es BRUTAL. La insulina por las mañanas para mí es agua, no me hace nada. Si me levanto alta, voy a estar alta hasta que pasen unas horas, y cualquier cosa que coma hace que se me dispare la glucosa sin remedio.

Obviamente la tecnología hoy en día ayuda mucho. Yo recomiendo a todas las mujeres que me preguntan que intenten ponerse una bomba de insulina (esto es una decisión totalmente personal, y que conste que yo no he llevado en ningún embarazo), pero creo que debe ser de gran utilidad. Y con un monitor continuo de glucosa ya debe ser la repera.

A mi en este cuarto embarazo me financiaron el Freestyle libre y ha sido de gran ayuda. Es como que me ha abierto los ojos. Llevo simplemente el sensor, sin mcg. Pero ayuda mucho ver las gráficas, las tendencias, los patrones… He aprendido muchísimo y, sobre todo, he ido solucionando los problemas o desajustes que iban surgiendo. Si me quedara embarazada otra vez y no tuviera los sensores financiados, sin duda los pagaría de mi bolsillo. Se ha convertido para mí en algo fundamental.
Hacia final de embarazo, cuando han ido aumentando las necesidades de insulina y he tenido que corregirme más, también me compré el IPort Advance, que es un aplicador de inyecciones, ya que llegaba a pincharme 5,6,7 veces al día y esto me ahorraba pinchazos y moretones.

– ¿Cómo lo llevó tu familia? ¿Cuál es el papel fundamental que tienen en el embarazo?
Mi familia lo lleva muy bien. Tanto mi marido como yo venimos de familias súper numerosas y para ellos siempre ha sido una alegría cada embarazo, aunque tampoco se enteran muy bien de lo que realmente supone para mí, porque las cosas de la diabetes siempre las he llevado yo de una manera más bien independiente.

El que sí lo sabe de primera mano es mi marido. Él sufre conmigo las dificultades que van surgiendo y sabe que no es un camino de rosas, que supone mucho sacrificio y muchas veces frustración por hacer las cosas bien pero no tener los resultados que me gustarían; pero me acompaña y sostiene cuando flaqueo, y me anima y comparte conmigo las alegrías y buenas noticias cuando las hay. Para mí la diabetes es cosa de los dos.
Yo creo que es fundamental que tus seres queridos te apoyen y también hacerles partícipes. A mí me cuesta mucho, pero es importante dejarse cuidar por las personas que más nos quieren.

– Ahora que vuelves a estar embarazada y la diabetes ha evolucionado tanto, ¿ha cambiado tu perspectiva del embarazo?
Muchísimo. Cada vez soy más consciente de todo lo que afecta a mi diabetes. Sobre todo en las mujeres las hormonas juegan un papel crucial, y como el embarazo es un cóctel molotov, todo se vuelve un poco complicado. Pero creo que deberíamos tener menos miedo, porque gracias a todos los avances y la tecnología, estamos cada vez mejor cuidadas y controladas.

– Siendo mamá con diabetes, ¿cuál es tu mayor preocupación? Te ha hecho cuidarte más?
Digo sin miedo y tapujos que cada embarazo me ha hecho mejorar y aprender un montón. O sea que ahora soy 4 veces “mejor diabética” que en 2011.
Siempre me preocupa que algún pico de glucosa o alguna hipoglucemia pueda afectar al bebé, pero la experiencia también me ha dado tranquilidad en este sentido. Tengo tres hijos sanísimos y felices, y lo que he aprendido es que una mejor alimentación nos ayuda a TODOS.

– Cuéntanos algo que desde la consulta no nos dicen, pero que como mujer con diabetes, que es mamá y de nuevo lo será pronto, es importante que las que aún no nos hemos embarcado en un embarazo debemos saber…
Lo primero que te diría es que te vayas sacando el bono de socia VIP súper platino para tu hospital, porque vas a pasar mucho mucho tiempo allí 😂.
Pero fuera de bromas, simplemente os diría que se puede llevar muy bien, y si quieres ser madre, la diabetes no tiene que ser un impedimento. Yo he tenido buenos embarazos, pero cada mujer y cada embarazo es un mundo. Creo que lo complicado no es el embarazo en sí, sino lo que viene después 😅.

– ¿Has echado algo de menos desde la sanidad?
Lo que echo de menos es el papel del psicólogo/a. Pero no sólo en el embarazo, sino en cómo afrontar una enfermedad crónica en general, y la diabetes en particular.
Quizá no lo necesitemos con la misma asiduidad que el endocrino, pero en determinados momentos puede que más. Creo que la psicología debería ser uno de los pilares en el equipo de atención primaria para las personas con una enfermedad como la diabetes y estar a nuestra disposición siempre que lo necesitáramos, y más en momentos “sensibles” y de cambios, como es la gestación y la maternidad.

– Por último, algo que a muchas nos preocupa, ¿has tenido alguna complicación derivada del embarazo?
Gracias a Dios, no. De momento no tengo ninguna complicación derivada del embarazo ni de la diabetes, salvo mucho sueño y ojeras de serie.

Muchas gracias Clara
Sé que esto no es una pregunta, pero gracias a ti, Patricia. Ha sido un placer que hayas pensado en mí para esta entrevista, de verdad, porque tu perfil de Instagram y tu blog siempre me han ayudado mucho. 😘😘

Sin duda ejemplos como el tuyo hacen ver que las cosas se pueden conseguir si uno quiere y que con control y cuidados todas podemos ser mamás. Muchas gracias por tu sinceridad y por ser un ejemplo para muchas mujeres, pero también papás, que sufren por saber si sus hijas el día de mañana podrán tener una vida normal.

Un beso enorme