Entrevista: manuel moya (actor)

   Hay actores que les va más hacer cosas modernas, otros quieren hacer papeles más contemporáneos. Y hay otros, cómo Manuel Moya, que le va el teatro clásico… Ha hecho obras como "La Asamblea Mágica", "Hamlet", "El Mundo Al Revés", o actualmente "La Noche Toledana"… Y hoy tengo el gusto de que empiece a formar parte de esta gran familia…
- Gracias Manuel por tu tiempo, que se que lo tienes muy ocupado…
- Cuéntame un poco ¿Cuándo te diste cuenta que lo tuyo era ponerte encima de un escenario? 
- Pues no hay un momento clave, había estado haciendo obras de teatro en mi pueblo, Valdepeñas, y sabía que me gustaba. Pero un día llegué a casa y dije “me voy a Madrid y voy a hacer las pruebas en la RESAD” Más que sentir que me gustaba subirme a un escenario, que me gusta y nunca dejará de hacerlo, sentí la necesidad de dedicarme a eso plenamente. Quería dedicar mi vida a ello. Y espero que así sea… 
- Con los tiempos que corren, el ser actor ¿no lo ves que sea una carrera un tanto difícil? 
- Sí, siempre ha sido complicado, ahora lo es más (de eso no hay duda) pero soy muy cabezota y muy mal se tiene que dar para que me rinda, además creo que no es momento de lamentaciones sino de acciones, el teatro no es sino acción. Entonces hay que  actuar, dentro y fuera del escenario. Hay que hacer mayores esfuerzos; esto es una cosecha a largo plazo, los frutos tardaremos en verlos, pero los veremos.
 
- ¿En qué proyectos andas metido ahora? (De los que se puedan hablar de ellos, claro) 
- Ahora mismo estoy a puertas de comenzar con el segundo montaje de la 3ª promoción de la JOVEN COMPAÑÍA NACIONAL DE TEATRO CLÁSICO, con la que hace ahora un mes finalizamos la gira de “La noche toledana”. El proyecto de la Joven abarca dos montajes y estoy ya impaciente de volver a reunirme con mis “clasiquitos” (son mis compañeros, jaja) 
- También has realizado Tv y cine… ¿En qué campo te sientes más cómodo como actor? 
- En el teatro, también me gusta por la dedicación que necesita y merece. Es un niño pequeño que hay que amamantar hasta el último día que baje el telón. En los otros campos todavía no he tenido tanta experiencia como en teatro. Como se dice  a mí “me tira el teatro” pero lo que de verdad me gusta es crear personajes, y ver cómo la gente los disfruta, los entiende y empatiza con ellos, el medio es lo de menos. 
- Con Todas las obras que has realizado ¿Con qué personaje guardas un grato recuerdo y te dio mucha pena el terminar la obra…? 
- Pues todos dan mucha pena, pero también se merecen un descanso, y es bonito verlos de vez en cuando y reencontrarte con ellos. Siempre tienen algo que contarte. Pues tengo dos que me han, mas que dado pena, marcado a fuego. Uno es Marcelo, en el “Hamlet” de Tomaz Pandur y el otro es El Capitán Acevedo, de “La noche toledana”- Los dos me han marcado porque me han dejado unos mensajes muy claros y preciosos y he notado cómo por dentro algo cambiaba. Eso les hace que, para mí, sean inmensamente grandes, hermosos y generosos. Siempre los tengo muy en cuenta, son muy importantes para mi. Hicimos un buen trato durante muchos meses: Mi cuerpo a cambio de su alma. Lo bueno es que nunca desaparecen, siempre andan por ahí, te marcan de por vida. 
- ¿Con qué Director de Teatro te encantaría trabajar y Todavía no lo has hecho? ¿por qué? 
- Miguel del Arco, es claro y directo. No digo más.
- Ahora con la subida del 21% de IVA al panorama cultural, compañeros que se han visto obligados a abandonar el país porque aquí no les dan las ayudas necesarias para realizar sus proyectos, incluso el cierre a salas míticas de cine, teatro y conciertos… ¿No crees que está habiendo un ataque bestial a todo el mundo que trabaja para la cultura?
- Si, no sé si llamarlo ataque bestial o llamarlo “emborregamiento” de una población para poder controlarlo, “ya pienso yo por ti”, ese parece ser su lema. Hace poco coincidí con un profesor de dibujo y comenta como poco a poco se rechazan ayudas, se empeoran las condiciones y se 
ve como el final de las asignaturas que permiten lanzar la creatividad de los jóvenes está cada vez más cerca. Parece que Huxley con su “mundo feliz” no andaba tan lejos de la realidad. Y claro las consecuencias las pagan los profesionales que nos queremos dedicar a ello. Se ponen a hacer cuentas con la cultura y las cuentas no salen, claro que no salen, no se puede ver como un negocio, no en lo público, claro. Es un servicio a tus ciudadanos, se negocia en la bolsa, no en los teatros, ni en los museos, etc… Los beneficios se ven a la larga con unos ciudadanos cultivados en muchos aspectos, el problema es que no quieren que sea así. Es triste pero cierto.
- ¿Cambiarías algo para que este país cambiara a mejor? 
- Esta pregunta me resulta golosa y peligrosa, cambiaría tantas cosas… “Si yo tuviera una escoba…” No cambiaría me resultaría imposible, pero me gustaría que los próximos ministros y presidentes y demás que vengan, amen el futuro, que enseñen el pasado y vivan el presente, pero que amen el futuro, que permitan sembrar, que vean y marquen objetivos, que no sieguen antes de tiempo
 - Alguna frase para la posteridad… (Cualquiera que se te ocurra) 
- ”Observar y sentir. De eso se trata” Esta frase me la enseño Luis Landero, un gran maestro y un gran hombre.
- Y para terminar. Para aquellas personas que están pensando en ser actores como tú… ¿Qué consejo les podrías dar?… 
- Que se dejen el alma por todo aquello que aman, que sean sinceros y honestos con la profesión, es una profesión digna y hermosa.
Hoy día pagar 20 euros por una obra de teatro supone un lujo para muchos. Entonces no los defraudemos, podrá gustar o no, pero no nos podemos permitir que alguien se sienta defraudado o engañado. Tenemos un deber como artistas.
Todo esfuerzo es poco, es un viaje, largo y duro, pero bonito. Y porque haya quienes lo quieran desprestigiar o mutilar, el mundo de las emociones es un mundo serio. O por lo menos hay gente que lo vemos como tal.
Me ayuda pensar en todas las personas que lucharon y luchan por esta profesión, y veo que hay que tomar el relevo, entonces no puedo fallarles.
Para terminar (ya dejo los consejos del abuelo, jajaja), que se diviertan. Siempre. Es un juego, un juego serio, de verdad  pero muy divertido. Sonriendo se trabaja mejor. Y sobre todo, que no se rindan. 
- Muchas gracias Manuel por tu tiempo. Y te doy la bienvenida a esta gran familia… Espero que sigas cosechando muchos éxitos y nosotros disfrutemos de tu arte… Un abrazo muy grande y recuerda, que aquí, tienes un rincón siempre que quieras…
- ¡Muchísimas gracias por todo! Es un placer y un honor  formar parte de esta familia. Un abrazo