#ep2014 reino unido

A un año de las elecciones legislativas, Reino Unido se encuentra en pleno terremoto político con el auge del nacionalismo euroescéptico encarnado por el UKIP. Con un partido conservador en el gobierno, debilitado y en segundo lugar en las encuestas tras los laboristas, y unos liberaldemócratas, también en el gobierno, hundidos por debajo del 10%, todo augura unas elecciones de 2015 con una aritmética muy complicada, y las europeas serán la primera demostración.

La política británica se ha caracterizado por el tradicional turnismo entre mayorías conservadoras y mayorías laboristas, favorecidas por un sistema electoral mayoritario de distritos uninominales. La actual situación política de coalición (conservadores y liberaldemócratas) es un rara avis en el país, aunque el auge del UKIP augura que en un futuro el país se deberá acostumbrarse a mayorías más plurales. Las elecciones europeas en Reino Unido suelen interpretarse como unas elecciones de segunda, donde el voto protesta se magnifica, no es por ello casual que el UKIP, un partido nacionalistas y euroescéptico, esté incluso por delante de laboristas y conservadores en las encuestas. Ya obtuvieron un buen resultado en 2009 cuando lograron un 16,6% de los votos, sólo por detrás de los conservadores (27,9%) y por delante de los laboristas (15,8%) y los liberaldemócratas (13,8%). Otro partido euroescéptico, el más radical BNP, obtuvo el 6,3% de los votos, mientras que los Verdes, que a nivel nacional obtienen unos resultados muy modestos, obtuvieron el 8,1%. En eurodiputados, de un total de 72, los conservadores obtuvieron 25, UKIP y laboristas 13, 11 los liberaldemócratas, 2 los verdes, 2 el BNP, 2 los nacionalistas escoceses del SNP  y 1 los nacionalistas galeses del Plaid Cymru. Los otros 3 se lo repartieron las formaciones norirlandesas Sinn Féin, DUP y UUP. Estos buenos resultados del euroescepticismo británico no se trasladaron a las elecciones generales del año siguiente. En 2010 los conservadores obtuvieron un 36,1% de los votos, los laboristas un 29%, los liberaldemócratas un 23%, el UKIP sólo un 3,1%, el BNP un 1,9% y los Verdes se tuvieron que conformar con el 0,9%. La pauta que parece cambiar con respecto a 2o10 es que, teniendo en cuenta las encuestas para las elecciones de 2015, el UKIP sí que retendría buena parte de los votos de las europeas, ya que se situaría en el 12-15% de los votos en unas generales, alterando por completo el panorama político británico. Otros dos de los temas que se verán reflejados en el resultado de las elecciones europeas será la impopularidad del actual gobierno de coalición entre conservadores y liberaldemócratas (los conservadores quedarían en tercer lugar según las encuestas y los liberaldemócratas podrían quedar incluso por detrás de los verdes) y el referéndum por la independencia de Escocia; será interesante ver cómo evoluciona el voto de los nacionalistas escoceses en estas elecciones.

Al contrario que en la mayoría de países europeos, la circunscripción en Reino Unido para las elecciones europeas no es única. El territorio británico se divide en 12 circunscripciones que se reparten entre 3-10 eurodiputados. El sistema de elección es por lista cerrada salvo en el caso de Irlanda del Norte que es por VUT (Voto Único Transferible). Además el Reino Unido celebrará elecciones el día 22 coincidiendo con las elecciones locales y no el 25.  En esta ocasión los británicos elegirán 73 eurodiputados: Escocia 6, Irlanda del Norte 3, Gales 4 e Inglaterra 60.

Actualmente Reino Unido tiene como representante en la Comisión a la laborista Catherine Ashton, Alta Representante de Asuntos Exteriores y Seguridad desde 2010. Es el puesto más importante tras el de presidente de la Comisión. Entre 2008 y 2010 fue Comisaria de Comercio. Entre los candidatos a comisarios para la próxima Comisión se encuentran Nick Clegg, líder de los liberaldemócratas o el conservador Andrew Lansley, líder de la Casa de los Comunes.

Reino Unido ha pertenecido a la Unión Europea desde 1973 por lo que ha participado en todas las elecciones al Parlamento Europeo (1979, 1984, 1989, 1994, 1999, 2004 y 2009). El partido conservador ha sido siempre el partido más votado salvo en el 89 y el 94, cuando ganaron los laboristas. El número de eurodiputados que ha elegido el Reino Unido en cada elección ha ido variando entre los 87 de 1999 y los 72 de 2009. Comparando los resultados de las diversas elecciones es característico el pobre resultado de los dos grandes partidos (conservadores y laboristas) en favor de otras opciones. Los conservadores se estrenaron con un buen 48% de los votos en 1979 pero desde entonces han caído hasta el 27,9% de 2009, no superando el 36% de los votos desde 1984. Los laboristas se han movido entre el 44-15,8% obteniendo unos resultados muy irregulares. Las europeas suelen ser muy volátiles en el Reino Unido. En eurodiputados los conservadores han obtenido entre 18-60 y los laboristas entre 13-62. Esta gran variación se debe también al sistema de reparto de eurodiputados, mayoritario, pero que se corrigió en 1999, fecha a partir de la cual los partidos minoritarios británicos comienzan a lograr representación en el parlamento europeo. Los liberaldemócratas, aún moviéndose siempre en torno al 15% de los votos, solo logran representación a partir de 1994 (2) pero sobre todo a partir de la reforma de 1999, desde entonces ha contado con entre 10-12 eurodiputados. Los Verdes, que consiguieron su mejor resultado en 1989 con el 14,5% de los votos (pero ningún eurodiputado), han logrado representación a partir de 1999, desde entonces siempre han tenido 2 eurodiputados. El UKIP, partido que nace para las europeas, se estrenó en 1994 con el 1% de los votos, pero ya en 1999 con el 7% obtiene 3 eurodiputados, y en 2004 obtiene 12, logrando 1 más en 2009 con el 16,6% de los votos. El nacionalista BNP se estrenó en 1999 con el 1,1% pero no logró eurodiputados hasta 2009 que con el 6,3% de los votos obtuvo 2. Por último los nacionalistas escoceses y los unionistas irlandeses (UUP, DUP) siempre han tenido representación; los nacionalistas galeses la han tenido desde 1999 y los nacionalistas irlandeses del Sinn Fein desde 2004.

Desde principios de mayo casi todas las encuestas coinciden en que el UKIP quedará en primer aposición con el 28-32% de los votos. En segundo lugar quedarían los laboristas, que hasta hace poco lideraban las encuestas, con el 24-30% y en tercer lugar los conservadores con el 18-27%. Son todavía márgenes muy amplios como para saber con certeza cómo quedaría el reparto de eurodiputados, teniendo además en cuenta la dificultad que añade que sean 12 las circunscripciones a la hora de hacer una proyección de escaños. De lo que no cabe duda es de que tanto el UKIP como los laboristas lograrán aumentar considerablemente su número de eurodiputados con respecto a 2009. En cuarto lugar estarían los liberaldemócratas con el 7-10% y a poca distancia los Verdes con el 5-8%. El BNP se hundiría y perdería con certeza sus actuales 2 eurodiputados.

El partido conservador es uno de los partidos clásicos de la política británica, repartiéndose el poder primero con los liberales y después, ya comenzado el siglo XX, con los laboristas. El insuficiente resultado de 2010 les ha llevado a convivir en una coalición con los liberaldemócratas, siendo el líder conservador, David Cameron, primer ministro desde entonces. La política de austeridad y recortes ha provocado una importante caída de la popularidad de los conservadores, y desde hace años se sitúan por debajo de los laboristas en las encuestas nacionales. La progresiva ascensión del UKIP por su derecha y la importante brecha interna existente en el partido entre los más eurófobos y el resto del partido ha colocado al gobierno ante una difícil tesitura. Los conservadores no forman parte del Partido Popular Europeo desde 2009, cuando junto a los euroescépticos polacos y checos crearon un nuevo grupo parlamentario en la eurocámara, los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), quinto grupo en el Parlamento Europeo por número de eurodiputados. Cameron ha acabado por prometer un referéndum sobre la permanencia del país en la UE si gana las elecciones de 2015. La cara más visible de los conservadores británicos en el Parlamento Europeo es Daniel Hannan, eurodiputado por la circunscripción del Sudeste de Inglaterra desde 1999 y secretario general del ECR. Pertenece al ala euroescéptica de los conservadores británicos.
Los laboristas son la otra fuerza que ha dominado la política británica durante el siglo XX y principios del XXI. En el gobierno desde 1997 hasta 2010, cuando Gordon Brown obtuvo un pésimo 29% de los votos, desde entonces están en la oposición con un nuevo líder, Ed Miliband. Dispuestos a mejorar el resultado de 2009, siendo este el peor de su historia, los laboristas esperan ser la primera fuerza política y recoger el ímpetu necesario, ahora que están perdiendo terreno en las encuestas frente a los conservadores, para lograr un cambio de gobierno en Downing Street en 2015. La cara más visible del laborismo en la eurocámara es Glenis Willmott líder del grupo laborista parlamentario europeo. Es eurodiputada desde 2006 por la circunscripcion de los Midlands del Este. Los laboristas forman parte de la Alianza de Socialistas y Demócratas, grupo del cual son uno de los principales pilares.
El UKIP (Partido de la Independencia del Reino Unido) nace en 1993 con el objetivo de sacar al Reino Unido de la UE. Hasta 1999 no logró representación en el Parlamento Europeo (3 eurodiputados), pero en 2004 dio el gran salto con el 16,1% de los votos y 12 eurodiputados. Es un partido nacionalista, euroescéptico y libertario. Desde 2009 el UKIP ha formado su propio grupo parlamentario, la Europa de la Democracia y la Libertad (EDF) junto a otros partidos euroescépticos como los nacionalistas daneses, los nacionalistas fineses o la Liga Norte. La cara más conocida es la de su popular líder Nigel Farage, dirije el partido desde 2006 y ha sido eurodiputado desde 1999 por el Sudeste de Inglaterra. Desde 2009 es además el líder del EDF en el parlamento europeo. El UKIP aprovechará estas elecciones para lograr un contundente resultado, que empuje al gobierno conservador a convocar un referéndum para la salida del Reino Unido de la UE. Una victoria también podría ayudar al partido a dar al salto definitivo a la política nacional. Desde 2009 5 eurodiputados han abandonado el UKIP.
El principal perjudicado por el auge del UKIP es el BNP (Partido Nacional Británico) también nacionalista y euroescéptico pero situada más a la derecha. También ha obtenido sus mejores resultados en unas europeas, logrando un 6,3% de los votos en 2009 y por primera vez 2 eurodiputados. La reciente subida del UKIP se ha comido al BNP y cualquier posibilidad de repetir en el Parlamento Europeo. Su líder desde 1999 y eurodiputado desde 2009 Nick Griffin volverá a presentarse con la esperanza de mantener la representación en la eurocámara. El BNP se halla en el grupo de los no inscritos, pero forma junto a los nacionalistas húngaros del Jobbik y otros partidos representantes del nacionalismo más radical la Alianza de los Movimientos Nacionales Europeos.
Los liberaldemócratas, herederos del antiguo partido Liberal, son el partido más europeísta del Reino Unido. Actualmente en un gobierno de coalición con los conservadores, la pertenencia a la UE ha sido uno de los principales temas que han causado fricciones entre los socios de gobierno. Los liberaldemócratas se encuentran en plena decadencia tras su histórico resultado en las elecciones legislativas de 2010. Desde entonces, elección tras elección, los liberales británicos van cediendo posiciones frente a otros partidos emergentes como el UKIP o los Verdes. De ideología social liberal, los liberaldemócratas británicos son uno de los principales pilares del ALDE, que agrupa a los diversos partidos liberales en el Parlamento Europeo. Entre los eurodiputados liberales británicos más conocidos se encuentran Andrew Duff, eurodiputado desde 1999 y eterno candidato liberal a las europeas, Graham Watson eurodiputado desde 1994, líder del ALDE de 2002 a 2009 y Presidente de ALDE desde 2011 y Edward McMillan-Scott eurodiputado desde 1984 hasta 2010 por los conservadores y a partir de esa fecha por los liberales.
El partido verde de Inglaterra y Gales ha tenido siempre en las europeas sus mejores resultados. En 1989 obtuvo su récord histórico, el 14,5% de los votos, aunque debido al sistema electoral se quedó sin representación. Desde 1999 los verdes ingleses y galeses siempre han tenido 2 eurodiputados en el parlamento europeo que, según las encuestas, van a seguir manteniendo tras estas elecciones. Los verdes ingleses y galeses forman parte del Partido Verde Europeo, cuarta fuerza política en la eurocámara. Jean Lambert es la principal voz de los verdes ingleses y galeses en el parlamento europeo. Ha sido eurodiputada desde 1999 por la circunscripción de Londres, actualmente es vicepresidenta del grupo parlamentario de los Verdes-ALE.
Además de estos partidos, tradicionalmente diversas fuerzas regionalistas o nacionalistas logran siempre representación en el parlamento europeo. Es el caso de los nacionalistas escoceses del Partido Nacional Escocés (SNP), socialdemócrata, que desde 1979 siempre ha tenido representación europea. Su candidato es Ian Hudghton, presidente del partido desde 2005 y eurodiputado desde 1999. Los nacionalistas galeses del Plaid Cymru, también socialdemócratas, llevan en el Parlamento Europeo desde 1999. Junto al SNP forma parte de la Alianza Libre Europea, que agrupa a los partidos soberanistas europeos y forman grupo parlamentario con el Partido Verde Europeo. La candidata galesa es Jill Evans eurodiputada desde 1999.
Por Irlanda del Norte son 3 las formaciones que tienen representación en el Parlamento Europeo y probablemente repitan: el izquierdista e independentista Sinn Féin, y los unionistas y conservadores DUP (Partido Democrático Unionista) y UUP (Partido Unionista del Ulster). La eurodiputada del Sinn Féin, Martina Anderson, forma parte de la Izquierda Unida Europea, la eurodiputada del DUP, Dianes Dodds, está en el grupo de los no inscritos y el eurodiputado del UUP Jim Nicholson, forma parte del ECR junto a los conservadores británicos.
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