A la espera de entrar en EuropaSupongo que ese orgullo y satisfacción de la vicepresidenta no es extensivo al voto emitido por los también diputados socialistas españoles Josep Borrell y Raimón Obiols, que lo hicieron en contra de la Directiva, y de Martí Graus, que optó por la abstención.Dicen que la política es el arte de lo posible, y por tanto es posible que la decisión adoptada ayer por la mayoría de nuestros diputados socialistas en el Parlamento europeo haya sido la correcta, pero no deja de producirme un enorme desasosiego e incomodidad.
Tanta renuncia a la utopía y tanto canto al realismo acabarán por desencantar a un gran número de votantes. A mi entre ellos... Y al columnista Enric González que en El País de ayer escribía una escueta y dolorida reseña, titulada "Europa", que comparto plenamente.
Sean felices por favor, y ahora, como también decía Sócrates, "Ιωμεν": nos vamos. Tamaragua, amigos. HArendt

