El primer y único kit de fabricación de cerveza que he tenido es el que compré en el año 2010, y desde entonces, con el paso de los lotes, lo he ido ampliando poco a poco. Ese primer kit incluía dos cubos de plástico de 23 litros de capacidad, con sus correspondientes grifos, los diferentes aparatos de medición necesarios y varios utensilios y accesorios. Con eso y una olla de 10 litros elaboré mi primer lote, uno en extracto que venía con el kit. Aquí están la Parte 1 y la Parte 2 de la entrada que hice sobre la primera cerveza que cociné, una Colne Valley Bitter.
A partir de ahí, fui ampliándolo poco a poco según iba necesitandolo: compré una segunda olla, varios cubos de plástico mas pequeños, un esterilizador y un árbol de escurrido para la limpieza y secado de las botellas, una bolsa BIAB para el macerado, un refractómetro, etc. y llegó el momento de hacer mi primera cerveza con grano en lugar de extracto (aquí podéis leer como elaboré mi primera todo grano)
Desde ese momento hasta el día de hoy, pocos cambios mas he hecho en mi equipo, y son unos cuantos los lotes que he cocinado. Con el paso del tiempo y la experiencia ganada, llega un momento en el que la renovación del equipo se hace obligádamente necesaria. En mi caso, al no disponer de espacio para dedicar en exclusiva a todo esto, me he visto obligado a usar, por poner un ejemplo, dos ollas para el hervido, en lugar de una grande, lo cual es bastante engorroso. Así que, llegados a este punto estoy planteándome muy seriamente hacer algunos cambios drásticos en todo el sistema.
Hará aproximadamente un año, y tras estudiar las posibles alternativas, se me presentó la posibilidad de sustituir las dos ollas para el hervido por una olla eléctrica de casi 30 litros de capacidad, y de comprar también una nevera ya preparada con grifo y sistema de filtrado para hacer un poco mas sencillo y eficiente el proceso de macerado. Pero al final la compra no progresó y desde entonces lo he tenido todo en pausa.
No ha sido hasta hace apenas un mes que no he vuelto a retomar todo el asunto, planteándome comprar ambas cosas, pero fue entonces cuando descubrí una opción que desconocía: los equipos completos y compactos todo en uno, con los que se hace casi todo el proceso. Pero antes de explicar en que consisten dichos equipos, creo necesario explicar, aunque sea brevemente, los partes mas importantes del proceso que hay a la hora de elaborar cerveza:
- EL MACERADO: Es el primer paso, y consiste en la preparación del empaste, que es la parte en la que mezclamos las maltas con agua a determinada temperatura, y durante un tiempo concreto. El macerado se puede hacer de diferentes formas:
- En una olla (la misma que usaremos para el hervido posterior), donde intentaremos mantener a temperatura constante el empaste, y no es tarea fácil. Yo lo hago habitualmente dando toques de calor con la vitro y aislando bien la olla con una manta o similar para evitar el enfriamiento de la misma.
- También en una olla, pero mediante el sistea BIAB, que es utilizando una bolsa o malla donde colocaremos la malta, siendo el proceso exactamente igual, con la salvedad de que nos resultará mucho mas sencillo extraer y escurrir el grano una vez haya terminado el macerado.
- Usando una nevera portátil (de las de camping), modificada para añadirle un grifo y un filtro para extraer el mosto una vez terminado el proceso. Es un sistema económico y bastante eficiente.
- EL HERVIDO: Para esta parte del proceso es necesaria una olla, y existen también diferentes alternativas:
- La opción mas normal es usar una olla de gran capacidad, en cuyo caso no se puede utilizar una vitro para hervir el mosto, sino que tendremos que usar un fuego de tipo paellera, de los que funcionan con butano.
- Otra posibilidad es utilizar dos ollas en lugar de una, como en mi caso ya que no tengo paellera ni butano, y hacer el hervido paralelamente en ambas, en este caso, en la vitro.
- La opción mas cara, es utilizar una olla eléctrica.
Habréis podido comprobar que ya sea eligiendo un método u otro de cada uno de los pasos como el macerado o el hervido, la acumulación de chismes es notable. Si dispones de un garaje privado, un local o similar, igual no hace falta que sigas leyendo, ya que aquí lo que pretendo plasmar es una alternativa para aquellos, que como yo, no disponemos de mucho espacio para dedicarle al asunto.
Bueno, pues aquí empieza la parte buena, ya que no hace mucho descubrí unos aparatos donde lo tienes todo en uno: en ellos puedes macerar, hervir, recircular y enfriar, y en un solo cacharro. Empecé a investigar y a consultar en foros sobre uno de estos aparatos, llamado Bulldog Brewer. Como se puede ver tanto en las fotos como en el vídeo, es una alternativa a tener en cuenta. Ocupa relativamente poco espacio, y todo va guardado dentro de la propia olla, con lo que te ahorras olla, nevera para el macerado, etc.
Bulldog Brewer, modelo sustituido por el Bulldog Master
Tras indagar un poco mas, encontré otras opciones en la misma línea, mas o menos en el mismo rango de precios, que comentaré un poco mas adelante. El proceso de elaboración es realmente cómodo con aparatos de este tipo, además de fáciles de limpiar y de guardar.
Otra marca que pone a nuestra disposición un equipo todo-en-uno de este tipo es Brewolution, una empresa danesa que pone a nuestra disposición su Brewster Beacon. Este modelo es bastante mas reciente y algo mas avanzado que la Bulldog Brewer, donde se mejora la bomba, tiene tapa de cristal para poder ver el interior en cualquier momento, dispone de niveles en los laterales, etc.
La Brewster Beacon, de Brewolution
Display de la Brewster Beacon
He de decir que según he podido averiguar a última hora, Bulldog Brewer ha dejado de venderse como tal. Ha sido sustituido por un modelo superior llamado Bulldog Master, cuyo precio se dispara y se sale de lo que inicialmente tenía presupuestado, así que ambos modelos, tanto el antiguo como el nuevo, quedan fuera de la opción de compra.
Y por último, vamos a lo que importa, el precio. Todos estos aparatos rondan un precio que ronda entre los 350-450 euros aproximadamente. En el caso de la Brewster Beacon, hay dos posibilidades a la hora de comprarla: sin serpentín para el enfriado (400€), y con serpentín (475€). Tras hablar con uno de los distribuidores, me aclaró que el serpentín venía acompañado con los adaptadores necesarios para conectarlo al grifo, así como con los tubos de silicona. Hay mas modelos aparte de los dos comentados aquí, pero no dejan de ser clones de una manera u otra, como por ejemplo, los de la marca Klarsteiner.
Si nos paramos a pensar friamente, no deja de ser un desembolso importante, aunque claro, hay muchísimos hobbys que lo son igual, o incluso mas. También hay que tener en cuenta que no creo que sea una inversión para aquellos que empiezan a elaborar cerveza, sino que está pensada para gente que ya ha cocinado de la forma tradicional, que posee un conocimiento algo avanzado de todo el proceso y que quiere facilitarse tanto la tarea de fabricación, como la de almacenaje.
Los pros son los ya comentados, sobre todo el ahorro de espacio y la sencillez en el proceso al realizarlo todo en el mismo chisme. Estos aparatos están pensados para hacer lotes finales de alrededor de 26-28 litros máximo, pero también permiten hacer tiradas mas pequeñas, de 10 litros por poner un ejemplo.
En lo que a mi respecta, esto pensándome muy seriamente el ahorrar para comprar uno, concretamente el modelo de Brewolution, pero de momento, es algo que aun tiene que cuajar.