Érase hace un mes

Pasó el mes de noviembre que, sin temor a equivocarnos, ha sido el más prolífico en encuentros de diversa índole para la Fisioterapia. No recordaremos ahora todos los que fueron, pues el lector puede encontrar una entrada anterior en la que ya se hizo. Pero sí haremos una reseña de lo que en lo personal y profesional supusieron las jornadas en las que, por segundo año consecutivo, participamos.

Las Jornadas Interhospitalarias del Hospital Universitario de Fuenlabrada nacieron de una forma fresca, espontánea, ilusionante, primeriza, fruto de una propuesta de dos fisioterapeutas, Gema Gallardo Sánchez y el que suscribe, deseosos de  hacer algo más en su trabajo en el hospital y añadir un elemento añadido de motivación. Los primeros titubeos e ideas fueron seguidos por la adhesión del reponsable de la Unidad de Fisioterapia, José María Pérez Redondo, y de otro fisioterapeuta, además informático, Luis Bernal Ruiz, que aportaron los ingredientes necesarios para continuar alimentando la ilusión en el proyecto.

La colaboración desinteresada por no remunerada de los ponentes, algo para nosotros sorprendente por aquel entonces, la participación de muchos fisioterapeutas con carteles y comunicaciones, de otros como miembros del comité científico y, sobre todo, la repuesta de muchos más de 200 fisioterapeutas a nuestra convocatoria, llevó a lo que consideramos un éxito de la primera edición de las Jornadas.

Sin duda ello fue lo que nos espoleó a, en apenas dos meses, comenzar con los preparativos de la segunda edición. De nuevo, la respuesta de insignes ponentes nos sorprendió por su inmediatez e incondicionalidad. Con el tiempo fueron llegando propuestas de carteles y comunicaciones. Y, otra vez, la lista de fisioterapeutas y estudiantes asistentes fue creciendo. El resultado, parcialmente, puede verse en la página de las jornadas, tanto de la primera edición (http://jornadasdefisioterapia.info/01/documentacion/), como de la segunda (http://jornadasdefisioterapia.info/02/documentacion/).

Con toda seguridad, en lo personal, nuestra participación en este evento nos ha enriquecido profesionalmente, ha sido un espacio de aprendizaje en la organización, nos ha facilitado conocer a fisioterapeutas de primer nivel por sus conocimientos y a otros muchos colegas deseosos de contribuir al crecimiento y mejora de la Fisioterapia, en todas las facetas en las que presta sus servicios a la sociedad. Nos ha hecho sentirnos, aún más, orgullosos de pertenecer a esta profesión, adquirir conciencia de lo conseguido por ella en su corta historia y de los retos que la aguardan. Hemos creado también una especie de “marca”, JornadasdeFisioterapia, no con afán proteccionista sino de ser plataforma de encuentro, de divulgación de eventos, de compartición y colaboración.

No sabemos que nos deparará el futuro. Nos hemos embarcado en otro proyecto, fisioEducación, como algún lector conocerá. Quizás haya llegado el momento de concentrarnos en él y en otros retos y menesteres profesionales y personales, quizás sea necesaria una parada para retomar el impulso, tal vez JornadasdeFisioterapia pueda continuar con otros formatos. Pero, en todo caso, sentimos una enorme satisfacción de haber formado parte de su pasado y aún de su presente.