El camino del freelancer es muy particular. Porque no es algo con lo que usualmente se sueña ni se planifica. Es decir, hasta ahora no he escuchado a ningún niño(a) que diga: " Cuando sea grande quiero ser freelance r". Todo lo contrario, las profesiones de los pequeños van desde astronauta hasta ser Batman o Iron Man.
Y lo que hace particular esta profesión es que surge de la "nada" y cuando digo esto es que no es algo sistemáticamente planificado y pensado; sino que cuando varios factores externos suceden, ya sea porque te quedas sin empleo, o cuando aparte de tu empleo llevas una labor profesional en bajo perfil, etc.. En otras palabras, surge de manera espontánea.
A todo esto, este tipo de profesión tienes sus implicaciones porque, literalmente, te conviertes en una empresa andante, en donde tienes que manejarte como negocio, siendo una persona.
Esto tiene como resultado que se comentan algunos errores financieros, porque no es tan sencillo interiorizar esa realidad de ser empresa-persona al mismo tiempo.
Es por esto que quiero hablarte sobre algunos errores financieros que debes evitar si eres freelancer, o bien si estás interesado(a) en convertirte en uno.
Los errores financieros que te voy a listar se enfocan en tres aspectos básicos del manejo del dinero:
- Identificación de oportunidades
- Diferenciación de los dineros
- El crecimiento financiero
Ya que en estos se tienden a tener una mayor dificultad por parte de quienes trabajan de manera independiente.
Error Financiero No. 1: No confundas abuso con oportunidad
Uno de los principales temas con los que tienen que lidiar el freelancer, es en la valoración de su trabajo en el mercado. En otras palabras, no suele ser valorado en su justa medida.
Por lo general el cliente minimiza la labor hecha porque la ve, o muy simple, o muy rápida o muy sencilla. Ya que el trabajo del profesional independiente es más intelectual (intangible) que físico, y por lo tanto no es "medible" o comparable con otras cosas
Y esto se ve con mayor frecuencia con los diseñadores gráficos o publicitarios, ya que lo que el cliente ve es el logo, o el diseño, pero no ve el cráneo que hubo que dar para llegar a esas "dos rayas y un punto" en el emblema que hizo.
Esto tiene como consecuencia que se genere un cierto nivel de frustración que deriva en una cerrazón e insensibilización ante los clientes. Sé que esto es una realidad, porque yo mismo la he vivido.
Sin embargo, aunque existen muchos abusos con nuestro trabajo, no puedes confundir el abuso con la oportunidad. Hay casos en donde el "abuso" no es tal, sino una oportunidad.
¿Cómo diferenciarlos? Sencillo, por la escala presente y futura.
Imagina que cobras $10 por tu trabajo, digamos que eres diseñador(a) gráfico, y viene un cliente y te ofrece $5 por diseño, pero te garantiza 10 entregas. Aunque estas reduciendo un 50% de tu cuota regular, pero te estás ganando $50 en el largo plazo.
Es cierto que con menos trabajos (5 trabajos, tomando en cuenta tu cuota por trabajo) puedes llegar a la misma suma que con este mega descuento que te está proponiendo este "malvado cliente", sin embargo, estás asegurando un flujo de efectivo presente y futuro por el nivel de demanda que te está creando un solo cliente.
Y las preguntas que tienes que hacerte ante esta encrucijada son: ¿Qué tiene que pasar para que puedas ganar $50? ¿Qué tan frecuente tienes cliente que te garanticen tal cantidad de trabajos?
Es decir, estás "perdiendo" ahora para "ganar" en el futuro. No solamente por el tema de la escala, sino que, si logras satisfacer a este cliente ahora, te recomendará a otros potenciales clientes que también representan ganancias para ti.
Claro está, tienes que ser muy cauto con esto, porque no es empezar a hacerles rebajas a todos tus clientes y devalúes tu trabajo a la petición de un fulano(a) que solo se quiere aprovechar de ti.
Sino que pongas tu mente y corazón frío y en perspectiva, para identificar cuándo es un abuso y cuándo es una oportunidad. Para que hagas de tu "freelanceo" un proyecto viable y sostenible en el tiempo.
Error financiero No. 2: Confundir tus dineros en el bolsillo
Como planteé hace poco, ser un freelancer implica ser una empresa andante, la cual tiene que estar 24/7 en la búsqueda de negocios. Es muy probable que te haya pasado que confundes tu dinero personal con el de tu proyecto. Y esto pasa porque eres quien hace todo.
Lo ideal fuera que contrataras a un contador(a) que te asista en estos temas, pero como no sé en qué etapa estas de proyecto profesional y si tienes los recursos para asumir estos servicios, entonces asumo que estás iniciando o bien en una etapa de optimización de recursos.
Sin embargo esto, mezclar el dinero, puede ser uno de los errores fatales que puedes cometer, porque al final del día, la necesidad personal superará la necesidad del proyecto freelancer que estás llevando a cabo.
En ese sentido, la recomendación para evitar este error viene en dos sentidos:
- Definirte un sueldo
- Registrar tus transacciones financieras
Define un sueldo
Tomando esto en consideración, lo primero que tienes que hacer es diferenciar a las dos personas, el profesional del individuo. Y la manera de hacerlo es definiendo un sueldo por tu trabajo. En otras palabras, decir qué porción es para ti, y qué porción es para tu proyecto.
Esto lo logras en dos niveles:
El sostenimiento se relaciona con cuánto necesitas para vivir. Por lo tanto, tienes que elaborar un presupuesto que en donde listes todos tus gastos personales y cuánto se requiere para satisfacerlos.
Este análisis te va a dar un número determinado el cual debes procurar cubrir mes tras mes y, evidentemente, quien se va a encargar de esa parte será el profesional independiente. El resto lo dividirás en lo que requieres como profesional independiente para funcionar como tal, siendo esto sola y exclusivamente del proyecto. Sin faltar y sin dudar.
El segundo nivel tiene que ver con los beneficios que genera tu proyecto, luego de hacer un balance de tu trabajo, en donde ya has suplido las necesidades personales y las del proyecto. Cuando esto pase entonces tienes que repartir los beneficios.
La manera en que puedes hacerlo es a través de porcentajes en donde defines qué queda para el proyecto profesional y qué queda para tí, y de esta manera creas el equilibrio adecuado para tu manejo financiero efectivo.
Registra tus transacciones financieras
En segundo lugar tienes que crear el hábito, tanto en lo personal como en el desarrollo de tu carrera profesional, de registrar tus transacciones financieras.
Porque es la única manera de medir tu éxito y el desempeño que has tenido a través del tiempo, pero al mismo tiempo puedes controlar todo lo que está sucediendo en tu tu gestión financiera personal y profesional
Error financiero No. 3: No invertir en crecimiento
De manera indefectible, si haces un buen trabajo, y comienzas a tener cierta fama,y se incrementa la demanda superando tu capacidad, tendrás que pasar de ser freelancer a una empresa formal.
Y esto por dos razones básicas:
- Es el objetivo natural de todo freelancer.
- Si quieres cumplir y que el negocio siga creciendo, no lo podrás hacer tu solo, necesitarás ayuda.
Por lo que, la sugerencia es que no metas el error de no invertir en tu crecimiento. Pensar de una manera distinta es apostar a la ruina. No porque todo freelancer tenga que hacerse empresa obligatoriamente, sino porque, si haces bien tu trabajo y trasciendes, por defecto, si quieres seguir en el mercado, vas a tener que invertir.
En ese sentido, si ves que tu profesión, poco a poco, está trascendiendo, prepara tu terreno; porque probablemente tendrás que invertir en tu crecimiento.
Esto se conecta con el error financiero anterior, ya que al dividir los beneficios entre lo personal y lo profesional, lo que estás haciendo es guardando los capitales que van a soportar el crecimiento que del buen trabajo que estás desempeñando.
Mi sugerencia es que si te estás dando cuenta del crecimiento, invierte en él; y para esto sería bueno que busques asistencia de profesionales que te puedan ayudar.
Estos profesionales no tienen que ser académicos, sino que pueden ser personas que hayan pasando de freelancer a empresas. Si conoces alguno próximo a ti o en las redes sociales, solo tienes que hacer contacto con ellos. La mayoría son personas que están en la mayor disposición de servir, máxime cuando ven a alguien que quiere seguir sus pasos.
Ser freelancer es, lo que pudiéramos decir, una carrera espontánea. Ya que no necesariamente es algo que se planifica sino que resulta de coincidir una necesidad profesional con una persona preparada que la suple.
Tomando esto en consideración, es todo un reto; y como tal, debe ser manejado de manera efectiva, evitando cometer errores financieros que detengan el crecimiento natural que viene de la mano del buen trabajo y la trascendencia de la labor que desempeñas.
En ese sentido debes evitar los siguientes errores:
- No confundas abuso con oportunidad
- No mezcles los dineros en tu bolsillo
- No invertir en crecimiento
Tomar en cuenta estos tres errores te pueden facilitar la gestión financiera personal y profesional, permitiendote tener el control de los dineros que manejas día a día con tus clientes y con tus necesidades personales.
Por lo que, si esta entrada sobre los errores financieros que debes evitar si eres freelancer te ha sido de utilidad, te invito a que comentes y compartas. Puedes hacerlo vía el formulario más abajo, correo electrónico o redes sociales. Tus opiniones y aportes son de gran importancia para esta comunidad y enriquecen el debate.
Y si te interesa profundizar en el tema de la gestión financiera de un freelancer, te sugiero que adquieras el libro Apuntes de una oveja freelancera escrito por Sonia Sánchez-Escuer haciendo clic en la imagen más abajo.