No hay consenso sobre si Andorra es o no un paraíso fiscal. La Unión Europea y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) no lo consideran así desde 2018. Por el contrario, la ONG Oxfam Intermón sí mantiene a Andorra en su listado de 73 países considerados paraísos fiscales por su baja presión tributaria, esto es, el porcentaje de los ingresos aportados al Estado en relación al producto interior bruto. No en vano el micro-Estado pirenaico sigue siendo un importante refugio financiero gracias a sus reducidos impuestos.
Uno de los factores que determinan si un país es un paraíso fiscal es el secreto bancario, es decir, la prohibición de revelar información sobre las cuentas de los clientes a personas ajenas a la entidad financiera. A través de varios convenios de transparencia, Andorra abandonó el secreto bancario en 2017, permitiendo el intercambio de información con la Unión Europea y la OCDE, y consiguiendo así salir de sus listas negras. Esta decisión tuvo consecuencias negativas para la banca andorrana, que vio disminuido el número de depósitos de inversión extranjera.
España retiró a Andorra de su lista de paraísos fiscales en 2010, tras acordar varias medidas bilaterales. El pacto estableció el compromiso de Andorra de adaptar sus leyes en conformidad con los principios de la OCDE, así como a establecer una colaboración con la Agencia Tributaria española, incluyendo la posibilidad de realizar inspecciones fiscales en el micro-Estado. Andorra sigue en proceso de limpiar la reputación de su sector financiero después de escándalos como el de la Banca Privada d’Andorra, que en 2015 fue acusada por el Tesoro de Estados Unidos de blanqueo de capitales de fondos relacionados con el crimen organizado. En esta línea, el Fondo Monetario Internacional admitió a Andorra como nuevo miembro en 2020, contribuyendo así a forjar una nueva imagen de multilateralismo económico para el país.
Existen actualmente cerca de un centenar de paraísos fiscales sumando los que consideran Oxfam Intermón y la Unión Europea.Pese a que, según el criterio de algunas instituciones, Andorra ya no es un paraíso fiscal a causa de su compromiso por una mayor transparencia de datos, sigue siendo un destino fiscal atractivo gracias a sus bajos impuestos. Por ejemplo, el impuesto sobre la renta de las personas físicas es de entre el 0 y el 10%, frente al 49% al que se puede llegar en España, o el 45% en Francia y Alemania. Andorra tampoco tiene impuesto sobre el patrimonio y cuenta con el IVA más reducido de Europa: un 4,5%, frente al 21% en España, el 20% de Francia o el 19% de Alemania. Todo ello ha permitido que los sectores del comercio, el turismo y las finanzas sean los más importantes de la economía andorrana.
A causa de esas ventajas fiscales, grandes fortunas, estrellas del cine y el deporte o youtubers, han fijado su sede en Andorra para pagar menos impuestos. Aunque no es ilegal, la elusión fiscal sí es polémica, pues el país de origen de estas personas, donde normalmente les correspondería tener su domicilio fiscal, pierde ingresos necesarios para sufragar, entre otras cosas, el estado del bienestar de sus ciudadanos.
¿Qué es un paraíso fiscal?
¿Es Andorra un paraíso fiscal? fue publicado en El Orden Mundial - EOM.