Revista Infancia
Hace unos días, en el maravilloso blog Caricias calentitas conocí el Babyplus, trastito diseñado para la estimulación prenatal.
En resumen, BabyPlus es un dispositivo que emite una serie de 16 sonidos rítmicos, científicamente desarrollados, que se asemejan al latido del corazón de la madre, y que puede comenzar a utilizarse en cualquier momento entre la 18 y 32 semana de embarazo. Cada lección permite al bebé comparar entre los latidos del corazón de la madre (sonido que el bebé escucha las 24 horas del día los 7 días de la semana) y los sonidos que emite babyplus, permitiéndole al bebé realizar un ejercicio intelectual de comparación entre ambos sonidos, ejercicio que hasta ese instante no estaba haciendo y lo hace justo en el preciso momento en que se están creando los canales neurológicos en su cerebro.(para tener una información más completa pasad poraquí )
Yo creo que estos aparatos, aunque realmente puedan desarrollar más la inteligencia de los bebés, no son necesarios y, bajo mi punto de vista, incluso diría que son inconvenientes.
El bebé de una madre psicológica y fisicamente sana, que mantiene una relación saludable con su embarazo, recibe desde el útero toda la estimulación que necesita y que está preparado para recibir. Esta genéticamente preparado para recibir determinada estimulación en el utero, estimulación procedente de su madre en mayor medida.
Quizas, el hecho de que esto sea así, de que la naturaleza haya programado que esta es la manera en la que se gestan bebés sanos, tenga alguna razón de ser. Quizás al interferir en el proceso, sobreestimulando al bebé y jugando de alguna manera a ser dioses, subestimando la sabiduría de la naturaleza, además de potenciar la inteligencia del bebé , acarree una serie de consecuencias que hoy ni imaginamos.
Cuando estamos ante un recién nacido, podemos percibir muy claramente que una estimulación excesiva le genera estres...como podemos estar totalmente seguros que la estimulación que recibe mediante este aparato cuando está en el útero no es excesiva? como podemos valorar los efectos que tiene, independientemente del desarrollo intelectual?
Atravesamos un momento en el que se confunde antes y más con mejor y creo que no es así. Los bebes y los niños, acompañados por unos padres conscientes y preocupados por su aprendizaje y en un entorno favorable, donde puedan encontrar estímulos suficientes para su desarrollo, tienen todo lo que necesitan para crecer psicológica e intelectualmente sanos y felices.
Por supuesto que en ciertos momentos puede resultar positivo estimularles especialmente en esto o aquello, sobretodo cuando ellos mismos te lo piden de alguna manera, mostrándonos su interés por ello, pero creo que no es bueno tratar de que aprendan más o antes. Cada cosa tiene su tiempo y a veces adelantarnos puede traer consecuencias negativas...si nos paramos a observar la vida de los grandes genios , en su inmensa mayoría no fueron vidas felices.
Así que yo sigo con la idea de que lo mejor es seguir los ritmos que la naturaleza y nuestros hijos nos marcan, interfiriendo lo menos posible y priorizando por encima de todo su felicidad.