Revista Cultura y Ocio
¿Es necesario El Día de las Escritoras o es una invención innecesaria?
Publicado el 27 octubre 2016 por CastillosenelaireCómo nos gusta polemizar. Debatir y discutir parecen ser deportes cada día más alimentados y más recorridos por cientos de miles de personas cada día. Las redes sociales digitales han contribuido al crecimiento de las discusiones por todo, en ocasiones con razón y en otras… bueno, supongo que también tendrán las suyas los que polemizan.
La última polémica a la que he asistido y sobre la que he charlado bastante es esa celebración de la semana pasada del Día de la Escritora, que se ha decidido conmemorar anualmente el lunes que llegue después del 15 de octubre, festividad de Santa Teresa de Jesús.
Y hemos tenido lío, como no podía ser de otra forma. Que si es bueno que se celebre este día, que si es malo, que si por qué no hay también un día del escritor… que ya hemos superado las desigualdades… y en estas estaba, sin saber demasiado bien si se necesita o no un Día de las Escritoras, cuando escuché en la radio que el Museo del Prado, por primera vez en sus más de 200 años de historia, por fin, le iba a dedicar una de sus exposiciones a una mujer, la primera mujer, una sola mujer… y, ya más tarde, he leído que esta pinacoteca, una de las más importantes de todo el mundo, tiene obras de 5.000 hombres. Y solo de media centena de mujeres.
No sé a vosotros, pero a mí no solo me parece una vergüenza, sino que, además me desilusiona y me entristece. Me asusta que nadie, ¡en dos siglos!, haya intentado que se rompa esta injusticia.
Aunque ayer escuché algo todavía peor… dicen los que saben de economía (lo que tampoco viene a decir mucho a su favor, porque la Economía es la Ciencia que siempre acierta las cosas cuando ya han sucedido), que la Igualdad económica entre hombres y mujeres no llegará al primer mundo hasta dentro de 170 años (si seguimos por aquí, supongo). Vamos, otros dos siglos de desigualdades sin corrección. ¿No es como para hacérnoslo mirar?
Si nos vamos al mundo de las letras pasa algo muy parecido e igualmente irritante, especialmente cuando todos sabemos que ha habido, hay y habrá tantas mujeres creadoras, y tan buenas, como hombres creadores. Puede que en ciertas épocas existiese una diferencia de educación y de posibilidades (y aun así hay excepcionales creadoras en todas las épocas), pero hoy… ¿nos sigue extrañando que exista machismo entre nuestros niños y jóvenes? Es algo que todos aguantamos sin protestar. Que pasa sin que nos asombre. ¿Cómo es posible que en los Premios Nacionales, en los Cervantes, en nuestra Real Academia de la Lengua… y en tantos y tantos sitios de relumbrón, sigan creciendo las diferencias entre hombres y mujeres? ¿Cómo permitimos que esto siga pasando?
No pido que se den premios a mujeres por el mero hecho de serlo, por supuesto que no, porque entonces se desvirtuaría lo que se quiere premiar, ni tan siquiera quiero que una mujer cobre más que un hombre por tantos años de desigualdad a la contra. Tampoco pido cupos ni tonterías semejantes. Ni tan siquiera pido que usemos el “miembras” como parecían necesitar algunos, pero sí que pido que exista igualdad en el trato, en el sueldo y, lo que me parece más importante, en el reconocimiento. Nada más.
Y, fijaos, un detalle tonto para volver a reiterar la necesidad de celebrar un Día de las Escritoras. Ayer, mientras buscaba las efemérides literarias del día (esas que siempre arrancan Castillos en el Aire con un poema o con un texto de un autor o una autora del día) me encontré con dos fallecimientos y dos nacimientos. En las listas de efemérides me topé con el nacimiento del ruso Andrei Bely y del español Manuel Rivas, además de con la muerte del griego Nikos Kazantzakis y del portugués José Cardoso Pires… pero, en esa lista no había ni rastro, por ejemplo, de Karim Boye, la escritora sueca que abrió nuestro programa el miércoles pasado. Y esto es algo que ocurre con relativa frecuencia, hay que buscar a las autoras, no te las encuentras a la primera. Hay que rebuscar un poco más para hallarlas.
No sé vosotros, pero yo creo que sí, que un Día de las Escritoras es necesario. Desgraciadamente todavía lo es.