Desde la caída del Talibán en 2001, el fútbol femenino en Afganistán se vio como un símbolo de que el país viviría una nueva etapa de libertades para las mujeres, sin embargo, recientemente el Comité Olímpico afgano reveló una impactante verdad.
Lo que se veía como un triunfo social y deportivo, se convirtió en una oportunidad para hacer de las mujeres afganas que practican el deporte, víctimas de abuso sexual en el fútbol femenino.
La excapitana de la selección afgana, Hahlida Popal es una de las deportistas que ha denunciado en varias ocasiones los abusos, según ella el abuso sexual no está solo en la Federación de Fútbol sino en otras disciplinas deportivas de su país, por lo que, es necesario luchar contra eso.
Desde el viernes pasado el tema ha escandalizado al rubro deportivo, la FIFA confirmó que ya se está trabajando en las respectivas investigaciones de las denuncias interpuestas por varias jugadoras de la selección femenina de Afganistán
Por su parte, el presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, aceptó la gravedad de las denuncias, ya que los afganos se escandalizarían y no dejarían a sus hijos practicar deporte, por lo que, reconoció la importancia de actuar efectivamente.
Algunos dirigentes deportivos ya fueron citados por el parlamento afgano para indagar sobre los hechos.
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