Qué felicidad fue volver a las Cataratas del Iguazu 🦋.
Tanto J como yo vinimos varias veces: por trabajo, por placer, porque sí. Pero nunca habíamos venido juntos. De pronto, se armó escapada express y pasamos dos días increíbles! ♡
Iguazú es de esos lugares que vale repetir, una y mil veces. La energía maravillosa de las "aguas grandes" (eso significa Iguazú en guaraní) es única. El movimiento e intensidad constante de cada salto. La tierra colorada, los sonidos y verdes de la selva... la naturaleza emocionando cada partícula de nuestro ser.
Pasamos un fin de semana soñado en una de las Maravillas Naturales del Mundo, Patrimonio Natural de la Humanidad. Sin dudas, uno de los destinos imperdible de nuestro país, que compartimos con nuestro vecino Brasil.
Con un entorno tan maravilloso como toda la variedad de verdes de la selva misionera, amé que los espacios del Loisuites Iguazu se hayan pensado para disfrutarlos con todos los sentidos.
Las habitaciones están distribuidas en varios módulos unidos por puentes colgantes y caminos de piedra colorada.
La decoración es simple: mucha madera, toques de color y textura donde el protagonista es siempre el afuera.
Lo mejor?! Las dos áreas de piles increíbles: la principal, con diferentes sectores y niveles. Lindísima! Más allá, una pileta balconeando al río Iguazú, con una piscina más pequeña, climatizada y bar. Me enamoré de este spot!
Sin dudas amanecer y volver acá después de recorrer los parques y emocionarse con las Cataratas es un plus enorme! Casi que otro viaje, dentro del viaje.