¿Qué tal amigos?
¿Despidiéndonos del veranito y las vacaciones?
Bueno no deprimiros ni poneros tristes. Pensad que si no hubiese la vuelta al día a día las vacaciones no serían para tanto… ¡vaya chorradas! Queremos más vacaciones, ¿verdad?
Pero bueno, es lo que hay. Y siguiendo con el tema de la vuelta al cole, hoy me gustaría contaros algo que me pasó el otro día.
Pues nada, iba andando por la calle a hacer unas compras y, de forma totalmente casual y no porque me encanten los trapitos (jijiji), me puse a mirar escaparates.
¡Qué agobio! ¡Mangas largas y abrigos por todos lados! Que chocante me resultó ver los escaparates de los grandes almacenes repletos de ropa de súper invierno, esos maniquís vestidos con abrigos, bufandas, jerséis de cuello vuelto… ¿no os agobiáis al ver todo eso?
Lo harán para vender, pero conmigo es todo lo contrario. ¡¿A quién le apetece probarse ropa de invierno estando a más de 40ºC?! A mí desde luego que no, no sé a vosotros. Y lo peor es que dentro de un par de meses (o tres que dicen que el invierno se va a hacer de rogar) veré la misma ropa y me moriré por tenerla. Y peor que peor, estará el doble de caro. Porque desde luego por tener "lo último" la primera no va a ser tampoco.
Me estuve fijando en la gente y nadie se paraba para mirar ni siquiera de reojo, yo comprendo que la cosa esta muy mal y tienen que vender y a nosotros nos interesa comprar lo más barato posible, pero ¿que te pongan ropa de invierno a mediados de agosto? Creo que es una pasada.
¿En vuestras ciudades también están los escaparates de pleno invierno? ¿Os da alergia como a mi verlos con esta calor?
Un besito y a disfrutar de lo que nos ofrece la vida día a día.