19 MAR 2015
El secreto de una buena iluminación en el hogar es utilizar el tipo de lámparas y bombillas adecuadas en función de las necesidades todas las personas de la casa. La distribución adecuada de cada lámpara dentro de las estancias es otra de las claves.
En el post de hoy te ofrecemos algunos consejos e ideas para la iluminación de cada habitación de tu casa que esperamos que te sirvan de inspiración.
CONSEJOS E IDEAS PARA LA ILUMINACIÓN DE CADA HABITACIÓN
En el living o sala de estar realizamos muchas actividades diferentes como ver la televisión, reunirnos en familia o con amigos, leer o descansar.
Por este motivo la iluminación del salón debe ser multifuncional, para conseguir por un lado un ambiente relajado y por otro una iluminación general que permita una visión adecuada sin deslumbramientos.
Una buena idea es colocar luces empotradas en el techo orientadas hacia el suelo y las paredes. De esta forma conseguiremos una luz suave que no produzca sombras.
Para los momentos en que buscamos un ambiente acogedor lo más indicado son las lámparas de pie o de sobremesa, que enfocan la luz hacia el techo.
Si lo que queremos es hacer destacar un mueble, un objeto o un rincón determinado habrá que instalar apliques o lámparas orientadas hacia ese punto.
La iluminación del dormitorio debe centrarse en conseguir un ambiente que invite al relax y al descanso. Las lámparas de las mesitas de noche cumple muy bien esa función. Pero si, además, queremos que nos resulten útiles para leer, los apliques orientables junto a la cama son perfectos para enfocar la luz hacia el libro.
También necesitaremos una luz general que nos permita realizar otras actividades como la limpieza, ordenar armarios, etc. Las lámparas de techo con varias bombillas de la intensidad adecuada son las que mejor cumplen esta función.
Para conseguir una correcta iluminación en el comedor tendremos que poner el foco de atención en la mesa. Si ésta es alargada lo mejor es colocar varios puntos de luz sobre ella a una altura suficiente para que permitan comer con comodidad.
La cocina y el baño son dos estancias donde la luz cobra aún mayor importancia.
La iluminación de la cocina debe cubrir varios aspectos. Por un lado, la zona de trabajo debe tener una iluminación suficiente para evitar accidentes. Para ello resultan muy útiles los rieles camuflados bajo los armarios.
Una lámpara fluorescente en el centro de la cocina servirá como luz general para el resto de actividades. Si, además, tienes una mesa puedes colocar una lámpara de techo sobre ella.
En cuanto a la iluminación del baño ten presente que debe evitar que se produzcan sombras. Lo agradecerás a la hora de peinarte, depilarte o maquillarte. Instala lámparas junto a los espejos pero asegúrate de que no deslumbran y que no están por encima de tu cabeza.
Finalmente, antes de elegir las lámparas estudia la orientación y la cantidad de luz natural que recibe tu casa.
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