Ah, las escenas de acción. Qué maravilla leerlas, disfrutarlas, qué trepidantes, cómo te enganchan.
Y qué absoluto suplicio para mí como escritora.
No hay cosa que odie más y que me de más comederos de cabeza que tener que escribir una escena de acción e intentar hacerlo bien. Como escritora, soy malísima para eso, negada, me amargan la vida. Dejando esto totalmente claro, voy a compartir con vosotros algunas reflexiones a la hora de escribir escenas de acción, que tal vez os sirvan de algo porque aunque como escritora hablo desde la más completa ignorancia, como lectora tengo algo más de experiencia.
Si eres un novato, como es mi caso, y te enfrentas a describir una escena de acción ¿cómo hacerlo y que no termine siendo un completo desastre?
Bueno, la única fórmula que a mí me funciona para no fallar estrepitosamente y escribir algo que al menos sea mínimamente entendible, es la sencillez.
Tengo que mencionar a Brandon Sanderson en esta entrada, como no podía ser de otra forma. Personalmente, su pluma no me parece nada impresionante, simplemente correcta. Pero dale a este señor una escena de acción y la convertirá en una maravilla. Me recuerdo leyendo su trilogía de Nacidos de la bruma y pensando: ¡qué facilidad para describir escenas de acción! ¡Ojalá pudiera hacer yo algo semejante! Lo de este señor tiene mérito, porque encima sus personajes son auténticos ninjas que dan saltos imposibles, que se atacan con monedas y que tienen poderes mágicos. Todo un reto, y aun así, sus escenas de acción parecen fluir solas, son totalmente comprensibles y a Sanderson parece que le sale como de forma natural.
Y su secreto creo que es la sencillez. No se anda por las ramas, con frases demasiado enrevesadas o florituras innecesarias. Va directo al grano, con frases cortas o medias y descripciones precisas de los movimientos. Si eres un novato, como yo, apuesta por las cosas simples. No intentes usar frases demasiado largas porque te enredarás tú solo, y confundirás al lector. Lo que es todavía más importante: no intentes describir movimientos o situaciones demasiado complejas si no estás seguro de que tienes la capacidad de hacerlo.
Como lectora, algunas veces me he encontrado escenas de acción tan complejas, que no me enteraba de absolutamente nada de lo que estaba pasando, y esto me pone de muy mal humor.
Si tienes que releer una escena de acción dos veces para enterarte, es que algo está mal. Y a veces, ni con esas conseguía formar en mi mente la imagen de los movimientos o las posiciones de los personajes. Frustrante. Entre eso o una escena que peque de simple, prefiero lo segundo, que por lo menos me entero de lo que está pasando. Una escena de acción se supone que tiene que ser rápida de leer, no puede hacerse cuesta arriba. Tiene que ser lo más visual posible, dinámica, rápida, acorde con el ritmo.
Así que, lo dicho: si sois como yo que se os da mal escribir escenas de acción, hacedlo de forma sencilla, no apostéis por las cosas complicadas ni difíciles de describir. Si tenéis más destreza y os atrevéis con ello, ¡adelante! ¡a experimentar!