Santiago F. Reviejo, en un escrito sobre este tema publicado hace unos días en Público, insistía en que las personas con discapacidad intelectual siguen conquistando espacios de los que hasta no hace mucho tiempo estaban completamente excluidos porque no se les suponía la aptitud necesaria para disfrutar de ellos. Es lo ocurrido en el tema literario en el que de más de treinta escritores han publicado libros de relatos, novela o poesía, algunos premiados, un novedoso proyecto de la organización Plena Inclusión al que han puesto el título de Personas con Arte.
En España hay cerca de 270.000 personas con una discapacidad intelectual reconocida con un grado igual o superior al 33%, que representan en torno al 9% de todas las personas que tienen una discapacidad valorada en nuestro país. Es un colectivo muy amplio que abre cada día una puerta para salir de la exclusión. El catálogo incluye ya a 31 autores, de diferentes edades y 11 comunidades autónomas, que han publicado en total 46 libros de distintos géneros y en varios de los idiomas oficiales del estado español.
“No se trata de un taller”, subraya Valentina Lara, responsable del área de Cultura en Plena Inclusión, la mayor organización de España en discapacidad intelectual. “Es una apuesta artística seria, que apuesta por la profesionalización de estos creadores. Hay escritores con discapacidad con una creación variada y tan rica que no llegamos ni a imaginar”. La propuesta es muy variopinta. Está, por ejemplo, la de Izan Ruiz, un adolescente de 15 años de Sevilla, con un trastorno del espectro autista (TEA), que ha publicado un libro que él creó de manera oral: grabó primero la historia y luego la transcribió en un ordenador, porque su discapacidad le causa grandes dificultades para escribirla directamente. Se titula ‘El club Zeta’, una novela de corte juvenil que ya ha presentado en varios centros escolares, donde él cuenta su experiencia como escritor y, de paso, ayuda a conocer la realidad de las personas con TEA.
El catálogo“Personas con Arte” n hay escritores laureados, como Sara Pestana, poeta de 29 años nacida en Tarragona y afincada en Avilés, autora de “Trocitos de mí”, un poemario de 128 páginas publicado por la editorial Círculo Rojo. Sara empezó a escribir cuando era adolescente, aunque ya de pequeña había escrito la historia de una niña a la que secuestraba un señor con un globo.“Con la poesía comencé cuando fui a la presentación del libro de una compañera del colegio y me entró el gusanillo. Entonces, le dije un día a mi madre que quería publicar un libro y me dijo que ya veríamos. Hasta que lo conseguimos”. Sara escribe cuando le viene la inspiración, sobre todo por las mañanas, muy pocas veces de noche, al contrario de lo que les sucede a otros muchos creadores.
Ahora, Sara Pestana tiene dos sueños: uno, publicar su segundo libro, del que ya ha escrito algunos poemas; el otro, aprobar las oposiciones de auxiliar administrativo que tendrá el próximo mes de noviembre para conseguir una plaza en la administración de la comunidad asturiana. Y, mientras se cumple uno y otro, sigue desarrollando su otra faceta artística, la de actriz de teatro. “Actuar me gusta casi tanto como escribir”, confiesa.
Curiosamente, sólo una de las obras está escrita en lectura fácil, el sistema utilizado para facilitar la comprensión de textos a personas con discapacidad intelectual. El catálogo es tan amplio que incluye hasta la autora de una obra musical, Leticia Herrero, psicóloga infantil a la que le detectaron un TEA cuando ya era adulta. “Las crisis emocionales que sufrí al enamorarme potenciaron mi creatividad, me llevaron a escribir dos obras: El rastro de mis experiencias y Andanzas de una sirena”, cuenta la escritora. Los responsables del proyecto quieren que siga creciendo, por lo que animan a las personas con discapacidad intelectual a enviarles sus obras editadas para darles difusión.