Pocas más explicaciones. A los 15 minutos llaman al timbre de casa. Mmmm..."Pero si se ha llevado llaves...." Abro y me veo a los niños escondidos en las escaleras del piso de arriba.
- PasadY, mientras les hago cambiarse de cintura para abajo POR ESTO,
- No estamos
- Virgen del amor hermoso como estáis, Pasad a cambiaros ya. ¿Y vuestro padre?
- ¡Ahí abajo!
- ¡Calla chivato!
- Anda que...ya te vale.
- ¡Que ha sido la lluvia, qué culpa tengo yo!
el pequeño me dice:
- La culpa ha sido de papi. Vas a castigarlo, ¿verdad?...Y mientras:
- Ay amigo, cómo lo sabes...
- Que no mami, que la culpa es nuestra que nos hemos mojado.
- Noooo, de papi que nos ha dejado.
- Noooo- Siiii
- ¿¿Pero qué ha pasado??Y aquí tengo al de casi cuatro, con la bata de zorrillo embutido, con dolor de garganta incipiente, a la mediana con semi afonía y una servidora apretando fuerte los puños y rezando por esquivar a los santos viruses. Mientras el santoesposo se dispone a pasar 4 días de trabajo durmiendo a pierna suelta y alejado de estornudos, mocos y niños en general. En otra vida quiero ser marido resfrianiños.
- ¡Que ha sido la lluvia!
- Qué lluvia ni que lluvia...
- Que sí, pero sólo los pies.
- Ya te vale.
- Pues que jugando jugando...y ya ves.
- Alejandro está chorreando casi hasta las ingles.
- Es que se ha venido arriba y en una de esas se ha comido una ola. No veas qué risa...
- Sï, vamos, una fiesta.
-"¡Atchís!"
- ¿Lo oyes? Ya está estornudando.
-Sí hombre, va a ser por esto.
- Claro, como tú no estás la semana que viene, me quedo con los tres malos. Planazo.