Esmeralda de Kerstin Gier

Es Navidad pero que, ¿los voy a dejar sin reseña? No señor, de acá hasta el 31 de Diciembre va a haber post casi (creo) todos los días! =D. Pasemos a este libro, es verde, así que bastante navideño (?)

Calificación de Fede:

Esmeralda es el tercer y último libro de la saga Joyas Preciosas, y antes de este debes de leer Rubí y Zafiro (si le dan click al nombre van a la reseña). 
Tenía muchas ganas de leer este final, y a la vez mucho miedo. Miedo de que claramente Kerstin podría haber tirado toda la saga a la basura si no lo terminaba bien, pero como se habrán dado cuenta en la puntuación, no lo hizo :D.
Los personajes ya los conocemos a la mayoría, tal vez no conozcamos a uno o dos, pero si al 99,9% (?). La lectura fue una lectura MUY Rápida, aunque es verdad que es un poco más densa que el primero o el segundo. Aproveché el christmas-booktubeathon y lo leí en 1 día (en goodreads ya lo había puesto como "leyendo" hace como 1 semana, pero realmente lo leí de Sábado para Domingo). Aunque el amor de Gwen y Gideon se vuelve un poco insulso, lo dejé en segundo plano y me interesé mucho más por la trama que por otra cosa, ¡no iba a dejar que el amor me arruine el libro!.
Xemerius... quiero decir que ese personaje es mi favorito de TODA LA SAGA. Es el mejor y el más divertido. Ya no solo hace chistes, si no que ahora también quiere ser muchas más cosas.
Los viajes en el tiempo se vuelven más interesantes, descubrimos cosas que nos dejan impactados y otras que tal vez las esperabamos. El final, si bien me hubiera gustado un poco más largo, me dejo muy sorprendido, y estuve como 5 minutos para que todos los ladrillitos encontraran su lugar en mi mente y poder entenderlo jajaja.
En fin, recomiendo MUCHO esta saga, pero recomendaría que la lean toda de corrido, yo tuve que releer los últimos capítulos de Zafiro porque si no no iba a entender mucho el tercero XD.
Gracias a Penguin Random House por el ejemplar

Cruza las fronteras del tiempo y encuentra el verdadero amor «¿No podríamos seguir siendo amigos?»Seguro que muere un hada cada vez que en algún lugar del mundo se pronuncia esta pregunta…Pero el perfectísimo Gideon de Villiers —a quien Xemerius prefiere llamar «el innombrable»— no tiene suficiente sensibilidad ni para pensar en las hadas ni para dejar de pisotear mi corazoncito. Si no fuera porque cuando le miro se me corta la respiración y me tiemblan las piernas, le hubiese soltado un bofetón que le habría mandado directo al siglo XIX sin necesidad de cronógrafo… Aunque, en lugar de hacer eso, solo le fulminé con la mirada y me alejé. Al fin y al cabo, éramos los dos últimos viajeros en el tiempo y en pocas horas saltaríamos juntos a 1782 con una misión a vida o muerte…