Esmeralda [El amor más allá del tiempo III], de Kerstin Gier

Qué delicia es acabar una historia como la trilogía El amor más allá del tiempo compuesta por Rubí, Zafiro y, el libro de hoy, Esmeralda.

Para los aún no sepáis nada sobre ella, os diré que en sus páginas encontraréis a Gwen, la peculiar protagonista que por sorpresa descubre que ella es la portadora de un gen que puede hacerla viajar en el tiempo. No es la única, sino que aquellos que tienen dicho gen pertenecen a una especie de asociación que tiene como objetivo cumplir el propósito del Conde de Saint Germain. Para saber más podéis leer la reseña del primer libro. Si ya lo habéis hecho pero no os habéis atrevido a más, aventuraros en la reseña del segundo libro.

No os arrepentiréis.

 Si no habéis leído la primera y segunda parte, recomiendo que no leáis esta reseña pues contiene algunos spoilers. 

Gwendolyn y Gideon están muy cerca de conseguir la sangre de todos los viajeros en el tiempo. Sin embargo, Gwen siente que no sabe toda la verdad sobre los Vigilantes y el cronógrafo y pretende descubrirlo como sea. No será fácil para ella teniendo el corazón roto. Querría estarse horas y horas hablando con Leslie y comer chocolate, pero tiene que emplear sus energías en cosas muy distintas, como seguir las pistas de su abuelo y sobrevivir a los ataques de la Alianza Florentina.

Los hilos que ha tejido el turbio Conde de Saint Germain en el pasado se están comenzando a tensar para urdir una peligrosa red también en el presente. Con el objetivo de desvelar las intenciones secretas del Conde, Gwendolyn y Gideon deberán lanzarse a vivir increíbles aventuras que les llevarán más allá de las fronteras del tiempo…

<<“¿No podríamos seguir siendo amigos?” Seguro que muere un hada cada vez que en algún lugar del mundo se pronuncia esta pregunta…>>

¿Ha sido Esmeralda un buen final de trilogía? Desde luego que ha sido una lectura muy divertida y que me ha mantenido muy apegada a sus páginas. Ya desde el principio se comienza a despejar todas las dudas que Kerstin Gier había planteado en los dos anteriores libros. Comenté en la reseña de Zafiro, que éste era un boom de incógnitas y que tenía miedo de como pensaba resolverlos. El resultado ha sido muy satisfactorio, puesto que además ha relacionado situaciones mostradas en Rubí. 

Ha vuelto la Gwen del primer libro. Al principio creía que no, pero

ha actuado con madurez y ha sabido comportarse ante las circunstancias, que en este caso no han sido nada fáciles después de las simpáticas palabras de Gideon. En general he notado que todos los personajes adoptan una actitud más madura (salvo Charlotte, que ha hecho todo lo contrario). En este libro la familia de Gwen tiene más protagonismo, sus hermanos, su tía abuela saben que Gwen está pasando un momento duro y le ofrecen todo su apoyo, esto me ha gustado porque normalmente parece como si la familia de los protagonistas viviera una vida diferente a éstos.

Como ya he dicho, tiene un ritmo increíble que no deja descanso hasta un final lleno de sucesos. Quizá demasiados. Al acabar el libro me di cuenta de que todo ocurre demasiado rápido, es decir, que la acción sucede a un ritmo vertiginoso que da la sensación de que en cualquier momento la historia se nos va a escapar de las manos. Gwen no tiene ningún respiro y hay aspectos que quizá deberían de haberse tratado con más

calma. Me sorprendo a mí misma diciendo ésto pero la historia quizá debería de haberse trasformado en una de cuatro libros. Me hubiera gustado ver a Gwen y Gideon viviendo más experiencias como viajeros en el tiempo.

Tantos acontecimientos han acabado en un final impactante pero que peca un poco de tener una resolución demasiado fácil. No digo que no me haya gustado pero si hubiera estado más elaborado lo hubiera hecho más. Además, el epílogo me dejó con la sensación de que quería más Gwen, Gideon y compañía. De todos modos, la autora la he dado un final digno a la trilogía. La impresión general ha sido muy buena y al cerrar este último libro he tenido la sensación de haber disfrutado mucho de una trilogía diferente con altas dosis de intriga y risas.