La anécdota o leyenda es conocida. Se cuenta que durante la campaña militar que emprendió Napoleón Bonaparte contra Egipto (1798 a 1799) y durante la Batalla de las Pirámides, Napoleón para dar marcha a sus tropas antes de una gran sangria gritó: “¡Mirad! ¡Recordad que desde esos monumentos, cuarenta siglos os contemplan!” (” Songez que du haut de ces monuments quarante siècles vous contemplent”).
España, una gran parte de España, una parte de España según la policia municipal, algunos españoles según la policia nacional ¿mande? según la Guardia Vil, miran a Gamoral, que rima con Amoral (amoral, falta de moral, y amoral: explosivo utilizado por ETA) como posible o segura espoleta de una revolución en España. El alcalde del pueblo no piensa en los intereses del susodicho y el susodicho sale a la calle y se subleva. Finalmente el alcalde recula, al menos temporalemente.
Creo, es mi punto de vista, que la verdadera revolución en Gamoral, y en España, vendrá cuando llegando las elecciones; el pueblo sea capaz de articular una alternativa política a los grandes partidos españoles. Enfrentarse al absolutismo de un alcalde tiene merito y !OLÉ! por Gamoral, pero lo realmente complicado comienza cuando aquella parte, por pequeña que sea, de democrácia que todavía tenemos en España, obligue a las gentes de Gamoral a tomar decisiones más complicadas que las de enfrentarse a un alcalde y esbirros de la poli.
Luchar contra “el invasor” o contra “el opresor” siempre es más sencillo que luchar contra uno mismo. Ojo, luchar contra el opresor, muchas veces te lleva a perder la vida pero, otro, ojo!, pierden la vida unos cuantos. Es lo que tienen la revoluciones armadas que mueren unos pocos-muchos. Es algo así como una jornada intensiva, donde unos pocos trabajan y mueren para que la gran mayoría se beneficie del atajo (de la revolución). Ser práctico puede ser positivo, serlo cuando hay muertes por medio es mezquino. La sociedad actual es mezquina, sus dirigentes son mezquinos. No importa quién hace de gallina o huevo, ambos son mezquinos.
Mucha gente de España mira con interés de laboratorio lo que sucede en Gamoral, pueden pensar que ir por la vía rápida es una solución y sin duda es una de las soluciones, ya lo he dicho y lo repito !Viva Gamoral! pero luego viene la parte complicada. Y creo que mucha de la gente que quiere la vía rápida es una suerte de gente interesada que lo que quiere es no complicarse la vida. Y no, la sociedad es complicada y debes implicarte. Todo lo que no sea implicación, debate, mojarse, pensar, debatir, currar, ser consecuente o intentarlo… es mezquindad.
Lo demostró el 15M, la alternativa al sistema político actual (podrido) no es sencillo. Se debe aprender mucho, escuchar mucho, tener paciencia, implicarse, buscar consensos…largos, eternos…Y nuestra sociedad no está preparada para ello. No se trata de derrocar al capitalismo, más bien, pienso, se trata de buscarnos a nosotros mismos.
Cinco días de asablea popular y no te quedan ganas de consumir, ni puedes ni quieres. Otro mundo es posible no, otra implicación es posible. Pero es más lenta, pausada, cansada, no tiene nada que ver con el rollo actual. No consumes, te consumes. Te dejas la vida en ello, entre debates, roces, reflexiones, aprendizajes…y poco a poco, tu vida es otra. Mojarte en si construimos o no construimos algo en el pueblo o barrio, si hacemos tal o cual cosa…no es nada sencillo. Aquí está la revolución de cada uno, el decidir, el asumir que dedicarás un tiempo que piensas que no tienes, a mojarte en tu barrio, pueblo, país….