Para qué ir más lejos. Ahora resulta que empresas multinacionales usan a España como paraíso fiscal y aquí paz y después gloria. Esto, que ocurre desde 2001, sale ahora a la superficie.
Y no es que estas empresas actúen fraudulentamente, no. Simplemente se aprovechan de la ley. Y es que en España existe un tipo de empresa ETVE (entidades de tenencia de valores extranjeros) que debería servir para que no se pagaran los impuestos dos veces, en el país de origen y en el de destino.
Pero claro, resulta que estas ETVE se están utilizando para no pagar impuestos. El caso de Exxon (la primera compañía del mundo en facturación) es alarmante. Sin hacer trampas, sin fraude ninguno, ExxonMobil Spain –la filial española-- ha conseguido ganar 9.900 millones de euros en dos años, con tan sólo un empleado. Y de esa cantidad, no ha pagado un euro de impuestos.
La cuestión no es sencilla de entender, pero se consigue haciendo juegos malabares de ingeniería financiera. O sea desde una empresa de un país A, se da beneficios a otra filial en un país B, y ésta a su vez le paga los beneficios a la empresa base, la central, en el país C. España es el país B, recibe beneficios del país A y luego paga (exporta ese dinero) al país C (donde reside la empresa madre). En resumen del país A se envía dinero al país C, vía el país B, sin pagar un euro de impuestos.
Total en Hacienda figura una empresa que ha obtenido beneficios de 9900 millones en dos años y que no ha pagado nada de impuestos al estar exenta por ley. En el caso de la Exxon, el país A es Luxemburgo y el país de la empresa madre, el C, es EE.UU.
O sea que nosotros hablando de paraísos fiscales, de Barbados, de Islas Caimán, de Suiza, de… y resulta que también lo somos. ¡Qué ilusión! Y aquí sin enterarnos.
Todo esto bajo una ley que implantó el gobierno Aznar y que el de Zapatero no ha hecho nada por derogar. Por lo tanto el PP y el PSOE corresponsables de esta trampa legal.
Una prueba más de que la ley del embudo funciona y de que la crisis a los grandes no sólo no les ha afectado, sino que les ha venido de perlas.
Por cierto, no se equivoque usted en 20 euros en la declaración de la renta que le harán pagar los 20 euros, la multa y el recargo en su caso. ¡Faltaría más! Hay que cumplir con nuestras obligaciones. Y los impuestos es una cuestión de pobres.
Salud y República