Hay que estar loco para votar en las urnas a partidos y a personas que se dedican en cuerpo y alma a destrozar nuestra nación. El actual gobierno, delante de nuestros ojos, ha dinamitado el país y destrozando su unidad, sus valores, su riqueza, su cohesión, su alegría, su justicia, su seguridad, su democracia y multitud de logros y conquistas del pasado. Y sin embargo, una parte importante del país está votando a Pedro Sánchez, capitán de la turba pirata. ¿Qué le ha pasado a España? ¿Qué enfermedad padece? ¿Por qué nadie reacciona mientras el país es empujado hacia el precipicio? España es el único país del mundo que prohíbe a sus niños estudiar en español, su idioma oficial. También es el único donde la policía y la Justicia protegen a okupas, ladrones y asesinos y desprotege a sus víctimas. España es un país de locos, cobardes y canallas con mucho poder. ---
Cualquier estudioso de la política, sociólogo o historiador del presente se sorprende ante la diabólica paradoja española: un país que está siendo asesinado sin que nadie reaccione para detener la matanza.
Impuestos insoportables e injustos, desprecio a las empresas acorraladas y a empresarios expoliados, un Estado plagado de políticos a sueldo y enchufados de todo tipo, el Estado más costoso de todo Occidente, el que tiene más coches oficiales, el que regala a sus políticos más privilegios, el que menos controla a los poderosos, el que tiene la Justicia más politizada, el que tiene esclavizados a sus legisladores, que tienen prohibido hablar de otra cosa que no sea la que le ordena su partido, el que tiene más aforados que el resto de Europa junta, el que tiene más políticos cobrando del Estado que Alemania, Francia y Gran Bretaña juntos, y un largo etcétera de abusos, arbitrariedades y canalladas que causan horror y repugnancia.
Los españoles, al no reaccionar ante el drama que padecen y ante la destrucción sistemática a que es sometida su patria por los políticos, demuestra ser también el país más cobarde de Europa y uno de los mas acojonados del planeta. Con diez veces menos desmanes, los franceses, los ingleses, los alemanes, los portugueses y hasta los italianos habrían expulsado del poder a sus verdugos.
La democracia no es un sistema, como muchos creen, para elegir gobiernos que son inamovibles durante la legislatura. La democracia es un sistema diseñado para echar a los gobiernos que abusan del poder y conducen a sus ciudadanos hacia la ruina y el fracaso.
España es el único país del mundo donde se encarcela a un anciano por no haberse dejado asesinar por los ladrones que entraban en su hogar. También es el único país del mundo que tiene leyes que penalizan al varón, solo por serlo. En España, si te acusa una mujer, aunque la acusación sea falsa, estás perdido y tienes tu carrera arruinada. España es el único país que subvenciona a toda persona, organización y partido que atente contra la unidad nacional y el único donde el gobierno indulta a delincuentes golpistas que juran en público reincidir.
La España socialista cosecha fracasos inexplicables, como el de que, a pesar de las leyes que protegen a la mujer y aplastan al varón, los crímenes intrafamiliares y las mujeres asesinadas crecen cada año.
En España es rentable el chantaje de los nacionalistas y golpistas que odian a España porque reciben a cambio más concesiones, privilegios y dinero que los que son leales y cumplidores. España es una llaga purulenta, llena de una pus maloliente, que es su clase política gobernante.
España tiene una ministra que considera que es "precioso" que le digan "tienes el coño como una mesa".
El único país del mundo donde se rinde homenaje a asesinos de cientos de policías, militares y ciudadanos y también es el único donde los herederos de esos asesinos, agrupados en un partido llamado BILDU, se sientan al lado del gobierno para "construir el Estado".
España es el único país de Europa que sienta a los comunistas en el Consejo de Ministros, que da acceso a secretos que comprometen la seguridad de todo el mundo occidental.
Ningún otro país del mundo gasta tanto dinero en comprar medios de comunicación y voluntades influyentes para imponer el pensamiento único y privar a los ciudadanos de la verdad, al mismo tiempo que se difunden falsedades y mentiras en cascada.
Ningún gobierno de Europa gasta tanto dinero público en comprar votos y financiar las mentiras del poder.
España tiene perdidos y deambulando por la calles y plazas, sin control alguno, a 50.000 jóvenes inmigrante ilegales que han llegada a España y que el gobierno no sabe controlarlos ni cuidarlos, pero a los que paga un sueldo hasta que son mayores de edad. Esa masa descontrolada está sembrando de miedo y de delitos la convivencia y la vida diaria.
En España, niñas inmigrantes tuteladas por el Estado han sido prostituidas y violadas, sin que nadie pague por ello.
España es el único país del mundo donde se oculta la nacionalidad de los numerosos ladrones, violadores y asesinos en activo, si son marroquíes o argelinos, para no ofender a sus gobiernos y, según dicen, para evitar oleadas de odio, cuando quien genera odio es quien deja libres por las calles y no castiga a los criminales que andan sueltos en manadas.
Las leyes del gobierno socialista han hecho posible que miles de violadores y pederastas hayan salido de la cárcel o reducido sus castigos. Las leyes también permiten que la sedición no sea castigada, que los delincuentes sean indultados sin control alguno y que los corruptos tengan el camino casi libre para delinquir.
España es el país del mundo donde uno siente más asco cuando se conoce la verdad y se contemplan los abusos y suciedades que emanan del gobierno.
En España los golpistas y nacionalistas violentos tienen impunidad para saltarse las leyes constitucionales, mientras el resto de españoles estamos obligados a cumplirlas.
El nuestro es el único país del mundo donde rey firma indultos en contra del criterio del Tribunal Supremo y de la inmensa mayoría de la población.
España es el país que peor ha gestionado la pandemia y el que más efectos negativos ha sufrido, desde muertes y pérdida de riqueza, por culpa de la mala gestión de un gobierno que no ha pagado por ello.
España es el país que más avanza en ámbitos malignos, como la trata de blancas, la droga, el blanqueo de dinero, la acogida de mafiosos y delincuentes internacionales, el endeudamiento atroz, el despilfarro, a injusticia y un largo etcétera que hacen de la España de Pedro Sánchez una auténtica pocilga.
Los españoles tienen la oportunidad de acabar con esa maldita pocilga construida por los falsos demócratas expulsando a Sánchez del poder, pero las encuestas reflejan que demasiados millones de abducidos y con el alma infectada están dispuestos a seguir apoyando con su voto esa orgía de decadencia y vicio.
Francisco Rubiales