Revista Mundo animal

Especismo de las consecuencias

Por Luistovar

Especismo de las consecuencias
La falacia ad consequientam consiste básicamente en intentar demostrar o refutar un argumento apelando a sus supuestas consecuencias, en lugar de rebatir la validez del argumento mismo. Expondré tres ejemplos muy habituales que se suelen alegar para intentar refutar la validez del veganismo:
  • 1- "Está bien que comamos animales porque de lo contrario moriríamos"
Ante ese argumento hay dos respuestas. Una enfocada a la validez empírica y otra a su validez formal:
Primero; los humanos no tenemos ninguna necesidad nutricional de usar a otros animales para alimentarnos. Una alimentación vegana [100% vegetal], que esté bien planificada, nos aporta todos los nutrientes que requiere nuestro organismo. Tampoco las circunstancias nos abocan a la necesidad de usar a otros animales. El cultivo de la tierra nos suministra todo los alimentos que necesitamos. También existe adicionalmente el cultivo de laboratorio, que es el que nos proporciona la vitamina B12 . El cultivo de la tierra no es menos artificial que el cultivo de laboratorio. Amos son igual de artificiales, e igualmente válidos.

Segundo, la necesidad no es una justificación moral. El hecho de que tengamos necesidades alimenticias no nos justifica en usar a otros animales (u otros humanos) para satisfacerlas - sin su consentimiento y a costa de destruir su vida y su libertad - del mismo modo que el hecho de tener necesidades sexuales no nos justifica en usar a otros humanos (u otros animales) para satisfacerlas sin su consentimiento. Una justificación moral es un razonamiento que se deduce a partir de aplicar los principios éticos básicos. Estos principios son la igualdad (principio de igual consideración) y el valor intrínseco. El hecho de usar a alguien para nuestro beneficio sin su consentimiento no se deduce de estos principios sino que, al contrario, los viola flagrantemente.

Por tanto, si la única forma de evitar la muerte fuera usar a otros animales como comida, seguiría estando igual de mal, del mismo modo que si la única forma de tener relaciones sexuales fuera violar a alguien seguiría estando igual de mal. La necesidad nunca justifica éticamente ninguna acción. Hay otro argumento que reza así:

  • 2 - "Si nos hacemos veganos entonces la civilización humana se colapsará y desaparecerá"
En primer lugar, no hay prueba alguna de que el veganismo suponga una amenaza a la civilización. Nadie puede demostrar tal cosa. Ese argumento falaz también se usó en el pasado para intentar atacar la emancipación de los esclavos humanos o el reconocimiento de igualdad de derechos a la mujer. Tanto los esclavistas como los partidarios del partriarcalismo afirmaban que abolir la esclavitud y el sometimiento supondría, como consecuencia, el caos y la desaparición de la sociedad civilizada.En relación con este argumento se suele alegar a menudo varios disparates como, por ejemplo, el de decir que si dejamos de comer a otros animales entonces su sobrepoblación invadiría el planeta y no nos dejaría espacio a nosotros. La asombrosa estulticia de semejante razonamiento se evidencia simplemente al darnos cuenta de que los animales que usamos para comida son traídos al mundo por los propios humanos. Nosotros los criamos para luego comerlos. Sólo tenemos que dejar de hacerlo. 

Hay otro argumento, igual de disparatado, que afirma que si dejamos de usar animales nohumanos, y todos comemos vegetales, entonces no habrá suficiente terreno cultivable para alimentar a toda la población. Esto es absoluta y totalmente falso. En realidad, los cálculos evidencian justo lo contrario. Aplicando el principio del veganismo al ámbito de la alimentación resulta que necesitaremos mucho menos terreno de cultivo. Entre otras cosas, por la sencilla razón de que en un mundo vegano ya no habría miles de millones de nohumanos esclavizados a los que alimentar.

Existe otro argumento recurrente que se expresa en esta forma:

  • 3-  "Está bien que utilicemos a otros animales para hacer experimentos con ellos porque eso nos beneficia a los humanos"
Como ya vimos en el primer ejemplo, resulta que los beneficios no pueden justificar moralmente ninguna acción. Además, si el beneficio fuera un argumento moral entonces cualquier cosa que nos beneficiara sería éticamente correcta. Pero eso es el beneficio, no la ética. La ética no tiene que ver con el beneficio sino con el deber de hacer lo que es correcto. O como diría Kant

"La moral es en sí una práctica en sentido objetivo - es la totalidad de las leyes obligatorias sin condición según las cuales debemos actuar."
Porque si vamos a actuar de acuerdo simplemente a lo que nos resulta provechoso entonces no tiene sentido que hablemos de moral como si fuera un ámbito singular. Hay muchas cosas que sabemos que nos benefician y al mismo tiempo sabemos que no sería correcto hacerlas, porque dañamos a otros individuos, ignoramos sus intereses o les tratamos como objetos

Por último, antes de finalizar quisiera señalar tres puntos importantes:

Primero; aunque los argumentos centrados en las consecuencias fueran empíricamente ciertos, no invalidarían sin embargo el veganismo. Si los argumentos éticos que fundamentan intrínsicamente el veganismo son correctos entonces no es relevante qué supuestas consecuencias conlleve. Lo contrario sería incurrir en una falacia lógica.Pero, en cualquier caso, las objeciones contra el veganismo basadas en sus supuestas consecuencias negativas son empíricamente falsos.Segundo; es importante no confundir las consecuencias con las implicaciones. Por ejemplo, asesinar a alguien no está mal porque tenga como consecuencia la muerte sino porque implica destruir la vida de alguien para nuestro beneficio u objetivo. Esa muerte no es una consecuencia derivada sino un hecho implícito al propio acto de asesinar. A veces hay cierta confusión entre las implicaciones y las consecuencias. 

Tercero; seguro que más de uno al leer este texto pensará: "ah, entonces hay que hacer las cosas sin tener en cuenta las consecuencias". Este razonamiento es erróneo. En primer lugar, porque la falacia de las consecuencias se refiere específicamente al ámbito de la verdad y de la corrección moral - a la hora de establecer lo que es verdadero o lo que es justo. Y, en segundo lugar, porque no hay nada de inapropiado en preocuparse de las consecuencias. Es decir, si entendemos que el veganismo es lo correcto, entonces debemos llevarlo a cabo. Las consecuencias que pueda traer no son relevantes para determinar su moralidad. Pero sin embargo no tiene nada de equivocado que nos informemos adecuadamente de cómo aplicar el veganismo de forma que no traiga innecesarias consecuencias negativas para nosotros. Por ejemplo, en el terreno de la alimentación. 

Ni las verdades de hecho ni las verdades de razón dependen de sus consecuencias en la realidad. Es una verdad de hecho que todos vamos a morir algún día, independientemente de las consecuencias negativas que eso implique. Esto es una verdad empírica. Del mismo modo, es una verdad de moral que debemos tratar a los demás individuos exactamente del mismo modo en que nosotros queremos ser respetados. Esto es una verdad ética. Lo es independientemente de que sus consecuencias nos gusten o nos beneficien o nos perjudiquen. Pero esto no implica - como ya señalé anteriormente - que no podamos o debamos preocuparnos por evitar consecuencias negativas innecesarias, dentro de los límites de la ética.


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